10 de noviembre, 2020
Tengo ganas de dormir, pero no puedo, tengo que trabajar.
Es martes, pero el domingo tuve el almuerzo con mi hermano, abuela y el que se hace llamar mi padre, como de costumbre y como detesto esos almuerzos, prefiero almorzar solo con Cameron y mi abuela.
Por suerte puse de excusa el accidente y me fui. Por el cual a mi abuela y mi hermano casi les da un infarto cuando se los conté y tuve que soportar el sermón de no habérselos dicho en el momento, pero no me arrepiento.
Dani no va a ir al bar hoy porque se va a quedar estudiando para el examen que tiene mañana así que agarro las llaves y doy un par de vueltas antes de llegar.
Cuando llego no me sorprende ver a Dylan, Patrick –al que comencé a llamar Pat- y a Tyler sentados hablando con Thomas.
El sábado Dani les dijo cuándo trabajamos, haciendo que, claramente, ahora ellos también vengan en esos momentos. También se pasaron sus números, yo no les di el mío, les dije que los conocía hace poco y no acostumbro a dar mi número.
Los saludo con la mano y cruzo la puerta para encontrarme con que Bruno no está.
Salgo con el ceño fruncido y miro a Thomas.
—Tom —me mira—. ¿Y Bruno?
Él se me queda mirando, mira a los chicos que lo miran y vuelve a mirarme apretando los labios.
Mierda, la sensación que tengo no es buena.
Cierro los ojos porque sé que es lo que sucede y solo me pongo los guantes y la camisa ahí nomás, no quiero encontrármelo adentro.
—Ali...
—No Tom, él no es idiota, no me vengas con esas estupideces porque sabes perfectamente que él lo sabe y no hace nada al respecto.
Carajo, sí, estoy enojada.
—Dani gusta de él ¿no? —miro a Tyler y aprieto los labios asintiendo.
—Se nota —dice Pat.
Miro a Tom encarnando una ceja, si ellos, que hace unos días nos conocieron, ya se dieron cuenta, como Bruno no lo va a hacer.
Dani es obvia, como lo mira, como busca llamar su atención, un poco más y se le tira encima. Antes no era así, cuando me lo dijo yo me sorprendí porque disimulaba muy bien, pero ahora ya no sabe que más hacer.
—No puede seguir haciéndole eso.
—¿No hablaste con él? —miro a Dylan.
—Lo intente, siempre evita el tema.
—¿Y si los encierras a ambos hasta que se declaren? —sonrío un poco por la ocurrencia de Pat, pero niego.
—Lo haría si Bruno sintiese algo por Dani.
Veo como ellos ponen una mueca triste y asiento comprendiendo lo que piensan ahora. Es triste, ella enamorada de su mejor amigo y su mejor amigo de chica en chica sin importarle dañarla.
Yo no considero mejor amigo a eso.
Pero ella no lo ve así.
Pero el supuestamente si y la lastima igual.
Cierto.
—El amor no correspondido es una mierda —digo—. Pero es una mierda que después te hace más fuerte y que en algún momento te enseña a valorarte.
Dylan me mira y ladea la cabeza.
—¿Te pasó? —sonrío irónicamente.
—Más veces de las que crees. Solo una vez me correspondieron para después meterme los cuernos y decirme las cosas más hirientes que te puedes imaginar.
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Suspiro de Alivio
Teen Fiction"No siempre quién sonríe es feliz. Existen lágrimas en el corazón que no llegan a los ojos." Jane Austen Esta historia es completamente mía, salió de mi mente, sean creativos y no copien por favor, no hagas lo que no te gustaría que te hagan. Portad...