Esa noche de primavera, el cielo se encontraba estrellado, incontables estrellas podían verse con gran facilidad, pero a pesar de eso, Banna prefirió quedarse en su habitación, tratando de reparar un viejo ventilador que Lewis iba a desechar.
Ella quito los tornillos de la tapa, uno por uno y la quito mostrando todos el cableado y las partes del mecanismo, antes de hacer cualquier cosa, ella se detuvo para observarlo bien, revisar cada pequeña conexión, las partes móviles y el motor, hasta que finalmente encontró lo que fallaba y lo reparo de inmediato.Ella lo ensamblo y lo conecto para probarlo, las aspas giraban a la perfección sin problema alguno y desde luego, Banna se sentía bastante satisfecha con el resultado mientras recogía las herramientas.
-¡Banna! -le grito Shio desde su habitación-
Banna suspiro y fue a la habitación de Shio, en el camino vio que la puerta de la habitación de Shiho estaba abierta y sentía una pesada presencia dentro de su habitación, era fría y densa, casi como si hubiese un fantasma ahí y de pronto escucho varios pasos, uno tras otro se acercaba detrás de Banna, no tenía forma alguna de escapar y se dio la vuelta tropezándose.
Era una chica de piel pálida y cabello negro la que estaba detrás de ella, sus pasos eran tan ligeros que casi se sentía como si estuviese flotando.
-¿Has visto a Shiho por acá? -le preguntó la extrañada ella-
-creo que fue a la tienda -le contesto Banna-
-ya veo -contestó la extraña chica-
Banna de inmediato se dirigió a la habitación de Shio, pero de pronto sintió un escalofrío y se dio la vuelta, pero la chica se había esfumado
Ella corrió al cuarto de Shio sin dudarlo un segundo y apenas abrió la puerta, se percató de lo espacioso que era, en uno de las paredes había una pequeña pizarra de corcho donde colgaba varias de las fotos que tomaba, también tenía una estantería llena de álbumes de fotos y varios cajones donde guardaba toda lo que usaba, desde rollos de fotografía hasta sus cámaras, Banna recuperaba el aliento y se percató de la chica que estaba en el balcón mirando por un telescopio, tan concentrada estaba que no notaba la presencia de nadie más.
-¡Yuki! -le grito Shio tratando de llamar su atención-
La chica se sobresalto y poco después se dio la vuelta tratando de disimular.-¿tu eres Banna no es así? -le preguntó ella-
Banna asintió indiferente y se sentó en la cama de Shio, aún curiosa de lo que iba a preguntar.
-¿podrías ayudarme con eso? -le preguntó ella- ya he intentado de todo, pero lo único que puedo ver en ese telescopio es un borrón.
Banna se levantó de la cama y trató de observar a través de él, de inmediato notó que estaba pasando y fue a buscar un destornillador para ajustarlo.Notó que la chica de antes estaba en la habitación de Shiho conversando con ella mientras miraban una película, la chica parecía estar sosteniendo una extraña roca.
-¿Qué haces ahora, Satomi? -le preguntó Shiho-
-no tengo la menor idea -le contestó ella- iban a tirarlo apenas terminarán con él, así que lo pedí.
Banna recogió el destornillador en su habitación y volvió, ella de inmediato ajusto el telescopio y una vez lo pudo lograr.
Ella observo nuevamente por el telescopio, todo se podía ver claramente de nuevo y empezó a sentirse un poco tonta por no haber podido averiguarlo por su cuenta.
-gracias -le dijo Yuki-
Banna simplemente asintió y volvió a sentarse mientras esperaba a que algo sucediera, el cielo nocturno estaba lleno de estrellas aquella noche, alguien llamó a Shio dejando a las demás solas por unos instantes.
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Filosoda!!
Teen FictionUna chica sueña con una vida mejor que no parece llegar nunca a la vez que se enfrenta a sus viejas memorias