Una cálida mañana de primavera, el silencio invadía la casa, permitiendo a Banna dormir plácidamente, pero esa paz fue perturbada por un breve sonido, el cual le despertó.
En su despertar ella desconecto su celular y reviso aquel mensaje, era de uno de sus compañeros de la vieja escuela, sintiendo escalofríos en todo su cuerpo, empezó a sentir un dolor punzante en el pecho, de inmediato ella se acurrucó entre sus rodillas respirando hondo, se pronunciaba a si misma "una pieza a la vez" una y otra vez hasta que finalmente pudo calmarse.
-¿Por qué no me dejan en paz? -dijo ella frustrada- ya me fui justo como querían, pero aún...
En su frustración ella apago su teléfono y decidió bajar a regar el jardín, Lewis estaba preparando el desayuno como de costumbre.
-Buenos días -le dijo con ánimos Lewis-
Banna simplemente le asintió y siguió su camino indiferente de lo que pasará, recogió la regadera y la lleno en el tubo que estaba a un lado del jardín, mientras Shoko estaba arrancando los hierbajos.
-supe de lo que pasó anoche -le comentó Shoko-
-yo no...
-esta bien -le contestó ella- hay veces donde no podrás controlarlo.
-lo sé muy bien -contestó Banna al regar las flores- pero, no siento que deba depender tanto de ustedes.
-eso lo entiendo -respondió Shoko tras quitar el último hierbajo- está bien querer un poco de independencia, pero a veces no está mal pedir un poco de ayuda.
Shoko se quito los guantes y los dejo en el balde que tenía a su lado y se fue tras recoger la bolsa con hierbajos.
Banna empezó a regar las flores, disfrutando de los aromas, permitiéndose olvidarse de todos los malos pensamientos en su cabeza, regaba las flores en paz, una parcela a la vez, hasta que finalmente terminó de regarlas todas.Y volvió a entrar para encontrarse con Lewis, Shoko y Shio comiendo, ella prefirió terminar de comer e irse por su cuenta sin explicar más.
Trataba de no pensar demasiado en aquel mensaje hasta que de pronto escucho la voz de Sun desde su espalda.
-escuché que la nueva profesora llega hoy -le dijo Sun alegre-
-eso fue rápido -le contestó Banna ligeramente sorprendida-
Sun acompañó a Banna hasta el salón donde esperaron a que empezara la clase, Shio apareció tiempo después con algunos rasguños en su rostro.
-¿Qué fue lo que te pasó? -dijo Sun-
-traté de tomarle fotos a un gato -dijo ella sonriente- se parecía demasiado al que perdiste el año pasado.-¿en serio? -le dijo Sun- quizás y sea él.
-podríamos ir a ver después, siempre se queda en el mismo lado -sugirió Shio- ¿te apuntas Banna?
-lo siento, pero no puedo
-ya veo -comprendió Shio- nos vemos en casa entonces.
Las campanas sonaron dando comienzo a las lecciones, hasta que la vieja profesora apareció.
-se supone que ya debería haberme largado de aquí -dijo la profesora- de todas formas, démosle una cálida bienvenida a mi remplazo.
ESTÁS LEYENDO
Filosoda!!
Teen FictionUna chica sueña con una vida mejor que no parece llegar nunca a la vez que se enfrenta a sus viejas memorias