Treinta y cuatro

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Empapado hasta los huesos no sentía el frío, la simple seguridad de lo que había descubierto en medio del bosque era suficiente para mantener la calidez en mi interior.

Y allí seguía el amor de mi vida: sentado en el torno, moviendo el pie sin parar, con rostro serio, cansado y sucio de tantos intentos fallidos por hacer figurillas.

Sucio, sudado y estresado seguía viéndose hermoso.

- Hola Jimin.

Mi saludo lo paralizó. De golpe su pie se detuvo y sus manos se endurecieron como una roca.

Otra pieza arruinada, pero esta vez gracias a mí.

- ¿Yoongi? – Su tono de voz había cambiado. Se había ablandado como la arcilla que tenía entre sus manos, aunque era tan delgada como para romperse en cualquier momento – ¿Eres tú o es que finalmente enloquecí...?

Entré al granero después de haber caminado lentamente a través de la densa cortina de agua que colgaba de las nubes grises y tristes de esa noche. Con cuidado dejé un calcetín viejo sobre una silla gastada y volví a mirarle.

- Regresé Jimin... Finalmente volví.

Su cara era una guerra de sentimientos: amor, odio, tristeza, felicidad, rabia y melancolía. Absolutamente todos pude verlos en el brillo que despedían sus ojos marrones mientras miraba en mi dirección.

- Tú... tú te fuiste por mucho tiempo.

- Sí, lo hice – tragué saliva apenado – Pero regresé por ti.

- ¿Por mí? – carcajeó soltando un montón de lágrimas – ¿Por mí dices? ¿Acaso me estás gastando una broma?

- No... claro que no. Te digo la verdad.

- Pues la verdad es que el amor que alguna vez dijiste que me tenías no vale nada – se puso de pie aferrándose a el torno para no caer – Te fuiste por un montón de meses y ahora vuelves haciendo como si nada pasara ¿Qué demonios crees que soy?

- Jimin ¿por qué...?

- ¿Que por qué me comporto así? – sollozó dando largos pasos hacia mí. Sabía de mi ubicación por mi voz – ¡Porque te necesité, Yoongi, y no estuviste! ¡Y toda esa mentira que me comí desde pequeño acerca de que el amor es algo genial era una puta mentira! ¡El amor no es bonito, solo te hace sufrir!

- Jimin yo te amo, no digas esas co-

- ¿Sabes cuanto te necesitaba? – gimoteó limpiando sus lágrimas con brusquedad – Ni siquiera me enviaste una carta, ¿sabes lo preocupado que estuve por ti? ¡Los soldados mataron a mi madre y a mi hermano! ¡¿Qué me aseguraba que no te habrían hecho algo a ti también?! Y no digas estupideces como que me amas o algo por el estilo, ¡porque no lo haces! ¡Solo me tienes cariño por los años de amistad que tenemos, pero nada más!

- ¿Qué rayos estás diciendo?

- ¡Que tú no conoces el amor verdadero, Yoongi! – ladró dolido – Yo no dejé de pensar en ti ni un maldito segundo, pero tú ni siquiera tuviste tiempo para escribirme una carta avisando que seguías vivo...

- Jimin sé que estás alterado por las cosas que pudieron haber cambiado en tu vida, pero el amor no muere a pesar del tiempo. Créeme, yo te amo de verdad...

- ¡Tú no sabes nada de mi vida! – gritó furioso – Hace casi diecisiete años que estoy estancado en el mismo lugar. ¡La puta mierda de vida que dices ser amor, flores y felicidad se ha encargado de arrebatarme todo y ahora ni siquiera tendré un techo donde vivir! ¡Casi diecisiete años y sigo sin dar un paso adelante o atrás porque sigo hundido en la mierda completamente solo!

7 VIDAS | YOONMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora