What I am to you is not real
What I am to you, you do not need
What I am to you is not what you mean to me
You give me miles and miles of mountains
And I'll ask for the sea
Volcano - Damien Rice
-Había pedido específicamente que no te sirvieran nada- dijo Fabio, levantando una ceja con gesto de reprobación.
-Ya, es que soy majo. A Eden le caigo genial.- Ezra no se movió ni tampoco varió su postura: se había sentado en uno de los taburetes junto a la barra. Tenía los brazos cruzados apoyados sobre la superficie que, tan temprano, aún no estaba húmeda ni pegajosa. Habían abierto poco rato antes y no se prometía aquella como una noche prodigiosa, pero estaba bien.
Ezra había ido pronto porque sabía que Fabio siempre llegaba un poco tarde. Normal, claro, si él fuera el jefe no se haría mala sangre con eso de los horarios. El chico sabía que en aquel momento le estaba juzgando igual que sabía que se lo merecía. Así que, por mucha rabia que le diera, no le quedaba otra que aguantar.
Delante de él la cerveza estaba calentándose y el botellín estaba a medias. No tenía ganas de emborracharse. Bueno, sí las tenía, claro, pero no lo tenía que hacer así que simplemente no lo hacía. Por contra de lo que los demás pensaban lo cierto es que Ezra solía saber bastante bien qué hacía la mayoría del tiempo.
Llevaba un tiempo sin salir de casa. Había dormido mucho, había comido mucho, había visto un anime tras otro en un ambiente oscuro y deprimente. Había escrito a Leb y él no le había contestado, lógicamente, porque era rencoroso que te cagas. Y porque él había sido un gilipollas, claro.
Juliet le había escrito un par de veces también. Nada concreto, no habían tenido que mantener una conversación. Ezra no se sentía aún listo para mantener conversaciones importantes. Y ella, como siempre, parecía entender esas cosas. Parecía estar dándole un tiempo que necesitaba. No le importaba hacer rabiar a Juliet. De hecho era insultantemente fácil enfadarla. Pero no podía con hacerla llorar, no a ella, con todo lo que eso significaba. Se había sentido una auténtica basura porque se había comportado como una auténtica basura.
Había cosas que no tenía que explicarle a Juliet y ella las entendía. Y había cosas que él no quería ver, pero ella las veía. Una de ellas era que, si no hacía algo, iba a acabar como Celine. Por eso tenía que empezar por cambiar las cosas. Por eso había reunido fuerzas para empezar a disculparse.
-La verdad es que sí, lo eres.- Fabio resopló. Secaba vasos con un trapo con gesto de tipo duro y se había hecho las trenzas con hilos rojos. Siempre se ponía colores en el pelo. Eso le gustaba.- Igual que también eres un gilipollas a veces.
-Soy un auténtico gilipollas. Sé ser majo y sé ser gilipollas. En ambos casos me sale genial. El más majo y el más gilipollas.- Ezra arañaba distraído el adhesivo de la cerveza, una marca artesana ecofriendly que no era tan cara como en otros sitios porque Fabio conocía a los dueños.- En ambas cosas soy buenísimo.
A Fabio le dio rabia reírse, pero lo hizo. Y también se dio cuenta de que él estaba un poco hecho polvo así que no estaba tan cabreado como debería.
-Es cierto, se te da bien entender a las personas.
-No, entenderlas no.
-Sí, Ezra. Eso es justo lo que haces. Aunque luego te de igual.
Qué chungo, qué mal tío. Pues sí, a lo mejor eso era, que le daba igual. Que se había acostumbrado a que le diera igual porque si no todo era demasiado complicado.
-Lo siento.
-¿El qué?
-Joder, Fabio, tampoco te pases, ¿no?- protestó el chico.- Que nos conocemos de toda la vida.

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Salvajes
TienerfictieJuliet está rota porque quien debía quererla no la quiso. Ezra está en guerra con el mundo porque no sabe hacer otra cosa. LeBlanc tiene miedo de admitir que está enamorado. Summer siente tanta culpa que no es capaz de vivir del todo. Grey no tiene...