Capítulo 57 | AnnikaMe había quedado parada en la pequeña terraza que tenía. Quería lograr olvidar las cosas que habían pasado esta noche. Aunque aún tenía las dudas en mi cabeza. ¿Quién era ese jefe que tanto mencionaba? ¿Por qué me quería a mí? Y lo más importante ¿Por qué quería ir detrás de mi hermana? Aquel sujeto me había dejado con más preguntas que respuestas. Lo más probable era que ese jefe suyo quería vengarse de alguna forma y entonces había mandado a ese sujeto a querer aprovecharse de mí, pero...había algo más.
En ese momento sentí unos brazos rodearme sobre mi cintura.
—¿Ya estás mejor?—asentí y recosté mi cabeza sobre su pecho.
Miré sus manos sobre mi cintura y me percaté que no tenía el anillo que me había dado.
—Lo he perdido—dije mientras me miraba el dedo—¡Oh, dios mío!
—¿Qué te ocurre?
—Lo perdí. Perdí el anillo, Daniel era tu anillo.
Soltó una risita y lo miré con tristeza.
—No lo has perdido aún—sacó del bolsillo de su pantalón el anillo que me había dado. Casi me pongo a llorar por haber creído que lo había perdido. Me tomo mi mano y antes de deslizar el anillo dijo lo siguiente: —Con esté anillo te entregó mi corazón, Annika. Recuerda que en él vives tú. Tienes mi alma y mi futuro en tus manos.
—Daniel...—lo llamé. Mi mano acarició su mejilla y le di un beso—Gracias—dije.
—¿Por qué?
—Por cambiarme la vida sin cambiarme a mí, por protegerme, por amarme con todos mis miedos que llevó dentro.
—Ann—me sujetó de la barbilla—Te amaría de cualquier forma, en cualquier mundo, con cualquier pasado—me limpió una lagrima que salía de mis ojos—Annika, eres la chica que me hizo sentir por primera vez lo que era enamorarse, me hechizaste desde la primera vez que te conocí en aquellas escaleras—sonreí.
—Daniel, me salvaste, me sacaste de ese maldito hoyo negro del cual pensé que nunca saldría.
—Cómo me gustaría decirte las cosas que estoy pensando en este momento, pero quería que fuera un momento especial y romántico para ti
—Dímelas. No importa que no sea el momento perfecto, adecuado o romántico. Si viene de ti y de tu corazón siempre va a hacer especial.
Hubo un poco de silencio antes de que comenzara a hablar. Tomó un poco de aire y dijo lo siguiente:
—Quiero ser tuyo, quiero que seas mía. Quiero tocarte, quiero sentirte, no sabes las ganas que tengo de hacerte el amor, de hacerte mía, de escuchar tu melodiosa voz cuando te vengas. Pero no quiero presionarte sin que te sientas segura y lista.
Lo tomé de las mejillas y lo atraje hacía mí.
—Entonces hazlo. Tócame, bésame, acaríciame en cada rincón de mi piel. Porque solamente tú sabes cómo quererme.
Rocé su cuello con mis labios, probé su piel y le di un beso tierno. Miró sorprendido hacia abajo. Mi mirada se encontró con la suya. Se inclinó hacia abajo y apretó sus labios contra los míos. Ahora que dimos el primer paso, no pensaba en detenerme ahí.
—Hazme tuya—susurré.
Volvimos a besarnos y caminamos dentro del apartamento sin dejar de comernos. Mis manos bajaron hacía su corbata y empecé a deshacerle el nudo mientras la lanzaba, mis manos se posaron en los botones de su camisa. Cuando estaba por desabrochar el primer botón cogió mis manos y se apartó de mi a centímetros de mi cara.
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Into You © | ✓
Novela JuvenilAnnika Pierre vive atrapada en sus pesadillas de su adolescencia llevándola a mantener un perfil bajo cuando se trata de chicos. Es el tipo de chica que lo tiene todo al ser hija de un empresario millonario. Cuando Annika llega a su último año de i...