Pelea de Hermanos

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De puntillas como si fuera un tanuki* ladrón entrando a su propia vivienda, Kyojuro ingreso acompañado del segundo hermano, rezando a los dioses no ser pillado por su progenitor a esas horas del dia.

La temperatura comenzaba a ascender, tal vez su padre al igual que el sol, los esperaría con una mirada abrasadora.

- Yo asumiré toda responsabilidad- Manifestó el Pilar.

- ¿Crees que Padre este demasiado molesto?- Pregunto Senjuro, cabizbajo y apretando su haori.

- No te quedaste a dormir en casa, el no tolerara esa clase de indisciplina- 

El lugar estaba deshabitado, el mayor de la familia ¿Dónde se encontraría?.

Kyojuro dejo caer su cuerpo sobre el futon y suspiro de alivio.

Era agradable ver la luz del dia iluminando la habitación y los cabellos rubios del Pilar; sin embargo su hermano menor queria, mas bien debía contarle cierto asunto.

- Hermano, no quisiera interrumpir tu descanso- Comento Senjuro- Pero hay algo que me inquieta.

- Padre no esta, nos salvamos- Expreso, rodando de lado a lado sobre la cama- Solo dímelo, por favor- Cerro los ojos, en signo de tranquilidad.

- Hace poco, Harumi...- Pauso, era un tema delicado.

- Es una niña hermosa, aunque anoche nos dio un gran susto- Murmuro descendiendo el tono de su voz- Mi hermana es tan linda- Y asi hasta quedarse dormido.

El pequeño rubio sonrie condescendiente y arropa a su hermano con una blanca sábana.

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En la casa de Suzume, ella tendía la ropa aprovechando el enorme sol y era acompañada de Akane, le había contado todo lo sucedido, se sentía culpable por ausentarse cuando mas necesitaba que cuidara de Harumi..

- No tienes por que disculparte- Menciona la castaña negando con ambas manos- Intentaba descargar mi preocupación, a la larga solo será una anécdota.

- Yo no imagino la angustia por la que habrá pasado y sola-

- Senjuro estaba conmigo- Se llevo una mano detrás de la nuca- Es un chico muy amable, nunca me dejo sola.

- ¿ Y Rengoku-san?- Se refería al padre.

- Ah, no lo se- Desvió la mirada.

El sonido de la puerta interrumpió su platica, Akane iba a salir a atender pero Suzume se ofreció gentilmente, la pelinegra se sentía cómoda porque el trato sencillo que ostentaba.

- Yo ire avanzando con el almuerzo- Puntualizo con alegre sonrisa.

Por otro lado la chica de pelo corto, se dirigió a la puerta, canturreando como los gorriones de su jardín.

La conmoción se reflejo en su cara al abrir la puerta.

- T-tu- Articulo apenas una palabra de la sorpresa.

Shinjuro paso por su lado y su aura era similar a un volcán en erupción.

- ¡¿Adonde vas?!- Elevo la voz exaltada.

Sobrepaso el jardín, el genkan* y dejo sus sandalias para recorrer la habitación entera y dar con su hija, observo silente sin que nadie lo notara, se dio cuenta que no solo estaba Harumi sana y salva, pelando una naranja, también se encontraba Akane guisando la carne.

Se mío Rengoku-san (Rengoku x OC)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora