Al remendar al conejo de felpa no quedo igual.
La mañana se tornaba color desesperanza, hace varios dias que Kyojuro no la visitaba, notablemente distante desde que Harumi regreso a casa.
Para compensar su ausencia, Senjuro la acompaña con excusas de falta de tiempo o trabajo excesivo, es el escudo de su hermano mayor ante las excesivas preguntas de la mujer.
En medio del jardín, bajo el gran arce y el árbol de cerezo, ella intenta arreglar ese peluche preferido de su hija, pero no hay solución.
Lo que esta roto, no cobra su forma anterior.
- Se ve raro, parece un monstruo- Comento Suzume con tono abatido.
- No puede verse tan mal- Senjuro se acerco para inclinarse y ver el conejo- Entiérralo, esta sufriendo.
Ella no tardo en reír, con el se sentía relajada, con solo estar a su lado se animaba por su tierna aura.
- Es cierto, es cierto- Se limpio la lagrimilla que se avecinaba en el inferior de su parpado- Quisiera comprarle otro y he buscado cada tienda en la ciudad.
- Resulta que de esos conejos, ya no existen por estos lares, fue una edición limitada- Agrego Senjuro.
- Aunque le queda el que le regalo su padre- Ella levanto la mirada al cielo, con algo de confianza- Espero que comprenda que ya no se quedara con ambos.
- Ahm, con respecto a eso- El se rasco la mejilla- Mi hermana dice que le falta su compañero y estará triste por ello.
Suzume queria desmayarse.
¿De donde sacaría otro peluche?
- Tal vez, encuentre uno durante el viaje- Relato y suspiro con desgano- Mi salud, cada vez es mas delicada y hay un buen medico en la ciudad a la que iré.
El pequeño la observo inquieto, puso una mano sobre su frente y pregunto:
- Si, me lo contaste ¿No lo recuerdas?-
La chica entreabrio los labios, no sabia si era el cansancio o las constantes preocupaciones las que la mantenían desubicada y aturdida.
- Debo estar distraída, lo siento- Manifestó, con sonrisa plana.
Fingía ser natural, no darle importancia para aliviar la mirada preocupada de Senjuro. Después de despedirse, el regreso a casa.
.
.
.
En la mansión, Akane se quedaría cuidando de la niña; sin embargo hay momentos en los que sale a realizar las compras.
Hace breves instantes, Harumi jugaba en el jardín con el temari, hasta que escucho la discusión entre su padre y su hermano mayor. Kyojuro le contaba animado de su nueva misión y que si un dia decidiera completar su entrenamiento, estaría profundamente agradecido. Shinjuro no recepcionó bien esta idea y su temperamento se libero en gruesas y terribles palabras.
A pesar de la tormentosa escena, Kyojuro se despide con una venia, da unos pasos para acercarse a Harumi y la abraza diciéndole que todo esta bien, que no culpe a nadie de lo que vio.
La pequeña siente las cálidas manos de su hermano acariciando sus rizos y luego el, sonríe una vez mas y la deja atrás, para seguir con su trabajo. Ella no soporta que su progenitor sea tan injusto y no esta dispuesta a callar.
ESTÁS LEYENDO
Se mío Rengoku-san (Rengoku x OC)
RomanceA plena luz de sol yo vivo en tinieblas y ahi sentada en mi desdicha lo observo a el, un ser lleno de luz y claridad. Dedicado para todas aquellas personas que en en algun momento de su vida estuvieron entre la espada y la pared a la hora de decidi...