MELODÍA A MEDIA NOCHE (Jimsu)

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El asalto de Yoongi fue tan intenso, abrasador que Jimin sintió un millón de sensaciones, envuelto entre el placer, la sorpresa pero hubo un sentimiento más entre todos ellos, había una sensación que emitía Yoongi, como si estuviera desesperado, como si hubiera estado esperando esto desde hace mucho tiempo y él, sin tener la cordura siguió el beso de Yoongi.

Aquellos labios que tomaron los suyos con pasión, con cariño y sensualidad eran tan cálidos y tan suaves que los saboreó, acarició y se sumergió en las profundidades de la boca de Yoongi, acariciando su lengua suavemente mientras su cuerpo se calentaba gradualmente a medida que el beso se tornaba peligrosamente ardiente.

Y cuando el lugar en el que estaban era lo menos que le importó a Jimin en ese momento, Yoongi se alejó con una sonrisa victoriosa retrocediendo perdiéndose entre la multitud diciendo que iría al baño, dejando a Jimin más caliente que un volcán a punto de entrar en erupción y con una mirada intimidante que casi hace a Yoongi correr a sus brazos nuevamente.

Yoongi no podía creer que al fin había besado a Jimin como tanto deseaba, claro que antes lo hizo pero no había sido tan satisfactorio como este, en el cual ambos estaban totalmente entregados, claro que el primero fue muy divertido y satisfactorio pero no se igualaba con el calor de tener el cuerpo de Jimin aprisionando el suyo.

Al tomarse un tiempo para clamar su corazón y otras partes de su cuerpo se obsevó en el espejo por un momento y al alzar la vista al sentir a otra persona a su espalda se encontró con un doncel de finos labios, con una mirada gatuna y de cabello a la altura de sus orejas de color rubio platinado.

-Acaparé el espejo-habló Yoongi con una sonrisa burlona-lo siento-dijo al dar un paso a un lado con la intención de salir del baño-te lo dejo todo para ti.

-Mi jefe quiere verte, puedes venir por tu voluntad o puedo llevarte.

-Prefiero no ir.

-No me gustaría hacer un escándalo Señor Min. A mi jefe no le gusta llamar la atención, le gusta la discreción.

-Dile a tu jefe que envíe una invitación la próxima vez.

Sin tener intenciones de mover un dedo para defenderse Yoongi caminó a la salida mientras sentía al otro doncel venir tras de él y cuando sintió el dolor de un electrochoque rió a carcajadas antes de caer inconsciente.

En el exterior Jimin esperaba a Yoongi impacientemente, ya se había tardado demasiado en salir por lo que decidió preguntar a un doncel que estaba saliendo si no vio a alguien de estatura media de color de cabello negro y de piel blanca dentro.

-No vi a nadie así, lo siento-emitió una disculpa aquel doncel para luego caminar lejos.

Lleno de preocupación Jimin entró al baño sin interesarle en lo más mínimo las exclamaciones molestas de los donceles dentro. Buscó a Yoongi por el baño y golpeó en todos los cubículos sin obtener respuesta de Yoongi. Pensando una y otra vez sí vio a Yoongi salir del baño o no, al estar totalmente seguro de que no lo vio salir, Jimin salió por la puerta del baño en busca de Yoongi, fue a todas partes de la pista hasta ir a la segunda planta y desde ahí observó todo a su alrededor y por un momento observó a un hombre o parecía ser un doncel llevando a Yoongi a rastras.

Jimin empujó a todas las personas del lugar en su intento de llegar hasta donde estaba Yoongi cerca de la salida siendo llevado casi inconsciente pero las personas que estaban bailando por todas partes no dejaban que avanzara tan rápido como quería por lo que decidió empujar mucho más fuerte y gritando casi como demente que se hicieran a un lado.

Cuando al fin pudo salir del club, un par de hombres se estaban llevando a Yoongi al final de la calle donde estaba esperando una minivan con la puerta lateral abierta.