-¡¿Dónde estás Min?!-los gritos de Jimin se pueden escuchar por la enorme mansión que recientemente Min Yoongi compró en la zona más exclusiva de toda la ciudad, sin embargo pese a sus gritos nadie contesta a su pregunta.
-Señor Park-dice el abogado de Yoongi al salir de una de las oficinas colocadas en el primer piso-el Señor Min ahora mismo está en una junta muy importante con su personal.
-¿Crees que me importa una mierda que esté en una junta? Min puede estar en una reunión con el mismo presidente que no me importa-contesta Jimin haciendo a un lado a Kim Seokjin para entrar al interior de la habitación que funciona como oficina-¿Tienes algo que decirme Min?-pregunta una vez está dentro.
-¿Qué es lo que podría ser?-pregunta de vuelta Min Yoongi en su habitual sofá mullido de tela fina de color vino tinto.
-Dijiste que no los ibas a matar, a todos los que traicionaron a la gran y prestigiosa Familia Min-exageró Jimin su voz-¡prometiste que no ibas a hacer nada y que ibas a esperar a que la justicia se encargue de ellos!
-Y es lo que hice, no entiendo de qué hablas.
-Hablo de esto-dijo Jimin perdiendo la paciencia enciendo el televisor.
Las noticias estaban por todas partes, la exploción del autobús que trasladaba a los reclusos al aeropuerto para su respectiva extradición llenaban los noticieros como noticia de última hora.
-¿Algo que quieras decir en tu defensa Min?
-Sí...-dijo Yoongi levantándose con un rostro tan atemorizante que todos los hombres en el interior de la oficina bajaron la mirada inmediatamente sabiendo lo mal ejecutado que resultó el trabajo que mandó a hacer el Señor Min-¡¿Quién fue?!¡¿Quién estuvo a cargo de esto!? De un paso adelante y prometo no matarlo.
-¡Min Yoongi!-gritó Jimin reprendiendo a Yoongi dejando a todos los hombres de Min con la boca abierta-¿en verdad vas a hacer esto delante de mí?¿pero qué tan poca vergüenza tienes?
-Yo...lo siento, me altere.
-¿Y?
-Y no voy a matar a nadie en tu presencia.
-¿Y?
-Tampoco voy a matar a nadie sin tu presencia.
-Espero que sepas que tengo muy bien archivados a todos los hombres que trabajan para ti y si hace falta uno...te aseguro que lo voy a saber.
-Sí Jimin.
Pese a las palabras que decía Yoongi, sus puños a los lados aún se mantenían presionados con fuerza, por lo que Jimin caminó en su dirección para tomar su rostro.
-Voy a perdonarte por lo que hiciste, con una condición.
-¿cual?
-No te enojes demasiado, ¿está bien?-dijo Jimin en voz baja mientras baja su rostro para besar esos delgados labios rosas y mientras lo hace alarga una de sus manos para hacer que los hombres de Min salgan de la habitación, moviéndola de un lado al otro.
-Gracias Señor Park-susurraron los hombres de Min al salir totalmente aterrorizados sin hacer más ruido que ese.
-Si sigues haciendo eso te aseguro que van a seguir cometiendo más errores como el que cometieron ahora-suspiró Yoongi haciendo que Jimin tome asiento en el sofá y luego él mismo tomó asiento en sus piernas.
-¿Acaso hicieron mal su trabajo al ocultarlo de mi?
-Se supone que no debías enterarte, debían ser discretos.
-Ahora mismo hay algo que quiero hacer que no es tan discreto-dijo Jimin besando el cuello de Yoongi.
-No hagas esto, aún estoy trabajando.
-Deja tu trabajo por hoy.
-Esta bien, pero solo un momento-accedió Yoongi y cuando estaba por ceder ante los encantos de su hombre, el timbre del localizador de Jimin empezó a sonar como un demente-¿en serio justo ahora?
-Lo siento, te veo en la noche-se disculpó Jimin haciendo a un lado a Yoongi para atender la llamada de la estación, seguramente encontraron un cuerpo en alguna parte de la ciudad.
-Estoy mucho más enojado que antes-susurró Yoongi observando salir a Jimin.
-Te advierto que conozco a todos los hombres que están trabajando para ti Min-dijo Jimin antes de salir de la oficina dejando a Yoongi con una leve sonrisa fingida en sus labios.
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MELODÍA A MEDIA NOCHE (Jimsu)
FanfictionImpredecible y sofisticado con sed de sangre y venganza. En busca de culpables imparte justicia por su cruel mano. De sus fríos dedos escurre la sangre de la hombres que un día le quitaron lo que más amaba, sin embargo también pueden producir la má...