A Love Song© (Love & Music #2)

37. El camino a lo inevitable -parte 1-

Dedicado a: S-sarcasticamente_yo 😉

Cap (3/6)

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Drowns the Whiskey— Jason Aldean ft. Miranda Lambert

Lo inevitable empezó aquella noche en que discutión con Rick luego de la entrevista en el Late Night. Pero no fue sino hasta dos semanas después que sucedió realmente. Luego de un par de presentaciones exitosas en mayor medida y luego de haber grabado dos de los tres videos para sus canciones principales, todo parecía ir bien, perfecto incluso. Excepto porque no lo era.

Fue luego de presentarse en un gran y famoso club de California cuando las cosas para Wesly empezaron a llegar al punto crítico. Durante dos semanas habían hecho funcionar la banda a base de la obstinación pura. Porque de otra manera no podía explicarse como es que lograron sacar adelante el itinerario que Rox tenía para ellos.

Wes Y Rick no se estaban hablando en lo absoluto y tanto Logan como Reid estaban en el medio tratando de ser parciales y conciliadores. En realidad puede que haya sido gracias a ellos que la banda no se fue al carajo de una vez por todas. Hicieron posible que pudieran tocar como si nada el mundo estuviera mal en lo absoluto y también era parte del por qué seguían adelante luciendo como la feliz y recién formada banda que deberían ser.

Lograron atravesar un par más de entrevistas sin ningún altercado. Pero fuera del ojo público, eran un desastre. Wes se sentía horrible porque no había reclutado a sus compañeros solo para que vivieran en esa tensión constante provocada por  problemas personales con los que debió haber lidiado hace tiempo. Y sin embargo estaba pasando justo lo que siempre quiso evitar.

Muchas veces había escuchado de bandas que se separaban por no poder lidiar con sus asuntos, porque mezclaban lo laboral y lo personal. Creyó que The sound of silence estaba más allá de eso.  Creyó que él mismo estaba más allá de eso. La realidad era totalmente distinta.

Así que esa noche en California derramó todo lo que tenía en el escenario. La rabia, la culpa, la frustración y muchos sentimientos negativos a los que ni siquiera podía darles nombre. Eran tantas cosas peleando unas con otras en su interior que ya no sabía que hacer. Quería gritar, quería llorar. En su lugar, cantó.  Y ojalá eso lo hubiera hecho sentir mejor.

Veía a las personas emocionarse y mostrar una buena aceptación. Cuando bajó del escenario no se quejó cuando Rox dijo que tenían un par de entrevistas. En realidad estaba como en piloto automático. Respondió preguntas, aceptó tomarse fotos con las personas que habían asistido al concierto. Fingió estar pasando una buena noche con sus compañeros.

Pero en realidad nada de eso tenía mucho sentido. No podía disfrutar de eso con lo que tanto había soñado, porque sentía que se estaba ahogando. No dejaba de preguntarse que podía hacer para mejorar. Si es que aquello acabaría algún día. Si tal vez en algún momento volvería a sentirse agusto en su propia piel y no como si estuviera jodidamente perdido, caminando a ciegas por todos lados.

En algún punto también empezó a pensar en Luke, porque debía aceptarlo, ese exasperante ser nunca salía de sus pensamientos y mucho menos desde la última vez que se vieron. Recordó cada palabra que le dijo y se preguntó si quizá eso había sido suficiente como para alejarlo. ¿Por qué Luke no había llamado? Luego se sentía patético por siquiera hacerse dicha pregunta. Debería estar feliz de no tener noticias suyas.