A Love Song© (Love & Music #2)

77. Un buen día

Cap (3/5)

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Brad Paisley— Little moments (like that)

Aquel sin duda estaba siendo un gran día para Cole por muchas razones. En primer lugar, le gustaba el ambiente, el como las cosas empezaban a asentarse y no tenía que preocuparse por si su abuelo decidía aparecer y llevárselo o lastimar a los demás.  Era triste que tuvieran que llegar tan lejos como mandarlo a la cárcel, pero aún si era un niño, Cole entendía que su abuelo hizo cosas muy malas. Lastimó al tío Luke y casi mata a su papá. Entonces merecía ser castigado.

Pero dejando eso de lado, el día estaba siendo muy bueno porque Wes estaba ahí. Y tal vez Cole aún no estuviera listo para decirlo en voz alta, pero le gustaba mucho tenerlo alrededor. No solo porque era divertido jugarle bromas, sino porque su presencia hacía que Luke sonriera mucho más.

Aún le preocupaba que Wesly se fuera en algún momento y no volviera más. Aunque las cosas se sentían diferentes que cuando lo conoció hacía semanas. Wesly también sonreía más y ya no parecía triste cuando veía a Luke. No sabía a ciencia cierta que fue lo que pasó entre su tío y Wes. Como fuera, le hacía feliz darse cuenta de que parecían estarlo resolviendo.

Porque oye, si su tío y Wes se volvían novios, entonces tal vez Wes se mudara con ellos en algún momento. Lo que a su vez significaba que Shasta también lo haría. A como Cole lo veía, si eso pasaba, sería un ganar-ganar para todos. De hecho la idea le gustaba cada vez más.

Otra razón por la que estaba feliz, era porque su padre no se enfadó cuando supo que sabía algo sobre cocinar. No lo regañó como tal vez lo hubiera hecho en el rancho. Una prueba más de que las cosas estaban mejorando. Su papá incluso le había sonreido y lo felicitó por lo bien que sabía la comida. Eso fue suficiente para tenerlo casi rebotando de felicidad en su asiento.

Y por último estaba la cuarta razón por la que aquel día era bueno. Pudo conocer a dos súper estrellas del Rock. Oh, ya podía ver las caras de sus amigos en la escuela cuando les contara que había conocido a Aiden Livsey y a Toni Young, que eran integrantes de los Cold Addiction. Ellos eran geniales y tan amables, que era aún más increible. También estaba feliz de conocer al amigo de Toni, Bae Seong-Jin, era divertido.

Sentarse a la mesa con ellos fue entretenido hasta que empezaron a hablar sobre trabajo y temas adultos en general. Fue entonces que decidió disculparse y dejar la mesa para ir al jardín trasero con los perros. Les lanzó la pelota y corrieron un rato antes de regresar al porche y dejarse caer ahí. Acostado sobre su espalda, sonrió cuando Shasta colocó la cabeza en su estómago y Napoleón se acurrucó cerca de su cabeza dejando lametones ocasionales en su mejilla.

Cole se sentía feliz y afortunado. En el rancho Delaney nunca le faltó nada, pero tampoco fue feliz. Había cierta tensión que nunca se iba, además de que el abuelo era estricto y le prohibía muchas cosas. Cerró los ojos y sacudió la cabeza, no quería pensar en eso de nuevo, porque ahora estaba en un lugar mejor. Su padre estaba ahí y el tío Luke también. Era lo único que necesitaba.

Empezó a adormecerse un poco, justo cuando escuchó un zumbido. Al principio creyó que tal vez era un insecto, como un abejorro. En el rancho solían aparecer durante la primavera, buscando las pequeñas flores a lo largo y ancho de la propiedad. Sin embargo pronto se dio cuenta de que no se trataba de un insecto. El zumbido venía de la mesa que estaba a un costado del porche. Se sentó para echar un vistazo y se dio cuenta de que era un teléfono.