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-Narra Lisa-

Estaba dormida plácidamente teniendo a Jennie en mis brazos. Apenas habíamos comido algo y regresado a la cama. El día continuaba. El sol aún estaba radiante en la ventana y yo no podía estar mejor. Desde hacía mucho tiempo no me sentía tan bien.

Mi teléfono sonó y me despertó de la ensoñación. Cuando miré la pantalla, vi el nombre de Lucia. Era la segunda vez que sonaba, pero la primera yo no la escuché. Debía ser importante. Deslicé el dedo por la pantalla para contestar y sentí a Jennie moverse un poco entre mis brazos, así que ella también lo había escuchado.

—Hola, Lucia —pude sentir la mirada de Jennie sobre mí de inmediato y no era precisamente dulce. Después dicen que la celosa soy yo. Escuché lo que Lucia me decía.

—Estoy fuera de la ciudad... Como a una hora y media, tal vez puedas venir. Así mi esposa y tú pueden conocerse mejor —la mirada de Jennie se suavizó un poco, pero no demasiado.

—Si es tan importante dímelo, puedo atenderlo ahora —lo que dijo me hizo levantar de la cama como un rayo —¿Cómo? ¿Cuando? ¿Dónde? —no me lo podía creer. Esa mujer era increíble. Al fin estaba viendo la luz al final del túnel—. No lo lleves a la policía. Voy saliendo para allá. Espérame, por favor. No hagas nada.

Aquello era algo que quería resolver personalmente. Comencé a vestirme con rapidez. Quería ver a Lucia cuanto antes.

—Lisa, ¿a dónde crees que vas?

—Necesito regresar. Tengo buenas noticias —le dije con entusiasmo.

—Cuéntame.

Se sentó en la cama esperando que le contara lo que había hablado con Lucia. Su desnudez era algo que aún me impresionaba. Era tan hermosa que dudaba que alguna vez me acostumbrara a ella. Quise decirle que tenía prisa, que necesitaba llegar pronto a la ciudad, pero ella era lo más importante en mi vida y valía más que cualquier otra cosa en el mundo.

—Lucia encontró la grabación. ¿Recuerdas cuando estuvimos en la oficina de mi río, el día que él te disparó? —aún me sentía culpable de ello y ella se dio cuenta.

—Ven, siéntate aquí, conmigo —palmeó la cama a su lado.

Me senté y ella tomó mis manos entre las suyas.

—Estamos juntas en esto. Somos una familia —que me dijera eso me hizo sonreír como una idiota—. Entonces con eso deberían poder arrestar a tu tío y, además de todos sus robos, culparlo por la muerte de Jin. Los policías no van a perdonar eso.

—Si, por eso estoy tan entusiasmada con esta noticia.

—Pero fue Lucia quien encontró la grabación. ¿Cómo es eso?

Procedí a contarle a Jennie cómo conocí a Lucia, que era una buena persona y una excelente investigadora.

—Me sorprende todo lo que me has dicho. Yo pensé que tú y ella eran más que amigas.

—Mi amor, aun enfadada contigo no puedo engañarte. Yo solo te deseo a ti y quiero que mi cuerpo esté donde está mi corazón —Jennie sonrió y me besó con dulzura. Le devolví el beso con amor—. Te aseguro que cuando conozcas a Lucia, ella te va a caer muy bien. Es una excelente persona, solo que tuvo mala suerte. Encontró a alguien que le destruyó la vida y ahora solo quiere recomponerla.

—Si es tu amiga y la aprecias, es bienvenida a nuestra casa.

—Te adoro por eso.

—Entiendo que el próximo paso es entregar la grabación a la policía lo más pronto posible.

El Amor No Tiene Escape[Jenlisa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora