25. Aquí o en mi habitación.

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¡Hoy iniciamos LA SEMANA DEL DESEO! sé que en teoría iniciaba mañana, pero me dieron las energías así que inicio hoy. Disfruten el cap y nos leemos mañana ;)

—Te dije que no necesito nada de esto —replica por quinta vez en menos de diez minutos, Damián realmente está insoportable

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—Te dije que no necesito nada de esto —replica por quinta vez en menos de diez minutos, Damián realmente está insoportable.

—Yo si lo necesito, así que mueve tu culo —su armario definitivamente es un desastre, no tiene ningún tipo de orden por color, tipo de prenda, o marca—. Quiero verte con un sexy traje elegante, bien peinadito, y con tu enorme sonrisa... ¡¿Por qué no hay ningún traje aquí?!

—Porque no los uso bella —pongo los ojos en blanco, ni siquiera lo miro, está apoyado en la pared, con los brazos cruzados. No le hace bien a mi pobre corazón que solo tenga una pantaloneta negra puesta y el cabello mojado goteándole sobre la piel.

Desde que le mencioné mis planes no ha hecho más que quejarse, cosa que definitivamente me frustra, estoy intentándolo, este es el tipo de normalidad que ambos deseamos. Me metí a su armario sin prestarle atención y ahora revuelvo su ropa buscando algo elegante.

—Es imposible que no haya un solo traje de etiqueta —gruño sacando una camisa blanca manga larga, tiene una mancha café en el centro, hago una mueca —. Te he visto en revistas con muchos trajes perfectos —y mujeres perfectas, obviamente eso no lo menciono—, tienes que ir a Marvella de vez en cuando, tienes que dar clases en la universidad.

—Ya sabes qué tipo de profesor soy... —el tono de su voz es malicioso, no se me pasa desapercibido. Ni siquiera lo miro.

—Debes ser el crush de media universidad —murmuro.

—Lo sé —se encoje de hombros como si nada—, sé que estoy buenísimo.

—Dios, que humildad —ahora si volteo a mirarlo—. Pon de tu parte... por favor —suspiro y detengo el movimiento de mis manos sobre su ropa.

Él debe notar algo en mi mirada porque inmediatamente cambia su expresión burlona. Se me acerca despacio y junta nuestras frentes, acto que me hace cerrar los ojos y suspirar. Sus dedos empiezan a jugar con la piel desnuda de mis brazos y desearía no erizarme ante su contacto.

—No necesito a nadie más que a ti —esas palabras me hacen sonreír, abro los ojos y me encuentro con los suyos observándome con cariño—. ¿Qué te parece si cambio tus planes? Tú y yo, en la cama, desnudos, yo encima de ti, dentro de ti para ser exactos —ladea su rostro lentamente acercándose a mis labios.

—Damián... no m-e cambi-es el tema... —mi voz se entrecorta. ¡Este hombre acabará conmigo!

—Hace muchos años no estoy dentro de ti, quiero sentirte y que me sientas... por completo.

Hace mucho no tengo sexo y realmente quiero hacerlo, es una necesidad básica que se me ha despertado apenas vi nuevamente a este hombre. Han pasado un par de días desde lo sucedido con Valery, y aunque hemos estado compartiendo cama, no ha pasado nada más que unos cuantos besos intensos y unos abrazos cariñosos. Él me matará de tensión sexual.

Las reglas para amarte | 2.0Donde viven las historias. Descúbrelo ahora