5

2.6K 173 42
                                    

CAPÍTULO 5: NUESTRO SEGUNDO PRIMER DÍA

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

CAPÍTULO 5: NUESTRO SEGUNDO PRIMER DÍA

Temporada 2006-2007

Aspen

Justo antes de empezar la temporada 2006-2007, fue mi cumpleaños. Y a comparación de otros años, ese año lo celebré en el club de patinaje junto a mis nuevos amigos. Si bien en ese entonces todavía no les hablaba a todos pero si a un chico de mi edad, Ivy, sin saber que más tarde se convertiría en mi mejor amigo. Y al igual que nosotros, entrena para poder participar en las mismas competencias en las que participaremos mi hermana, Eira y yo. Y aunque se supone que debe de haber una rivalidad entre nosotros, a mi no me importa.

El cumpleaños de ese año fue el mejor, ya que me hicieron un convivio sorpresa en el club de patinaje. Nos olvidamos por un momento de los nervios que el inicio de temporada nos ponía. Fuí feliz en ese momento. Rodeado de las personas que me importan y que quiero. Unas semanas después de mi cumpleaños empezó la temporada de aquel año.

Era nuestro segundo gran día. Solo habíamos competido una vez, y fue en una de las últimas competencias de la temporada 2005-2006. El motivo por el cual sólo habíamos —en ese entonces— participado una sola vez en aquella temporada fue porque era solo un cáliz para que nosotros viéramos cómo funcionaban las competencias. Ya que en sí, nuestro debut oficial sería en la temporada 2006-2007.

Me encontraba practicando algunos giros cuando una niña se me acercó a hacerme platica. 

—Hola—saludó.

—Hola.

—¿Cómo te llamas?

—Aspen, ¿y tú?

—Caterina. ¿Cuántos años tienes?

—Ocho.

—Yo tengo diez.

¿Qué hace una niña hablándome? Usualmente no lo hacen.

Otra cosa que me he dado cuenta es que si una persona se me acerca y me hace platica, yo no suelo ser tímido. 

—Y, ¿en qué categoría compites?

—En individual.

—Oh, yo participo en parejas.

—¿Enserio?

—Si, mi compañero se llama Sergio.

—¡Que padre!. Suerte.

Me alejé para seguir practicando pero la niña no me dejo solo, me siguió.

—¿Y vives por aquí cerca?

¿Es policía o que?

—Algo así.

—Yo no, vivo lejos. Tuve que viajar varias horas en coche.

¿Por qué me quiere contar toda su vida? ¿Qué se supone que le debo de decir?

SO: sobre hielo [borrador]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora