La cosa estaba así: Sirius quería golpear a cada una de las personas presentes en la nariz.
¿Por qué? Porqué así es Sirius.
Claro, y porqué Trouble había desaparecido de su habitación.
-Es que no entienden, yo la dejé aquí. —les explicaba a sus compañeros mientras señalaba la cama donde estaba seguro debía descansar el cuerpo de Trouble.
-Pues aquí no está, Black —Severus Snape no podía creer que estaba allí realmente, soportando las babosadas de los merodeadores.
James apareció por la puerta del cuarto donde Sirius señalaba incrédulo el colchón dónde Trouble había estado reposando la última semana. Cada día, a mediados de cierta hora, Sirius aplicaba el encantamiento que había encontrado en el corte que decoraba el brazo de Trouble.
-En el baño tampoco está —anuncio James.
-Ni en las demás habitaciones —prosiguió Lunático.
Regulus Black se acariciaba el puente de la nariz exasperado por la incompetencia de Sirius y los demás jóvenes.
-¿Soy el único que se da cuenta de lo grabé que puede resultar está situación? Trouble está desaparecida, la directora de la Orden del Fénix está desaparecida. ¿Alguien ha pensado en si los mortifagos tienen algo que ver?
El silencio se instalo en la habitación.
-¡Me lleva la mierda!
Sirius salió disparado de la habitación, seguido por los presentes con varitas en mano, paso por la puerta principal y rodeo la casa corriendo por el campo donde se encontraba la estructura persiguiendo un paisaje de infinitas praderas.
Cruzo el terreno incluso más allá de lo considerado como el patio trasero de la casa y las espigas empezaron a surgir alcanzandole de a poco las pantorrillas.
-¿Que pasa, vieron un fantasma?
Allí estaba con porro en mano y pijama de seda. La contradicción más embrujante que había visto jamás. Trouble en medio de la nada, drogada y viéndose como la mujer más elegante del planeta con hierba entre sus dedos.
-¿Que mierda te hace creer que puedes desaparecer sin decirle a nadie?
Regulus Black sonaba bastante ansioso y lánguido en lo que recuperaba la respiración luego de la carrera persiguiendo a su hermano.
-¡Reg!
Trouble se había levantado sacudiendo con las manos momentáneamente y con indiferencia su trasero para eliminar cualquier suciedad que hubiese quedado pegada de la tierra. Trotó hacia el menor Black, pasando frente a Sirius con aire extasiado, con una suave sonrisa de labios cerrados estirando sus brazos hacia su cuello en uno de sus famosos abrazos reconfortantes.
O eso creyó Sirius. Peter alguna vez había mencionado que cuando Trouble tenía la intención, parecía que ser rodeado por sus brazos sanaría cualquier herida, que sentías que tú corazón tocaba el de ella y su respiración arrullaba tu alma ahuyentando tus penas. Si, ese parecía uno de sus abrazos, uno que no había recibido jamás.
-¡¿Pero que haces aquí Regulus Black?! ¡¿Sabes lo peligroso que es?! —se separó bruscamente del pecho del joven para regañarlo con tono demandante.
-Olvidaste la parte de Arcturus —señalo divertido James.
-¿Arcturus? ¿Que clase de nombre de mierda es ese?
Sirius rio fuertemente.
-Cállate Orión.
Contraatacó el Slytherin.
ESTÁS LEYENDO
Espina de rosa
General FictionAsí como se conoce la reputación de Sirius Black de completo mujeriego, en Hogwarts se sabe de forma similar a Trouble Boredieng. Su nombre es sinónimo de sensualidad, belleza y sobre todo acostones, la población masculina de Hogwarts recuerda su ll...