Hablando se entiende la gente

487 25 49
                                    

-Bueno, estoy agotada. ¿Puedes venir,  Herm? El ruido de la puerta luego me despierta, y sospechó que él será igual- apuntó al bebé dormido en brazos de la castaña, su tono críptico. Hermione miró a Ginny extrañada, pero bastó con ver su expresión para saber que se tenía algo entre manos.

-Claro. Buenas noches a todos- se despidió mientras se dejaba guiar por la pelirroja a su cuarto, apenas logrando ver la expresión confundida de los chicos.

Hermione no podía culparlos: ella también había esperado el cambio de dormitorios habitual, y aunque le desilusionó no dormir junto a Ron esa noche, sospechaba que Ginny quería contarle algo, y con un anillo de por medio, Hermione estaba ansiosa por saber. La familia había decidido en acomodar a los señores Granger en el desalojado cuarto de Percy, y por petición de la castaña, la cuna de Ferdinand estaba con ella, cosa que no fastidio a Ginny, la dueña del cuarto.

-Es un bebé lindo. Se parece a ti...

-... ¿Te parece? Yo creo que salió a papá. Estoy feliz de que ahora esté tranquilo, estaba tan cansado e irritable...

-...Todos estarían cansados después de un viaje como ese. En verdad me sorprendió. Mago o no, él es fuerte...- las dos se quedaron calladas un rato, notando rareza en la otra.

"Me está ocultando algo...", pensaron casi a la vez, mirándose suspicaces. Pasaron unos minutos así, en silencio por piedad al niño, hasta que la tensión fue demasiada para seguir resistiendo.

- ¿Qué escondes? – preguntaron casi a la vez-. ¡Tú primero! - volvieron a decir, a la ofensiva, mas Ginny agregó-. Es mi casa, mis reglas. Los invitados hablan primero...

- ¡Bruja! - Ginny rió por el pseudo-insulto, pero quedó expectante a la respuesta. Sabía que era algo jugoso, pues se había sonrojado y cruzado de brazos, además de que parecía pensarlo demasiado.

-Esperando, bruja...-Hermione gruñó, y tras sacar la ropa de su valija con un agitar de varita, empezó a contar mientras doblaba la ropa. Le estaba evitando la mirada.

-...Ron y yo estuvimos juntos...- casi lo murmuró, pero Ginny aún así la escuchó. Estaba desconcertada, ¿por qué estaba siendo tan críptica? Hermione no era así. Era raro.

-Bueno, eso ya lo sabía. Estaría enojada si no hubiera estado contigo...- "¡Por Merlín! Ella es como sus hermanos", pensó Hermione desesperada. O tal vez se estaba haciendo la tonta. Fuera lo que fuera, la molestaba.

- ¡No tan literal! Dormimos juntos...

-... Siempre lo hacen...- Ginny ya lo había entendido (al principio sí le costó, los genes no se podían ocultar), pero le gustaba burlarse de ella. Decidió parar al ver su rostro rojo cual tomate, riéndose -. ¿Cómo puedes apenarte de decírmelo y no de haberlo hecho? ¡No tiene nada de malo!

- ¡Te odio, Ginevra! - la pelirroja se carcajeó con más fuerza, y Hermione la chitó, apuntando a la cuna. Era una suerte que no lo hubieran despertado aún-. Pero sí, eso pasó.

- ¿Y estás bien? ¿Todo estuvo bien? Dime que no hay posibilidad de una sobrina o sobrino de su parte...

- ¡No! No la hay- se apresuró a aclarar, y esta vez fue Ginny la que tuvo que recordarle del bebé-. Y no estoy bien con lo que pasó, estoy feliz, Gin. Tu hermano es lo mejor que hay en mi mundo ahora mismo. Lo amo...

-...Me alegra oír eso. Gracias por ahorrarme los detalles. No me malinterpretes, puedes hablar conmigo... pero sigue siendo mi hermano. Sería extraño...

-...Lo sé...

- ¡Claro! Tú eres la genio, lo olvidaba...

-...Ahora es tu turno...

19 años despuésDonde viven las historias. Descúbrelo ahora