Juego de Palabras

Episodio 46: Marioneta

Ya pasaron un poco mas de tres meses desde que mi amor me pidió que me casara con el ante todos, y con todos me refiero a mis amigos y familia, pensé que mi madre había cambiado de parecer, que aceptaba todo sobre mi pero me equivoque, todo era una triste farsa.

Hoy a pesar de dejar claro que ya había elegido a Evelyn mi madre aun no se sentía convencida así que preparó una cena de tres para ver que tan bien la pasábamos juntos y le dije que prepare todo como a ella le gustaba.

Mi mañana no fue muy distinta a las demás todo era una triste rutina en mi vida, ya casi no tenia fuerza para seguir pero debía hacerlo, casi ni veía a mis amigos, no sabia nada ya de ellos, en realidad solo me preguntaba como iba creciendo la pancita de Jenny, ya no recordaba lo que era sentirse libre y feliz.

El llamado de mi madre me dejo pensando, me había dicho que pase por la sastrería que ahí se encontraba el traje que mando a hacerme especialmente para este encuentro

-Perfecto madre, allí voy a estar, alrededor de las once de la mañana para poder llegar a tiempo para el almuerzo que organizaste con Evelyn-. Suspire hondo mientras miraba el reloj y decidí marcharme al lugar mencionado

Me sorprendí mucho al ver el traje que debía usar, pero me lo puse sin excusas, mi madre ya se encontraba en el lugar así que el camarero me guío hasta la sala donde seria el encuentro, al entrar vi que aun estaba sola, cuando llegue a la mesa la salude para luego sentarme.

-¿Por qué aun estas sola?-.

-Quien nos acompañara llegara en quince minutos cariño-.

Asentí con la cabeza mientras tomaba un poco de agua, la tranquilidad de mi madre invadía el lugar mientras que yo estaba por explotar, quería que todo esto se termine de una ves, ya no aguantaba todo esto pero recordé esas palabras y me relaje.

Ya había pasado el tiempo mencionado cuando sentí que la puerta se abría, el lugar se lleno de ese perfume embriagador que estremeció mi cuerpo dejándome casi sin poder moverme, me sentí tan nervioso que cerré los ojos por un momento haciendo que aquella expresión se debía por el frío del agua que había bebido.

Al escuchar su dulce voz supe que era mi amor que era Kim Taehyung, una leve sonrisa fingí en la comisura de mis labios, no demostré que me afectaba su presencia, lo salude cordialmente e hice una pregunta.

-¿De quien se trataba?-. Le pregunte a mi madre, ella solo sonrío y me miro fijo al escuchar mi pregunta

-¿No te acuerdas de el?-. Me pregunto y moví mi cabeza indicando que no y me toque la cien fingiendo un poco de dolor, mi madre se asusto y rápidamente hizo que el chico esbelto y rubio me atendiera, esas manos calidad y suaves hacían arder mi piel, deseaba tanto que sus caricias recorrieran mi piel, pero antes de excitarme quite sus manos y hable.

-Ya me encuentro bien, muchas gracias-.

-Hijo, el es el medico de la empresa ¿Acaso no lo recuerdas?-.

-No, sinceramente es la primera vez que lo veo-. Salude cordialmente al contrario y me presente dándole la mano y la bienvenida nuevamente

Llego el momento y con ello la hora de pedir la comida, solo pedí ensalada y un poco de cerdo ya que hacia días que no andaba comiendo muy bien, sentí la tierna mirada de mi amor la cual me ponía un poco nervioso pero trate de disimular.

Todo iba según los planes de mi madre.

-Un nuevo invitado se va a sumar al almuerzo-.

En ese momento mi madre se prepara para salir dejando entrar a la según ella invitada de honor, era Evelyn y mi madre la sentó al lado mío mientras que Taehyung estaba enfrente de mi, apreté fuerte mi puño y sonreí ampliamente dándole la bienvenida.

Inicie una conversación de inmediato y agarre su mano para acariciarla, por dentro me moría por lo que hacia, quería que su mano sea la de mi único amor, pero no, era la de esta chica que mi madre tanto quería, cuando creí que esto ya se había terminado mi madre menciono que nos dejaba a los tres a solas ya que ella tenia que encargarse de algunas cosas sobre mi boda, aquello casi me dejo sin aliento y así fue como en ese preciso momento que mire detenidamente a mi amor estaba dando su mejor esfuerzo para no explotar y arrancarme de los brazos de la mujer que rodeaban mi cuello para besarme, con sutileza la hice a un lado haciéndole entender que estábamos acompañados, jamás la había besado ¿Qué cosas se la había ocurrido para hacer eso? ¿Acaso todo era un plan de mi madre? ¿Hasta donde quiere llegar?

Taehyung se disculpo nuevamente para retirarse diciendo que tenía trabajo que hacer y decidió retirarse, deje pasar un tiempo y ya mi madre no se encontraba entre nosotros.

-Iré al baño-. Le dije a Evelyn pensando que mi amado estaría allí pero no lo vi, ingrese al cubículo para no levantar sospechas ya que era seguro que me estarían vigilando, me agarre mi vientre fingiendo estar descompuesto y tarde un poco para salir

Vi un hombre alto de sombrero y barba, me acerque para lavarme las manos cuando sentí unas manos rodear mi cintura, antes de poder mirar por el espejo, fui arrastrado hacia dentro del cubículo del cual hacia unos instantes había salido de el, su aroma era inconfundible, sabia que era el, nuestros labios se fundieron en un eterno beso, sus manos acariciaban mi cuerpo con lentitud mientras que desaliñaba mi ropa, su mano bajo lentamente por mi pecho hasta llegar a mi entrepierna que ya mi miembro se encontraba bastante erecto, su otra mano sostenía mis manos impidiendo que lo toque como yo quería, sus susurros en mi oído me hacían temblar, me hacían desearlo tanto, quería tenerlo dentro mío, quería sentirlo una vez mas.

-Hazme el amor... por favor...-. Le dije con mi voz entrecortada, no aguantaba mas no tenerlo como antes, su nariz se pego a la mía y con su lengua saboreo mis labios, su lengua caliente recorrió mi pecho jugando en el mientras lentamente bajaba dejando su humedad en mi, desabroche mi cinturón junto con el botón de mi pantalón y bajo la cremallera de este dejando que quedara a la altura de mis tobillos, acariciaba mi miembro de arriba hacia abajo dejándome casi sin respirar, cubrió mi boca con sus labios y luego los mordió suavemente deslizándose hacia abajo.

Sentí su boca húmeda y caliente abrazar mi pene, su lengua jugaba sin parar casi dejándome sin aliento no pudiendo hacer ningún sonido, mi respiración acelerada y mis gemidos eran cubiertos por mi mano para no dejarlos salir, mordía mis labios tratando de soportar la sensación explosiva que sentía al tener a mi amor dentro de mi nuevamente, me daba fuerza para seguir mi día a día, no podía demorarme mucho mas ya que no podía levantar sospechas, deje todo a medio camino pero basto para renovar mis energías, mis ojos brillaban algo que debía de borrar de mi, pero ¿Cómo hacerlo? Lave mi rostro con agua fría a contra de mi voluntad ya que no quería borrar los rastros de mi amado.

Cuando sonó mi teléfono y una voz que decía si me sentía bien.

-En un momento estaré allí, me encontré con un viejo conocido de mis padres y me entretuve, lo lamento perdí la noción del tiempo-. Llegue a la mesa y nos fuimos camino a llevarla a su casa, al dejarla allí me fui a la oficina, estaba en llamas, quería mas de mi amado deseaba tenerlo para mi nuevamente.

-Hanna, que nadie me moleste por favor-. Le dije y subí nuevamente a mi lugar favorito, aquel donde tantas veces había estado con mi amor

Saque mi teléfono y escribí en mi diario electrónico, pero otra vez sin darme cuenta que todo se lo estaba escribiendo a Taehyung.

Me siento tan frustrado en ser la marioneta de mi madre y verla tan feliz viéndome de esa manera cumpliendo sus caprichos no dejándome ser yo mismo ¿Cuánto tiempo mas debía fingir? ¿Cuánto tiempo mas soportaría estar así? Se me acababa el tiempo y la paciencia, ya era mitad de año, habían pasado mas de tres meses agonizando sin mi amado, recién hoy después de tantos meses pude estar en sus brazos, sentirlo nuevamente tan mío y yo tan de el, aunque el tiempo fue breve pero todo se sintió igual, nada había cambiado, la debes de estar pasando tan duro como yo ¿Verdad amor? Te extraño tanto, te amo demasiado.

Cuando termine de escribir aquello cerré mis ojos dejando caer mis lágrimas que rápidamente humedecieron todo mi rostro, necesitaba tanto que con sus manos secara mis lágrimas pero al abrir mis ojos volví a mi triste realidad, debía aguantar por el y por mis seres queridos, solo veía el tiempo pasar y mi vida hecha una rutina sin cesar así era como mi madre se sentía feliz.

Continuara...