twenty one.

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El hecho de que lo primero que Tony Stark le dijo a Maya Rinaldi al verla en el día fuera "Vamos a Oslo, prepárate" no inspiraba nada de confianza, en lo absoluto

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El hecho de que lo primero que Tony Stark le dijo a Maya Rinaldi al verla en el día fuera "Vamos a Oslo, prepárate" no inspiraba nada de confianza, en lo absoluto. Y aunque pasar horas encerrada un un quinjet brindado por el mismísimo Nick Fury con la persona que peor le caía del grupo no era lo que más la emocionaba: rendida, se despidió de todos los demás para entrar en éste junto a Rachel y Cassie.

May aprovechó para pasar las siguientes cinco horas poniéndose al día completamente con sus hermanas, mientras que el multimillonario lanzaba de vez en cuando algunos comentarios que la menor se esforzaba en no responder. A ver: no era que Stark sea molesto ni mucho menos mala persona. Aunque Maya no estaba de acuerdo con sus métodos, entendía sus ideales, y los respetaba como a los de cualquier otra persona.

Pero ese respeto desaparece para ella cuando aquellos ideales lastiman a otras personas. Y los de Tony estaban por hacer eso mismo.

Les contó a sus amigas sobre cómo había terminado en aquel lío, salteándose parcialmente las partes en las que debía hablar de su vida sobreviviendo en los alrededores del Vicent's. A decir verdad: ya había superado aquellos tiempos de tocar fondo, pero no era algo que le gustaba compartir con las demás personas. Prefería dejarlo para ella y su gente de mayor confianza. Maya no confiaba en Stark, así que se limitó en contar todo aquello que nadie pueda usar en su contra más adelante.

También habló de lo loco que había resultado ser el año anterior, y cómo es que todo había cambiado tan rápido. Un día estaba viviendo sola y al otro peleando junto a Fury, una completa locura. Hasta mencionó su trabajo como niñera en la casa de los Patterson, cuidando a su hijo menor y único. May tenía muchas ganas de volver a cuidarlo, ya que le habían dado un año de descanso a causa de el año de intercambio que el niño, Alain, había tenido.

Y claro: la castaño-rubia no fué la única que habló. Cassie contó algunas anécdotas de su vida, explicando la razón por la que había terminado cruzando camino con Fury, quien la derivó a SHIELD y gracias a idas y vueltas de la vida había terminado en aquel lugar. Rachel, al igual, sorprendió a las chicas (y Tony) explicando cómo múltiples casualidades la habían llevado a aquel lugar luego de escapar del internado en 2010.

Tony, luego de lanzar su último comentario sarcástico en la conversación: se tomó el tiempo de dar una última vuelta por la cuidad, causando que Maya se emocione al igual que una niña al sobrepasar la Fortaleza de Akershus. May podía jurar que observar aquella construcción desde el plano que el quinjet les brindaba fué una de las cosas más hermosas que le pasó en la vida.

Minutos después: al bajar del vehículo aéreo (si es que así podía llamarse), todos los presentes se dirigieron a lo que Stark llamó Nexus, que era básicamente el lugar en donde se almacenaba toda la información y datos del internet, en donde, según el filántropo, localizarían la falla que no le permitía a Ultron acceder a los códigos nucleares, para así usarla a su favor.

WALLS - natasha romanoffDonde viven las historias. Descúbrelo ahora