twenty eight.

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El centro de Lagos era un lugar concurrido por bastante gente, cosa que hacía que, para los vengadores, capturar a un agente en cubierto sea una tarea casi imposible

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El centro de Lagos era un lugar concurrido por bastante gente, cosa que hacía que, para los vengadores, capturar a un agente en cubierto sea una tarea casi imposible. Maya junto con Wanda y Natasha (ya que Bonnie y Odile se encontraban juntas a algunos metros de distancia), se ocupaban de ser los ojos de Steve mientras intentaban disimular sus nervios.

Maya había optado por dejar sus sentimientos de lado a la hora de pelear y concentrarse en lo importante: el objetivo. Idea con la que Natasha estuvo de acuerdo, por lo que fué en ese entonces que tomaron la decisión de no ser novias en el trabajo, sino ser simples compañeras.

Para hacer más tiempo e intentar camuflarse entre las demás personas: había ordenado una taza de café expresso y un pedazo de pastel que no se iba a molestar en comer mientras que esperaba las órdenes del capitán. Aunque no debió esperar demasiado.

-Wanda. ¿Qué ves?- Preguntó Steve desde el edificio frente a la cafetería. Maya no se molestó en mirarlo, ya que fingió estar leyendo una revista mientras prestaba atención a la conversación.

-Unos pocos oficiales, una pequeña estación de policía... Calle tranquila. Es un blanco ideal.- Respondió Maximoff.

-Hay un cajero en la esquina sur. ¿Qué significa?- Volvió a preguntar.

-Cámaras.- Habló esta vez May. -Están filmando.

-Ambas calles son de una sola mano.

-Entonces las vías de escape se reducen.- Volvió a hablar Wanda.

-No le preocupa que lo vean. No teme crear conmoción al escapar.

-Está loco, para ser más exactos.- Agregó Maya.

-Wanda. ¿Ves ese Range Rover a mitad de cuadra?- Preguntó el cap.

-¿La roja? Si, es linda.- Respondió.

-También es a prueba de balas, lo que implica seguridad privada, lo que implica más armas, lo que implica más problemas para alguien. Probablemente nosotros.- Interrumpió Natasha.

-¿Si recuerdan que muevo cosas con mi mente, verdad? Rachel también lo hace.

-Así es, bruja.- Interrumpió Rach, participando por primera vez en la pequeña charla que estaban teniendo los héroes. -No estaría de más recordarles que la telepatía puede ser de mucha ayuda, pero en este tipo de situaciones hay que ser sigilosos y pensar con la cabeza.

-Hablas como si ya tuvieras experiencia en estas cosas, y siendo honesta no me sorprendería para nada viniendo de Fury.- Respondió Maya. -¿Es posible?

-No lo crucifiques, Mel. Mirar sobre tu hombro tiene que volverse un instinto.- Respondió la peliroja.

-Siempre tan optimista. Me pregunto quién dormirá en el sofá esta noche...- Agregó Maya, al mismo tiempo que sonreía de lado y bebía un sorbo de su café.

WALLS - natasha romanoffDonde viven las historias. Descúbrelo ahora