| 61 | "NUESTRA REINA"

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¿Acaso la había arrollado un camión? ¿La habían molido a golpes una docena de tipos? ¿La habían aplastado cinco luchadores de sumo? Aunque no sabía cómo se sentían exactamente todas aquellas cosas, el dolor de su cuerpo era muy molesto, parecía que había estado haciendo ejercicio durante unas doce horas seguidas. Todo el maldito cuerpo le dolía, era el típico dolor a cuando comienzas una actividad física después de tanto tiempo y al otro día no puedes ni moverte, pero aumentado por dos.

Cada vez que se movía en la cama era imposible que no soltara un bufido por la molestia en su cuerpo, pero tenía que levantarse, no sabía qué hora era, ni donde estaba porque en lo único que podía pensar era en el dolor de su cuerpo.

Unas voces hablando en un tono bajo hicieron que se decidiera por finalmente a abrir los ojos. Las cortinas estaban cerradas, pero se dejaba ver que ya era de día, aunque no supo exactamente en qué parte del día estaba, podría ser tranquilamente entre las once de la mañana o las tres de la tarde.

Aunque dudaba mucho que fuera de mañana teniendo en cuenta a la hora en la que todos se durmieron.

Estaba acostada boca arriba siendo aprisionada por dos cuerpos que le transmitían mucho calor.

-Son como las cuatro de la tarde -dijo una voz grave a lo lejos de donde ella estaba.

-Mierdaaaaaa -se quejó otro.

-Mmm... Yo siento que me va a estallar la cabeza. Lo siento, Tae, no creo que tenga fuerzas para ayudarte a limpiar.

- ¡No! ¡Prometieron que iban a ayudarme! -la segunda voz fue la de Taehyung y la que ahora se quejaba.

-Estamos de la mierda, al menos espera a que nos recuperemos -la primera voz que habló era Seokjin.

-Eso, eso -y finalmente el que dijo que no iba a ayudar a limpiar era Hoseok.

De repente todo lo que había pasado durante la madrugada y la mañana de ese día la golpeó con fuerza, recordándole exactamente lo que había hecho. Bueno, no exactamente, pero gran parte sí.

Cuando giró su cabeza hacia la izquierda se encontró con Jimin durmiendo de cara a ella, con una mano debajo de su mejilla abultándola y sus labios también estaban abultados hacia afuera. Hallie llevó una mano a su rostro y lo acarició con mucha delicadeza sin querer despertarlo porque se veía hermoso en aquel estado. También acarició sus cabellos rebeldes que le cubrían un poco el rostro. Él era tan etéreo, pensó en un suspiro.

Y luego se giró hacia la derecha a ver quién estaba durmiendo del otro lado y allí vio a Yoongi durmiendo profundamente, con la mueca más relajada que alguna vez pudo haber visto en él. Una de sus mejillas se abultaba ligeramente por la presión que hacia contra la almohada y encontró aquello muy tierno. ¿Algo tierno en él? Bueno, sí. Increíble, pero cierto.

Suspirando y juntado fuerzas se sentó con mucho cuidado entre ambos chicos y fue ahí cuando todo le dio vueltas con fuerza, como si la estuvieran sacudiendo de un lado a otro y tuvo que tener mucho de ella para no irse contra Yoongi. Su cabeza no dejaba de dar vueltas y luego llegó el dolor.

La resaca. La resaca era lo peor. ¿Por qué existía la resaca? ¿Por qué todo lo que era divertido nos hacía mal? El alcohol, la comida chatarra, ¿qué más? Solo podía pensar en esas únicas dos cosas, no estaba para extender más allá su imaginación.

-Noona... -la voz de Taehyung salió en una exhalación de alivio-. ¿Cómo estás?

Hallie giró con mucho esfuerzo su cabeza hacia donde él estaba, en la cama.

-Como la puta mierda -dijo con voz ronca después de haber fumado bastante durante la noche y haber gritado...-. Me duele muchísimo la cabeza -se tomó el lugar mencionado como si así pudiera mitigar el dolor.

Dangerous Woman | BTS | +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora