Dangerous Woman | BTS | +18

| 34 | "COMPETIDOR NATO"

-No vayas a la discoteca hoy, Hal, te vez muy agotada –le dijo HeeSook cuando vio a su amiga poniéndose apurada la ropa de su otro trabajo ya que iba tarde. El sábado debía haber sido su día de descanso, pero tuvo que cubrir por una urgencia el puesto de Yujin ya que la chica estaba a la miseria luego de la pasada noche. El sábado al mediodía no había podido mover ni un músculo y su lugar de residencia había sido el baño porque no paraba de vomitar y sentirse terrible, entonces como pudo llamó a Hallie para pedirle ese favor cosa que la chica aceptó aunque no le hiciera mucha gracia.

-No voy a faltar, no avisé nada y ya es tarde, Sookie –le dio una sonrisa cansada a su amiga que frunció los labios descontenta.

-Cualquier cosa me llamas, ¿sí? –Hallie asintió en respuesta y le dio un beso en la mejilla para despedirse.

Llegó lo más rápido que pudo en su coche y cuando pasó por la pista a lo lejos vio a Taehyung y a Jungkook en sus lugares ordenando todo. Ella subió con velocidad hacia la sala de empleados para dar aviso de que había llegado. No vio a Ji Hoon por ningún lado, así que suspirando llena de frustración volvió a bajar para ver si podía encontrarlo, pero no. 

Finalmente rendida ingresó a la barra bajo la atenta mirada de sus compañeros. Taehyung en cuanto la vio sonrió ampliamente y prácticamente corrió para estrecharla entre sus brazos, Hallie le correspondió con más suavidad que de costumbre.

Miró disimuladamente a Jungkook que luego de la noche anterior no se volvieron a mirar ni a hablar. Cuando Hallie había vuelto a la barra Jungkook todavía no estaba allí, sino que apareció como diez minutos más tarde y para variar la barra estaba cerrada y Ji Hoon no estaba tampoco. Nadie les dijo nada, porque cuando Jungkook volvió enseguida Ji Hoon apareció y siguieron trabajando como si nada, aquello le dio curiosidad a Hallie, pero no dijo nada al respecto.

Entonces la mirada que se dirigieron en aquel momento estaba llena de complicidad, pero Jungkook apartó su vista para seguir haciendo lo que fuera que estaba haciendo antes de que ella llegara.

-¿Me extrañaste anoche? –le preguntó Taehyung que la miraba con una sonrisa tímida y divertida.

Al principio de la noche sí lo había extrañado, pero cuando estuvo encerrada en ese cuarto con Jungkook no pensó en él ni un segundo y tenía que ser sincera con ella misma a veces. Ya que luego de eso en lo único que pudo pensar fue en Jungkook, todos sus pensamientos se llenaron de él y no pudo dispersarse de eso. Todavía no podía dejar de pensar en él y eso la estaba sofocando un poco. 

Seguía sorprendida de que en plena jornada laboral los dos pudieron llevar aquel encuentro como si nada, sin ninguna interrupción de por medio. Jungkook atándola con su cinturón a un fierro mientras le practicaba sexo oral en el lugar donde trabajaban, donde de puertas para afuera había cientos de personas bailando y bebiendo y ellos estaban ahí encerrados en aquel cuarto como si nada cuando cualquier otro empleado pudo haber querido ingresar también.

De locos, pensó.

Hallie ya era bastante experimentada en el sexo, pero nunca había tenido un encuentro de ese tipo en el trabajo, eso la asustaba un poco porque ella siempre se tomaba muy en serio sus empleos y se cuestionó como dejó que algo así pasara a pesar de que lo disfrutó más de lo que creyó.

-Mucho –le dijo con una sonrisita y eso fue suficiente para el pelirrojo que como siempre se tomó el atrevimiento de besar su mejilla, pero esa vez dejó un beso en la comisura de los labios de la chica que le respondió dándole un apretón a su mano.

Los dos se separaron y Hallie guardó sus pertenencias debajo de la barra como siempre y quiso hacer algo, pero ambos chicos ya se habían ocupado de dejar todo listo para comenzar a trabajar.