Dangerous Woman | BTS | +18

| 14 | "LENGUA DE ZORRA"

Llevaba como cinco minutos en el patio trasero sin animarse a volver a ingresar a esa casa. Lo único que quería hacer era agarrar sus cosas y marcharse. No por el hecho de que Namjoon era un idiota –porque no lo era o al menos no lo aparentaba- sino porque era realmente incomodo el modo en el que se habían conocido formalmente sin contar con su efímero encuentro en el restaurante hacia unas semanas atrás.

Estaba sentada en un banco y le extrañó que nadie fuera por ella, pero agradecía demasiado que le dieran su espacio al menos por unos momentos ya que seguramente no tardarían nada en ir a buscarla.

Hallie se puso de pie, dispuesta a entrar nuevamente cuando creyó estar lista, pero levantó la vista y se encontró con la figura de aquel hombre que acababa de conocer y que sin quererlo le había puesto de los nervios.

Él se encontraba con las manos metidas dentro de los bolsillos de su pantalón mirándola con atención como si fuera entretenido verla allí sentada sin hacer nada, demostrando que llevaba algunos cuantos segundos prestándole atención. Hallie tragó saliva y dio un paso más cerca.

La altura de Namjoon era muy notoria porque a pesar de que Hallie llevaba unos tacones de unos cuantos centímetros, él le seguía sacando bastante diferencia y tenía que inclinar su cabeza ligeramente hacia arriba para mirarlo.

-Vaya sorpresa, eh –tenía una pequeña sonrisa la cual marcaba sus bonitos hoyuelos-. ¿Te encuentras mejor?

Bueno, eso le dejaba claro que él también se había dado cuenta quien era ella, que la recordaba de ese rápido encuentro.

Hallie lo miró fijo a los ojos a pesar de que aún se encontraba bastante conmocionada con todo eso.

-Sí...

Tenía la boca seca y la mente en blanco.

-Quien iba a decir que mi cita a ciegas iba a ser mi nueva empleada –soltó una pequeña carcajada.

Sonaba bastante ridículo si lo decía así, pero Hallie no tenía la culpa de nada. Claro que para ella había sido una gran sorpresa encontrar a su nuevo jefe en su casa.

Se enderezó un poco y remojó sus labios resecos por el viento que soplaba.

-Bueno, para mí también fue algo inesperado, ¿sabes? –se apartó el cabello del rostro ya que la brisa se lo mecía de un lado hacia otro.

-Me he dado cuenta –su tono divertido fue evidente para ella porque él había sido testigo de cuando Hallie se había dado cuenta quien era él-. Tu huida me dejó en claro todo.

Puso los ojos en blanco, aunque segundos después se arrepintió porque él era su jefe también y no quería que la despidiera por faltarle el respeto a pesar de que no estuvieran dentro del ámbito laboral, todavía no sabía cómo iban las cosas.

-No huí.

- ¿Ah no? –Namjoon volvió a reír y dio un paso más cerca de ella-. Porque eso pareció.

Hallie bufó y apartó la mirada hacia otro lado sin saber que decir.

La imponente altura de Namjoon la alteraba bastante y eso no le gustaba porque la sacaba de su zona de confort y no era algo con lo que estaba muy familiarizada y no sabía si solo era culpa de su altura sino de quien se trataba a fin de cuentas y que la sorpresa aun perduraba en ella.

-Recuerdo tu rostro de solo haberte visto unos segundos en el restaurante –tenía la voz gruesa y suave y le gustaba como hablaba-. Seokjin me habló bastante bien de ti y sobre la idea de emplearte y no estuve en desacuerdo porque creí que a él le vendría bien una ayuda con la contaduría del lugar porque no suelo estar siempre ahí para ayudarle en eso –por alguna razón Hallie seguía el movimiento de sus labios mientras Namjoon seguía hablando, parecía ser algo muy entretenido e interesante para ella.