ESPECIALES

Jaewoo

                                                Me quedé dormido y todavía soñé contigo

Hoy era uno de esos días en que su padre trabajaba desde casa, Jungwoo estaba sentado en el sofá viendo su serie favorita mientras oía a lo lejos el teclado de la computadora, su papá era el director de una gran empresa, así que siempre estaba ocupado, pero no lo suficiente como para no tener un ojo encima suyo todo el tiempo.

—Jungwoo ¿no piensas ir a tu clase de inglés hoy? —Johnny preguntó, mirándolo desde la cocina, el omega suspiró.

—papá, no quiero ir a clase hoy, quiero quedarme justo aquí, cubierto de mantas mirando como Gilbert se enamora, para empezar ¿por qué tengo que ir a clases de inglés? No pienso vivir en el extranjero—Jungwoo se acomodó más entre las mantas y oyó a su padre suspirar.

—mi hijo, no es porque vayas a vivir al extranjero, es porque lo necesitas, conocerás muchas personas que hablaran inglés, incluso en los trabajos pueden llegar a pedirte que sepas.

—papá—se quejó, deteniendo la serie—¿no tienes que trabajar? Por favor, déjame tranquilo—el omega se cubrió por completo con la manta y el alfa suspiró.

—¿qué haré contigo? —preguntó sin recibir ninguna respuesta.

El omega permaneció mirando televisión mientras su padre seguía trabajando, se quedó dormido en el sofá por el resto de la tarde, pero su padre no lo despertó, después de todo sufría de insomnio, desde pequeño había tenido problemas para dormir y debido a esto su padre siempre lo consintió y lo malcrió, a menudo su abuela se quejaba de ello, porque todo el mundo decía que no estaba ayudándolo a sobrellevar sus cargas, sino que simplemente estaba cargando todo el peso de él.

De cualquier manera, a Jungwoo no le importaba lo que dijeran los demás, solo le importaba su papá y su papá no estaba enfadado con él y no le decía nada entonces no veía problema en continuar siendo un mimado.

—¿qué quieres para cenar, Jungwoo? —el alfa revisó la heladera y se quejó—Jungwoo ¿no has estado cocinando? Tienes dieciséis años ¿cómo no puedes cocinar? Mira toda esta verdura, otra vez es un desperdicio, ponte un abrigo, iremos a comprar.

El omega hizo un pucherito y arrastró sus pies, yendo a buscar a un abrigo, todavía tenía puesto el pijama, pero no le importó—¿podemos comprar helado? —Jungwoo se puso su abrigo de peluchito y Johnny buscó su saco.

—¿ya te terminaste el helado? Le pediré a Doyoung que racione el helado.

—¡papá! ¡no necesito un niñero! ¡pensé que lo habías despedido! ¡siempre me molesta! —el omega salió primero y Johnny negó la cabeza al ver que iba a ir en croocs.

—no, no despedí a Doyoung, tenía exámenes esta semana por eso no vino, además cocina bien y siempre te lleva a la escuela, me ayuda mucho, hoy ni siquiera fuiste a tus clases de inglés—murmuró su padre, tomándole de la mano—entonces ¿qué quieres comer?

—no quiero comer—Jungwoo rodó los ojos y su padre empezó a hablar solo, preguntándose qué deberían comer.

Siempre habían sido ellos dos y los niñeros, a veces eran mujeres y otras veces hombres, se encargaban de llevarlo a clases, prepararle la comida y hacerle compañía, pero ninguno había durado tanto como Doyoung, aguantaba cualquier travesura y nunca se quejaba o le gritaba, la mayoría de los casos, los niñeros eran despedidos por gritarle, Doyoung nunca le gritó.

Observó a su padre buscar productos entre las góndolas mientras el se arrastraba de mala gana con el carrito de compras, sus ojos de pronto se ampliaron cuando vio a un chico de su escuela, reconoció el uniforme de inmediato, gris con rojo, Jungwoo levantó el cuello de su abrigo para ocultar su rostro, pero el alfa a unos metros era Jaehyun y lo reconoció.