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 advertencia: au hada, +18

                                                          Una hadita enamorada

Las hadas estaban reunidas como habitualmente lo hacían, en el bosque solían cuchichear sobre sus travesuras, después de todo eran unas criaturas demasiado juguetonas, tanto así que rozaban el punto de malvadas, porque eran incapaces de medir por sí mismas el daño que podían hacerle a los demás.

—Jaemin ¿qué has hecho hoy? Siempre estás cosechando, tú no te diviertes—se burló Chenle, la hadita de cabello purpura.

Jaemin frunció el ceño, cruzándose de brazos e ignorándolo, asi que las demás haditas se rieron, Donghyck, el hada de cabello negro, pestañeo repetidas, mirándolo fijamente—Jaemin se convertirá en un hada de nuez en cualquier momento.

El hadita le miró aterrado—¡no! ¡jamás me convertiré en un hada de nuez! ¡pero si no cosecho entonces no pasaremos el invierno!

Mientras peleaban, el líder de la cosecha se acercó a ellos, Kun volaba con sus pequeñas alas cansadas—dejen a Jaemin en paz, comiencen a buscar menta, ya no quedan hojas.

Al oírlo, Jaemin se fue detrás de él, sacándole la lengua a las demás haditas, algún día deseaba convertirse en un buen líder como Kun, aunque sabia que se hacia el doble del trabajo cuando se era líder.

—Kun ¿qué debería hacer ahora? Terminé de juntar los frutos que me pediste, ahora las haditas de la reserva los están disecando.

—oh, Jaemin, eso es muy bueno, nos faltan algunas cosas, pero el principal problema es esto—Kun voló hasta la base principal y Jaemin entró con timidez, no todas las haditas podían entrar, pero él desde hace poco había obtenido el permiso—necesito una herramienta para esta máquina, pero no tengo idea de qué herramienta necesito.

Ambas hadas miraron detenidamente la máquina, era una de las cuales exprimía el polen de las flores para que las hadas pudieran utilizar su magia.

—vaya, qué problema, yo tampoco sé qué herramienta es—Jaemin se llevó las manos a la cintura y Kun rio.

—Renjun ha estado haciendo bocetos de las posibles herramientas, pero construir todas ellas llevaría un largo tiempo que no tenemos, en vista de que el invierno está cerca, tendremos que ir a buscar las posibles herramientas a las casas de los humanos —el líder suspiró—dos cazadores terminaron con sus labores, pero dos siguen siendo pocos ¿te gustaría unirte a ellos? Aunque es una misión difícil.

Jaemin tomó una bocanada de aire y sus alitas revolotearon con emoción—¡sí! ¡me gustaría! ¡puedo hacerlo!

Kun sonrió con orgullo, mostrándole el plan, pidiéndole que se prepare para la reunión con los dos cazadores, en la cual daría las instrucciones y les ofrecería elementos de protección, asi como grandes porciones de polvo mágico.

El hadita estaba tan emocionada que de regreso a su casita en el árbol, ignoro a sus vecinos, buscando su mejor atuendo para viajes largos. El líder le había confiado una tarea muy importante y Jaemin no quería decepcionarlo, cuando era niño le encantaba explorar y podía volar muy bien por prolongadas horas, y aunque no había podido entrar al grupo de los cazadores porque era un trabajo demasiado pesado, él todavía podía trasladar objetos ligeramente pesados.

Se puso unos pantalones marrones para poder camuflarse con facilidad y un chaleco para cuidar de sus alitas, agarró uno de sus bolsos y puso allí un frasco con frutos secos, también guardó su cantimplora, necesitaba estar bien hidratado y en cuanto tuvo todo listo, volvió a salir, yendo de nuevo hacia la base en donde el líder lo estaría esperando con los cazadores.

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