El alma de una dama intensa

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Regresaron al internado y terminaron los deberes.

Roxanne realmente había disfrutado pasar el tiempo con sus amigos en el museo, guardando algunas fotos como recuerdo y tesoro, además de pensar sobre el cuadro, y había entrado en el cuarto fantasma para contarle a su padre lo que había vivido.

"Me pone muy feliz que hayas pasado un agradable tiempo fuera, mi pequeña flor".

—Espero que puedas salir, realmente me gustaría recorrer la isla completa contigo y con mamá.

"Seguiremos buscando una salida, lo prometo".

—A propósito, ¿sabes algo sobre el fantasma de la dama del retrato?

"¿Emerald Thorne?".

—¿Así se llama? Tiene un traje de condesa y un sombrero emplumado demasiado grande para su cabeza.

"Sí, ese es su nombre. Una fantasma clasista y demasiado dramática. Faltó que fuera vampiresa para que compitiera con la condesa sangrienta, pero sabe colmar la paciencia de la gente en poco tiempo".

—¿Qué tan problemática es? ¿Cuál es su historia?

"Residía en un palacio pequeño de la isla, hace más de doscientos años, nacida de familia adinerada, y un ego muy, muy grande. Maltrataba a los sirvientes, y siguió soltera hasta los treinta, comprometida con otro idiota millonario. Murió porque su prometido y unos amigos le hicieron bastante daño".

—¡Qué horror!

"En su forma fantasma les causó un paro cardíaco, y luego se hizo pasar por una vengadora, pero solo para mujeres de clase alta, las demás chicas sufrían y ella era indiferente. Su belleza era solamente física, jamás tuvo corazón".

—Vaya hipocresía, no creo que se le considere vengadora siquiera.

"No solo eso, ella tenía la habilidad de cambiar tu cuerpo, te podría transformar en un hombre o en mujer dependiendo el caso, te atormentaba en tu cabeza y hacía unos berrinches escandalosos. A tu tía Minjo la cambió y se parecía a tu tío Manná".

—Son gemelos, no me sorprende.

"De pequeño tu tío hacía de todo a tu tía para que dejaran de parecerse, tu tía hacía lo mismo, pero el fantasma no se puso de su lado".

—Suena a que le gustó su rostro.

"Así fue, y pues, sabes que hemos adquirido nuestro patrimonio a lo largo de años, se le declaró pero lo dejó al saber su edad".

—¡¿Solo por eso?!

"Faltó que supiera que antes éramos pobres, entonces le hubiera hecho bromas crueles".

—Que bruja. Espero oír más aventuras fantasmales de tu parte.

"Prometo contarte más historias, por ahora debes descansar".

💮🌹💮

Soñaba con un palacio, una pagoda pequeña, estaba por asomarse y contemplar la ciudad que había leído, sonrió con la vista cuando pronto notó que las chicas estaban corriendo en la calle y decidió investigar, algunas sufrían heridas y tenían moretones, y los pocos chicos que habían se miraban con asco.

—¿Qué pasó conmigo?

—Ugh, huelo mal.

Los diálogos eran bastante confusos, hasta que una chica lo separa de ellos y empieza a gritarle desenfrenada.

—¡Leónidas! ¡¿Dónde está mi madre?!

La aparta con cuidado y se oculta rápido en una casa, ahí, frente a un espejo, vio el rostro de su padre, corrió lo más rápido que pudo para abrazarlo, pero cuando notó que era su reflejo se sintió triste, moría por volverlo a ver, y el sueño hubiera sido doloroso hasta que un grito la despertó y a todos en el internado.

Afterlife AcademyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora