Afterlife Academy

Demonio

La paruka retrocedió y tomó una forma para poder pelear con ella, sin embargo la joven ya lo atacaba nuevamente a una velocidad peligrosa, cuando sintió que podía defenderse notó que su fuerza aumentaba a cada golpe, y aunque le asimilara la velocidad de alguna manera ella subía su ritmo, la cuchilla de su espada pronto tocaba su piel, y aún cuando se desvanecía para tomar fuerzas la joven ya estaba al ataque nuevamente.

Siguió un rato, de no ser por la intervención de una bola de fuego en su dirección, la esquivó y encontró en un instante al segundo atacante: Majeon-lly; la Sehrgar sacó un conjunto de cartas para hacerle de escudo a la paruka, en vano ya que la joven las rompió antes de que llegaran a su objetivo, y solo la miró amenazante.

—Tienes que controlarte, Alzul —le suplicó la dama.

La figura se apareció frente a ella antes de siquiera acabar su oración.

—No te metas en esta lucha, Majeon-lly... Por respeto a ti y a tu familia.

En menos de un segundo, logró detener un ataque de Sombra, dislocando su cuello y brazos para sostener la espada, entonces procedió a alejarlo y el duelo siguió mientras la hechicera intervenía para calmarla.

—Roxanne, sé que puedes oírme... Tienes que controlarte...

Sabía que ella no la atacaba por Simon, y también sabía que estaba cegada por las emociones y que sería difícil hacerla razonar, la lluvia comenzó a caer a raudales y la paruka se estaba debilitando, si bien era distinto a cuando peleó con alguno de sus otros hermanos, ahora mismo se sentía acorralado.

—Nunca antes un astarli había sido tan poderoso. No... Esto no es un astarli común. La maldición hizo un buen trabajo... Ha alcanzado el nivel de una paruka en poco tiempo.

Siguieron el duelo por un tiempo, de repente Sombra cayó al suelo, y justo cuando estaban por clavarle la cuchilla un grito detuvo a Alzul.

—¡PUA!

La aamusan pudo encontrar a su madre, quién corría y caía al suelo por alcanzarla, Majeon-lly y la paruka temieron lo peor cuando se desvaneció y reapareció frente a su madre, finalmente sintieron un alivio cuando solo la abrazó y la cubrió con un ala negra; Neru sintió el corazón de su hija detrás de aquel borboteo de emociones, y acarició su cabeza lentamente y la acurrucaba en sus brazos.

—Te juro, hija mía, que nos iremos de aquí... Seremos una familia pequeña de nuevo...

La Sehrgar se acercó con cautela para revisar a los heridos, mientras que Sombra miraba a la joven algo temeroso.

—Tu hija es demasiado complicada, Leo —pensó para sí.

Majeon-lly terminó de curar a uno de los tíos de Roxanne, quien en un momento de enojo se levantó con pesadez y comenzó a gritarle a Neru.

—¿Ya viste qué clase de monstruo es tu hija? ¡Es una amenaza para todos!

La aamusan lo escuchó y volvió a ponerse a la defensiva, su madre se aferró a ella y le hacía promesa tras promesa para tratar de calmarla, de repente ambas se desvanecen sin que nadie supiera su paradero, temiendo que les atacara de nuevo.

—¿Por qué tuviste que hablar?

—¿Acaso no se dan cuenta? ¡Es una amenaza!

—Seguro y ha de estar en algún rincón oculto de la isla.

—Maestro Sombra, por favor, perdónenos.

La paruka miraba a la nada estupefacto, solo reaccionó cuando Molly se le acercó.

—Es mejor convertirla en una errante —soltó su abuelo molesto—, antes de que sea demasiado tarde...

—No... No... Yo sabré qué hago... —en ese momento tuvo una corazonada—. Será mejor que busques a tu nieto... Tengo un mal presentimiento.

🌑🌑🌑

Simon bajaba las escaleras somnoliento, llamaban a la puerta desde hacía unos minutos y cuando abrió se sorprendió de ver a Olive, bajo la lluvia y en pijama.

—¿Qué estás haciendo aquí? Apenas son las tres y media de la mañana...

—Algo horrible, estaba aquí, lo vi en mi sueño.

—Oli... Te aprecio mucho, pero creo que es una exageración...

Un ruido los alertó y la luz se cortó en la casa, aquel desastre provenía de la sala y se acercaron con precaución, los vidrios estaban por todo el suelo y una figura enorme y tosca estaba en un rincón.

—Te lo dije —susurró la joven, a lo que su amigo se sorprende demasiado y se siente aterrado.

Siguieron andando sin hacer ruido, hasta que notaron que una voz salía de aquella silueta emplumada.

—Por favor, mi pequeña flor... Debes calmarte... Por la mañana buscaremos un nuevo hogar... Ya no estarás con ellos...

Al asomarse, los chicos vieron a una mujer de cabellera oscura y llorando mientras abrazaba a la criatura, Simon la reconoció como la madre de Roxanne y decidió acercarse un poco más, pisando los vidrios por accidente. La criatura giró la cabeza de manera sobrenatural, a lo que los jóvenes dejan escapar un grito y la ponen más nerviosa.

—Ro... Pua... No los lastimes... No te han hecho nada...

La silueta solo los miraba, Simon pronto la reconoció al igual que Olive y se siguen acercando con cuidado.

—Rox —susurró su amigo—, Roxanne... Ya estás a salvo... Necesitas respirar...

—Roxxy, tranquila, ya pasó lo peor...

Alzul los miró a los tres y poco a poco sus emociones abandonaron su cuerpo, hasta que volvió a la normalidad y se quedó inconsciente debido a lo ocurrido.

—¿Qué era eso? —preguntó Olive asustada y sintiendo que su alma regresaba a su cuerpo.

—Por lo poco que sé —explicó Neru—, es un astarli, un reflejo de las emociones que ellos como guardianes no suelen demostrar.

—¿Ya había tenido un ataque?

—No... No, apenas despertó hoy, y es muy agresivo. Mi esposo, su padre, podía crear un Limbo de bolsillo, lo hacía desaparecer.

—Uno tranquilo.

—¿Qué sucedió? —pregunta el chico preocupado—. De repente dejó de venir a clases.

—Sus abuelos y tíos, la han presionado desde pequeña para que sea igual que su padre...

—Eso es terrible.

—¿Estará bien?

—Solo se quedó inconsciente, apenas lo despertó, seguro y se asustó en el fondo de que sucediera... Tenía que calmarla...

—Y lo hicieron bien.

Aquella voz era la de Majeon-lly, quién se acercó a revisarlas a ambas.

—Su astarli es demasiado poderoso y agresivo, peleó al nivel de una paruka, los demás suelen ser más tranquilos.

—¿Por qué es así?

—Porque una maldición yace sobre ella, y tiene sangre de vampiro, pero seguro y se ha roto, está rabieta no pudo ser ignorada en absoluto. Seguro y las demás paruka querrán saber al respecto.

La hechicera reparó las ventanas y los acurrucó a todos en un agradable sueño (además de regresar a Olive a su casa), entonces se acerca a un retrato y habla con la foto de Leónidas.

—Es mejor que regreses pronto, tu hija necesita tu guía.