- Hablando
- Pensamiento
- Charla interna
- Hechizos
Esta historia es un Fanfic sin ánimo de lucro, los personajes, escenarios y demás corresponden a sus legítimos propietarios
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Ya habían pasado varios días desde Halloween, desde entonces las cosas habían mejorado en algunos sentidos, pero en otras las cosas seguían prácticamente igual. En primer lugar, el pequeño dúo de Hermione y Harry se había convertido en un trio con la incorporación de Delphini Ryddle y en segundo lugar gracias a que la gente ahora miraba a Harry con una mezcla de admiración y de miedo.
La noticia de la lucha de Harry con el trol y de como este le había matado se había extendido como la pólvora por toda la escuela, mucha gente al enterarse fue a ver a Harry para diese detalles de como fue posible que un alumno pudiese realizar aquella hazaña y más solo. También había otros como Malfoy quien decía que Potter lo había hecho solo por la fama y que se merecía un castigo en vez de elogios por parte del resto de la escuela o de algunos de los profesores, pero en el fondo a Harry no le importó.
- Bueno... - dijo Hermione. - ¿Os apetece ir a ver el partido de Quidditch contra Slytherin?
- Por mí no hay problema. - dijo Delphini. - Supongo que es mejor eso a tener que seguir escuchando a los pesados de mi casa quienes solo saben interrogarme por lo que ocurrió en Halloween.... A veces desearía meterme en algún lío y que me castigasen si con eso pudiese librarme de ellos durante algunas horas.
- No me interesa mucho el Quidditch. - dijo Harry cuyas palabras desanimaron a la castaña quien bajó un poco la cabeza. - Pero supongo que no puedo juzgar un deporte sin verlo una sola vez, cuenta conmigo para ir con vosotras la partido, chicas.
- ¡Gracias, Harry! - dijo Hermione abrazándolo. - ¡Muchas gracias!
Bien hecho, Compañero. - dijo Albión. - Tienes a la primera integrante de tu nuevo harén, ahora queda que también vayas a por la tsundere amarilla que tienes a tu izquierda.
Me cae bien tu ratoncita de biblioteca, Socio. - dijo Ddraig. - Si la comparamos con la imbécil de la Gremory, debo decir que esta es mucho mejor. Lista, trabajadora, bonita y además, puedo sentir que la misma tiene fuertes sentimientos por ti. Pero te recomiendo que menciones los contratos matrimoniales, no sabes cuando puede aparecer alguna de las 3 chicas con las que vas a casarte y si no lo haces puede que pierdas a tu ratoncita para siempre.
No es tan fácil, Ddraig. - dijo Harry en su mente mientras seguía con el desayuno. - Además, creo que estás apresurando mucho las cosas, no creo que Hermione esté enamorada de mí, no tengo nada a parte de una fama que nunca quise, al igual que no creo que a ella le interesen mucho esas cosas a esta edad.
Tienes mucho que ofrecer, Compañero. Tienes un corazón bueno y valiente que estaría dispuesto a prácticamente cualquier cosa con tal de que las personas que aprecias estén a salvo y sean felices. Eres uno de los magos con más poder dentro del mundo mágico británico, tienes casas, dinero, la mitad de este castillo... y no menos importante, nos tienes a Ddraig y a mí.
Albión tiene razón. No dejes que lo que ocurrió con la ángel caído y con el resto de aquellas idiotas te afecte en esta vida, Socio. Tienes todo el derecho a ser feliz y más con todo lo que has hecho en tus 2 vidas, por lo que piensa en dar un salto de fe otra vez y vuelve a abrir tu corazón al amor una vez más.
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El Mago Rojo y Blanco
FanfictionHarry Potter era un niño que vivía con sus tíos y su primo en el número 4 de Privet Drive, este nunca fue querido por esa parte de su familia quienes no desaprovechaban una oportunidad para hacerle sufrir. Pero... ¿Qué pasaría si un día esos maltrat...