Harry Potter era un niño que vivía con sus tíos y su primo en el número 4 de Privet Drive, este nunca fue querido por esa parte de su familia quienes no desaprovechaban una oportunidad para hacerle sufrir.
Pero... ¿Qué pasaría si un día esos maltrat...
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Unas horas después de que Hermione evitase que Lavender cometiese un error de que la misma podría llegar a arrepentirse, el grupo de Harry se encontraba en la sala de los Menesteres donde todos veían a una Lavender rodeada por la magia del caos de Hermione siendo sujetada en el aire a la vez que esta hacía todo lo posible para liberarse y lanzarse una vez más hacía Harry y según sus palabras: "Aparearse con su alfa."
- Tranquila, Lavender. - dijo Padma Patil a su amiga. - Ahora mismo sabes que no eres tú quien está en control de tus actos, es el lobo de tu interior quien te está obligando a comportarte así. ¡Tienes que resistirte!
- ¡Me resistiré en cuanto mi alfa se apareé conmigo, Padma! - dijo Lavender con sus ojos todavía mostrando los de la mujer lobo y sorprendiendo a todos los presentes. - ¡Solo Harry es digno de ser mi alfa y el padre de mis futuros cachorros! ¡Soltadme de una vez! ¡Tengo que comenzar a tener a mis cachorros con él! - dijo Lavender mirando a Harry con un enorme deseo y con las mejillas rojas.
- Tal vez deberíamos pedirle ayuda al profesor Dumbledore o al profesor Strange. - dijo Ginny algo celosa y preocupada. - Seguramente ellos tengan mejor idea que nosotros sobre como ayudar a Lavender en este estado...
- Parece que ha entrado en celo y está deseosa de poder aparearse con el más digno y fuerte a sus ojos tal y como haría un animal salvaje, Harry. - dijo Luna mirando a su prometido. - Me parece que incluso si la liberamos la misma no va a dejar de ir detrás de ti, amor.
- Lo sé... - dijo Harry preocupado por la chica para después acercarse a ella. - Lavender... Dime una cosa, antes me dijiste que me amabas y tengo que saber una cosa. ¿Fuiste la Lavender que conozco desde primero quien dijo eso o es la mujer lobo dentro de ti quien te obliga a decir esas cosas?
- ¡Las dos, mi alfa! - dijo Lavender sonriendo y provocando el sonrojo de Harry. - Desde que me salvaste de la segunda prueba durante el torneo de los 3 Magos, comencé a sentir cosas por ti que nunca había sentido por nadie. - dijo Lavender sonriendo, con sus ojos volviendo poco a poco a ser humanos de nuevo y con esta apartando la mirada al darse cuenta de lo que estaba haciendo. - Te amo, Harry, pero sé que no me merezco tu amor ya que no soy una humana... Ahora no soy nada más que un peligroso monstruo que podría haceros daño a ti y a los demás.
- Tranquila, Lavender. - dijo Harry caminando hacia la chica una vez que esta fue bajada y liberada por Hermione. - Sé mejor que nadie el miedo que puedes tener ante una situación completamente desconocida para ti y al no saber lo que va a ser de tu vida a partir de ahora. - Lavender alzó la mirada y se fijó en los ojos verdes de Harry los cuales le devolvían una mirada de comprensión y amabilidad. - Aunque a diferencia de otros antes que tú, tienes la suerte de que no vamos a dejarte sola ante este problema. Ddraig, Albión y yo estaremos a tu lado durante todas la noches de luna llena a partir de ahora al igual que nos aseguraremos de que vayas a morder ni hacerle daño a nadie.
