Harry Potter era un niño que vivía con sus tíos y su primo en el número 4 de Privet Drive, este nunca fue querido por esa parte de su familia quienes no desaprovechaban una oportunidad para hacerle sufrir.
Pero... ¿Qué pasaría si un día esos maltrat...
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El tiempo pasó con relativa tranquilidad en la mansión Potter después de los acontecimientos ocurridos en el juicio y posterior liberación de Sirius Black, Lord Black fue recibido en la mansión Potter con una enorme fiesta que las parejas de Harry, amigos y padres habían preparado para celebrar su puesta en libertad. Sirius no se esperó eso y lloró de alegría a la vez que agradecía a todos su apoyo y ayuda para que el mismo fuese libre, la fiesta duró hasta bien entrada la noche con los habitantes de la mansión danzando y cantando sobre la libertad y sobre dejar un doloroso pasado atrás.
Tampoco pasó mucho tiempo hasta que los periódicos del mundo mágico hablaran sobre la detención de Cornelius Fudge y las razones detrás de ello, mucha gente se sorprendió y quedó horrorizada al saber sobre los diversos crímenes cometidos por el otrora Ministro de Magia, sin embargo, no todos los del mundo mágico creyeron tales acusaciones diciendo que si Fudge hizo algo como eso debía tener una razón de importancia detrás de ello. Aunque la vista de nuestro protagonista no estaba centrada en declaraciones procedentes de idiotas que se negaban a ver la verdad incluso teniéndola justo enfrente de los ojos, su vista estaba centrada en Voldy y en su aliado más peligroso, Rizevim.
- Creo que las cosas se van a complicar muchísimo con Rizevim presente en este mundo. - dijo Harry una mañana en el estudio de la mansión. - Ojalá ese bastardo se hubiese quedado muerto después de que Fafnir acabase con él, sin embargo, temo que clase de cosas haga ahora que tiene a Voldy y a los mortífagos con él.
- Yo también lo desearía, amor mío. - dijo Daphne quien había comenzado a ejercer como Lady Potter después de su matrimonio con el chico que sobrevivió ayudándole con los temas relacionados con la Casa. - Odio que ese bastardo se haya llevado el título de mi padre al igual que la mansión y el oro que mi padre consiguió trabajando tan duramente. - dijo Daphne apretando los puños.
- Yo también lo odio. - dijo Astoria quien también ejercía como Lady Potter. - No es justo, todavía no me creo que los miembros del Winzegamot se pusieran de su parte en lugar de la nuestra y rechazando el testamento de mi padre. Pero la que peor lo pasa es mi madre, la misma no ha dejado de llorar desde que se enteró de lo que pasó y de lo de Rizevim... - dijo Astoria pronunciando el nombre del antiguo hijo del Lucifer original con odio.
- Lo intenté, chicas. - dijo Harry bajando la cabeza. - Hice todo lo que pude para impedir que ese bastardo ganase, pero él seguramente habría conseguido sus apoyos sobornando a gran parte del Winzegamot para que le apoyasen... Lo siento...
