Harry Potter era un niño que vivía con sus tíos y su primo en el número 4 de Privet Drive, este nunca fue querido por esa parte de su familia quienes no desaprovechaban una oportunidad para hacerle sufrir.
Pero... ¿Qué pasaría si un día esos maltrat...
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Las vacaciones de Navidad habían iniciado y con todos los habitantes de la mansión Potter regresando a la enorme casa para pasar aquellas fiestas junto a los amigos y familiares a quienes o veían desde el inicio del curso escolar. Lavender también se había sumado como una habitante más de la mansión ya que la misma no deseaba volver a aquella estancia solitaria de Hogsmeade y gracias a que su novio la había insistido durante varios días para que se mudase con él y con el resto de su nueva familia. Además de que por primera vez en meses, Harry pudo dormir durante la noche de luna llena gracias a que la perra de 3 cabezas, Fluffy, se quedaba con ella y con Remus durante aquellas largas noches donde los licántropos se pasaban aquellas noches jugando entre ellos bajo la atenta mirada de Fluffy quien no les dejaba salir de su caseta de piedra hasta llegado el siguiente amanecer.
- Al menos nos hemos librado de otro problema antes de que los mismos aumenten una vez más... - dijo Harry en su estudio después de escuchar sobre la batalla que habían tenido su padrino, Remus y Arthur en el Ministerio de Magia. - Me alegro de que hallamos conseguido capturar a la serpiente de Voldy, si le sacamos todo lo que sabe es posible que nos podamos adelantar a los próximos planes de Rizevim y de Voldy y que así podamos prepararles una trampa y quitárnoslos de en medio.
- No te fíes solo porque ahora tengamos una racha de buena suerte, Socio. - dijo Ddraig con el Boosted Gear apareciendo en su brazo izquierdo. - Tú y yo hemos vivido situaciones en las cuales pensábamos que no podría pasar nada malo hasta que sufrimos un ataque sorpresa por parte de la Brigada del Kaos o Qlippoth. Además, de que deberías entrenarte más ya que no sería sorprendente de que el bastardo de Rizevim haga alguna de las suyas con los mortífagos aumentando sus fuerzas.
- No creo que ni el propio Voldy esté en desacuerdo con ir en contra de sus ideales si con eso consigue su objetivo de hacerse con el mundo y matarte, Compañero. - dijo Albión con el Divine Divinding apareciendo en la espalda de Harry. - Sabes perfectamente como es Voldy y más después de ver sus recuerdos, a ese hombre no le importa nada que no sea él mismo y lo útil que le sean sus marionetas hasta que se canse de ellas y las mate.
- Lo único que no entiendo es como es posible que el propio Rizevim actue como si fuese un subordinado de Voldy. - dijo Harry con la mano en el mentón y pensando. - Ese monstruo no es la clase de persona que se pondría al servicio de otra por voluntad propia, más bien es alguien que te utilizaría hasta que se cansase de ti o que ya no le eres útil... En esa situación, esos dos bastardos se parecen muchísimo... ¡Ojalá supiera que es lo que planean para así hacer un plan y evitar cualquier daño posible a las chicas o a cualquiera de las personas que me importan!
