Harry Potter era un niño que vivía con sus tíos y su primo en el número 4 de Privet Drive, este nunca fue querido por esa parte de su familia quienes no desaprovechaban una oportunidad para hacerle sufrir.
Pero... ¿Qué pasaría si un día esos maltrat...
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Nos encontramos a mediados de Junio cuando al fin Harry y su grupo habían conseguido organizar a los alumnos voluntarios de Sekiryuukou, Gryffindor, Ravenclaw y Hufflepuff para comenzar a entrenarse para el momento en el que estos tuvieran que enfrentar al ejercito de Voldy y lo que sea que estuviesen planeando. A decir verdad, ni Harry ni ninguno de su grupo esperaban que estos voluntarios llegasen a tener el suficiente poder y la suficiente maestría como para enfrentarse al propio Voldy, Bellatrix o incluso Rizevim, pero la intención de todas y todos ellos era que estuviesen lo suficientemente preparados para poder vencer a los mortífagos más débiles.
- Bienvenidos a la Sala de los Menesteres. - dijo Harry mirando a la gran cantidad de alumnas y alumnos pertenecientes a las casas de Sekiryuukou, Gryffindor, Hufflepuff y Ravenclaw sentados en bancos y mirando atentamente al chico que sobrevivió. - Como todas y todos vosotros sabéis estas clases que vais a recibir tienen como único objetivo que podáis enfrentaros a los mortífagos y que podáis sobrevivir a un duelo contra alguno de ellos evitando en la medida de lo posible que lleguéis a morir. - dijo Harry provocando un poco de miedo en los presentes.
- ¡NO BAJÉIS LA CABEZA! - dijo Ddraig y con el Boosted Gear manifestándose en el brazo izquierdo de Harry. - ¿Acaso la mayoría de vosotras y de vosotros habéis venido con una voluntad tan débil que pensais que mi Socio va a estar siempre para salvaros el pellejo? Porque si es así, os digo desde ahora que no sois nada más que unos ingenuos.
- El mundo no es tan simple como para que penséis que mi Compañero va a ser de nuevo el héroe que os salvará sin que tengáis que hacer nada de nada. - dijo Albión y con Divine Dividing apareciendo en la espalda de Harry. - Voldemort se ha fortalecido desde la última vez que apareció en este mundo y eso solo ha hecho que el juego se haya hecho más peligroso que antes. - eso hizo que más temblasen de miedo.
- Pero os digo que este entrenamiento que vais a hacer tiene como objetivo que os hagáis más fuertes para no solo poder sobrevivir, también para ganar. - dijo Harry con tranquilidad y sonriendo atrayendo las miradas de los que estaban asustados. - Decidme ahora todas y todos vosotros ¿De verdad pensáis que Voldy surgió siendo tan fuerte como es de la nada? o ¿Qué tal el legendario Merlín, los 4 fundadores de Hogwarts y otros cientos de brujas y magos famosos a lo largo de nuestra historia? - Todos los presentes negaron con la cabeza.
- Todas las personas que ha nombrado mi dragón fueron en su día estudiantes como lo sois todos vosotros, larvas. - dijo Tiamat poniéndose al lado de Harry. - Buenos o malos, todos ellos dieron lo mejor de sí mismos para apuntar hacia las alturas y al igual que los dragones poder alcanzar los cielos.
