Capítulo 69

13 4 0
                                    

Habían pasado ya unos días pero la situación seguía siendo la misma, o incluso peor. Voldemort y sus seguidores cada día obtenían más poder y los muggles o magos tenían que encontrar la manera de protegerse ya que con cada día que pasaba todo se volvía más peligroso.

Después de habernos ido de la Madriguera días antes en la boda de Bill y Fleur habíamos hecho varias paradas, incluyendo al número doce de Grimmlaud Place, del que nos habíamos tenido que marchar por un asunto, pero al final nos habíamos establecido en un bosque algo solitario  y muy tranquilo. Habíamos montado una gran carpa mágica enorme y con ayuda de unos cuantos hechizos la habíamos ocultado del resto de la gente; ahora era imposible que nos encontraran, o por lo menos no sería tan fácil como al principio. Nos turnábamos para hacer guardia fuera y así evitar a alguien no deseado y con ese tipo de medidas pasamos un mes. Ah y casi lo olvidaba, no pasábamos más de una semana en el mismo lugar por motivos de seguridad y esas cosas, lo habíamos aprendido por las malas y no queríamos volver a aprenderlo.

Esa mañana nos levantamos temprano y empezamos a recoger las cosas que estaban dentro de la carpa mientras mirábamos bien para no olvidar nada. Era algo pesado pesado tener que irnos así tan seguido pero no había otra opción más que ser atrapados y torturados por los mortífagos o por otro tipo de criaturas.
-¿Ya tienen todo?- preguntó Hermione desde la puerta
-Casi- respondí al instante mientras terminaba de guardar algo en mi mochila
-Vale pues dénse prisa que no tenemos mucho tiempo- dijo mirando un reloj
-Vale- murmuró Harry

Al final terminamos y en cosa de diez minutos ya teníamos todo desmontado y estábamos más que listos para marcharnos. Nos cogimos todos del brazo de Hermione y después de unos segundos de oscuridad y opresión en el pecho llegamos a otro bosque distinto el cual estaba cubierto por árboles y arbustos. Instalamos nuestro pequeño campamento y nos metimos en la carpa muertos de hambre esperando a que Hermione sacara algo de comida.
-¿Dices que no hay comida?- preguntó Ron horrorizado
-Sí Ron, ya te lo he dicho tres veces- respondió Hermione rodando los ojos
-¡Nos vamos a morir de hambre!- exclamó mi amigo dramáticamente
-Cálmate Ron- espeté -Algo encontraremos, aunque sea pasto u hojas de los arbustos-
-Eso no es comida- puntualizó Ron con una mueca
-Pues lo será si no encontramos otra cosa- replicó Hermione

Salimos Hermione y yo al bosque en busca de algo comestible mientras que los chicos terminaban de ordenar la tienda de campaña, aunque ambas sabíamos que realmente solo querían platicar. Nos habíamos metido debajo de la capa invisible de Harry por lo que era parcialmente seguro caminar por ahí, aunque claro que teníamos nuestras precauciones e íbamos alerta y en silencio por si cualquier cosa.

Habíamos recorrido casi medio bosque y no había ni rastro de comida por lo que al regresar estábamos bastante decepcionadas y al contárselo a Ron, este casi se desmayaba.
-¿Qué carajos vamos a comer?- preguntó histérico
-Ni idea- murmuró Harry
-Pues más vale que se les ocurra algo porque yo no funcionó si no como- espetó el pelirrojo
-Pues tendrás que funcionar o salir tu a buscar la comida, a ver si tu la encuentras- dijo Hermione tajante
-¿Y no puedes hacer un hechizo que convoque la comida?- preguntó Ron
-No- contestó Hermione intentando controlarse -Eso es imposible y ya te lo he explicado más de diez veces en todo el puto mes-

El resto del día fue horrible ya que ni Hermione ni Ron se dirigían la palabra y eso hacía que el ambiente estuviera más tenso que nunca por lo que Harry y yo decidimos no abrir la boca para no desatar ninguna otra pelea.

Al día siguiente la cosa no mejoró ya que tampoco encontramos comida por lo que después de un tiempo decidimos que iríamos a un pueblo cercano a por ella por muy riesgoso que eso fuera, con tal de hacer que Ron dejara de ser insoportable haría lo que fuera, ya que por más que fuera mi mejor amigo había que reconocer que tenía algún tipo de problema con la comida. Al final salimos Ron y yo bajo la capa invisible al pueblo mientras que Hermione y Harry armaban un plan para no se que cosa.

Salimos agachados y nos encaminamos hacia el pueblo el cual estaba bastante cerca de nuestro escondite, tan solo a un par de kilómetros. La suerte fue que al llegar ahí dimos con un mercadito repleto de comida local. Si queríamos obtener algo de comida tendríamos que actuar rápido, por lo que sin pensármelo dos veces lancé unas chispas hacia un lado a modo de distracción y en el momento en que la gente volteó aproveché para meter algo de fruta en mi bolsillo y salir corriendo junto con Ron, no sin antes dejar en el suelo un par de monedas muggles a modo de pago yaa que no quería ser ninguna ladrona.

Corrimos un par de metros hasta asegurarnos que estábamos a buena distancia y luego nos detuvimos a tomar aire.
-Tu plan fue brillante Olivia- jadeó Ron que aún no se recuperaba
-Fue lo único que se me ocurrió- respondí con modestia
-Pues salió de maravilla- dijo él haciendo que me ruborizara un poco

Al final llegamos a la tienda de campaña con algo de pan, fruta y verduras y dejamos que Hermione cocinara un poco de todo.

Esperamos un rato y al terminar de cocinar mi amiga nos sirvió una pequeña razón a cada uno.
-Hay que racionar la comida- se apresuró a decir Hermione al ver la cara de desprecio que había puesto Ron
-Vale- respondió el con la boca llena

Me metí el bocado a la boca y me supo a gloria, hacía casi tres días que no probaba bocado y ya me hacía falta, y bueno aparte estaba buenísimo. Todo el trabajo era agotador y poco tiempo teníamos para descansar, ya que si no estábamos haciendo guardia fuera estábamos armando planes locos para encontrar los Horrocruxes faltantes, que por si fuera poco no teníamos ni la menor idea de donde buscar, o peor aún, que buscar.

Lo que nadie nos contóDonde viven las historias. Descúbrelo ahora