Capítulo 78

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Después de pasar a recoger nuestras cosas y levantar la tienda nos pusimos en marcha para ir a ver a Hermione, la cual aún no sabía de nuestra llegada. Me hubiera gustado decir que estaba relajada pero la verdad era que me encontraba muy nerviosa y el hecho de conocer tan bien a mi mejor amiga me ponía aún más.

Íbamos charlando, poniéndonos al corriente sobre todo lo que nos había pasado y me sorprendió todo lo que habían pasado tanto Harry como Hermione, haciéndonos quedar a Ron y a mi como completos tontos.

Llevábamos ya un buen rato caminando y me preguntaba cuánto más tendríamos que caminar para llegar a su tienda.
-¿Falta mucho?-
-Creo que no- respondió Harry poniendo cara de concentración
-¿Cómo qué crees?- preguntó Ron
-¿Estamos perdidos?- pregunté poniendo mis manos sobre mis caderas
-No- dijo mi hermano -Sólo estoy viendo por donde hay que ir-
-Seguramente- murmuré sarcásticamente

Lo seguimos otro rato más hasta que se detuvo y dijo que ya habíamos llegado. Ron y yo compartimos una mirada nerviosa, respiramos profundo y esperamos. Escuchamos a Harry llamar a Hermione y como le había dicho que había alguien fuera, así que me armé de valor y crucé la puerta detrás de Ron.

Ella nos miró y cuando estuvo a poca distancia de Ron comenzó a golpearlo con los puños, maldiciendo y murmurando cosas que no entendía. Entre Harry y yo los apartamos al uno del otro y nos sentamos en un sillón sin cruzar palabra. Hermione ni siquiera me había mirado aunque viendo como había golpeado a Ron no tenía de que quejarme. Era algo doloroso que mi mejor amiga no me dirigiera la palabra pero en parte tenía razón, ambos nos habíamos ido y no habíamos dado la mínima señal de vida pero igual me afectaba un poco.

Cuando llegó la hora de cenar me excusé poniendo como excusa que tenía mucho sueño y me metí en la cama, decidida a no hablar con nadie. A ver, estaba algo cansada, sí pero también quería pensar y principalmente estar sola.

No llevaba ni diez minutos yo sola cuando sentí pasos que se acercaban por lo que rápidamente fingí estar dormida y me quedé quieta.
-¿Olivia?- susurró Hermione
-¿Sí?- pregunté sin voltearme
-¿Podemos hablar?- preguntó

Wow, eso que fue rápido. No esperaba que fuera a querer hablar conmigo hasta después de una semana o un par de días más, pero no, aquí estaba ella queriendo hablar conmigo.
-¿Olivia?- repitió ella
-Eh si si hablemos- dije sentándome en la cama

Ella prendió la luz y se sentó en la cama frente a mi mientras escuchábamos a los chicos decir sus estupideces.
-¿Por qué te fuiste?- preguntó ella repentinamente
-No podía dejar solo a Ron, Hermione- expliqué -Si me quedaba aquí con ustedes quien sabe que habría pasado-
-Lo sé- suspiró -Cuando se fueron nos preocupamos muchísimo, los esperamos unos días más por si volvían pero no lo hicieron. Nos pasamos el tiempo buscándolos pero con el tiempo nos dimos cuenta de que sería al muy difícil casi imposible-
-Nosotros también los buscamos, después de un par de días pero ya no estaban y a cada sitio que hemos ido hemos buscado- estaba algo enfadada por lo que había dicho pero era totalmente cierto y aparte no quería causar ninguna pelea entre nosotras
-¿Qué pasó cuando se fueron?- preguntó Hermione

Le conté todo lo que había pasado, a donde habíamos ido pero claro, omití el detalle de que estaba embarazada, no sabía la razón pero aún no me sentía preparada para contárselo a alguien más. Ella también me contó lo que habían hecho y lo que habían logrado encontrar, cosa que reavivó mis esperanzas de poder destruir todos los Horrocruxes de una vez por todas.

Pasamos el resto de la noche platicando y al final logramos reconciliarnos. Pasamos un muy buen rato riendo y al rato se nos unieron Harry y Ron  pasamos esa noche toda sin pegar ojo pero sorprendentemente no me hizo falta, al parecer volver a verlos fue lo único que necesité para quitarme el sueño todo.

A la mañana siguiente me desperté entre los chicos y con mucho cuidado salí de la cama. Eran aproximadamente las ocho y media de la mañana por lo que me serví algo de leche en una taza que encontré y agarré una galleta de chispas. Me senté en la mesa y con mucha calma comencé a comer, olvidándome por completo de la guardia que tenía que hacer al levantarme. Al terminar lavé la taza y finalmente salí de la tienda sigilosamente

El invierno ya estaba llegando a su fin y te dabas cuenta al salir por la mañana y ver cada día menos nieve en el suelo y menos frío. Ansiaba la llegada de la primavera, o del verano o de lo que fuera, solo quería que el tiempo pasara lo más rápido posible, esperaba que la guerra terminara cuando aún no había comenzado.
-¿Olivia estás ahí?- preguntó Hermione
-Sip- respondí -He venido a hacer guardia-
-Te acompaño- dijo sentándose a mi lado

Estuvimos un buen rato en completo silencio que a decir verdad no sentí nada incómodo ya que no tenía ganas de hablar, es más, quería estar sola pero no me atrevía a decirle que se marchara. De vez en cuando sentía su mirada sobre mi, como si me estuviera analizando a profundidad pero yo hacía como que no me daba cuenta y ni me molestaba en mirarla.
-¿Estuvieron con la Señora Weasley?- preguntó
-Ni locos- me apresuré a responder -Nos quedamos con Bill y Fleur-
-Ah vale- murmuró

Otra vez silencio, pero esta vez si fue incómodo porque no sabía que más decirle. Mi mente estaba en blanco y cada vez que iba a hablar me detenía y me quedaba pensando en otra cosa. Mientras tanto Hermione seguía observándome y supuse que tendría algo que decirme.
-¿Quieres decirme algo?-
-No- contestó -Bueno en realidad sí, es más bien una pregunta-
-Venga dime- la apresuré
-No lo tomes a mal, ¿Vale?-
-¡Qué sí hombre!- espeté -Solo dímelo-
-Es que quería saber si estabas embarazada- murmuró
-¡¿Qué has dicho?!- pregunté sorprendida
-Ya me has oído- respondió
-¿Y por qué lo dices?- pregunté con curiosidad
-Mientras no estabas investigué un poco lo que te pasaba u bueno pues eso es, son síntomas. Aparte no se si te has fijado pero tu barriga no estaba así cuando te fuiste y pudiste haber engordado pero el resto de tu cuerpo está igual o incluso más delgado que antes y por último le he preguntado a Ron y se ha ido-
-Tienes muy buenos puntos- afirmé
-¿Y bien?- preguntó observándome

Lo que nadie nos contóDonde viven las historias. Descúbrelo ahora