Capítulo 97

15 4 3
                                    

Unos brazos me rodearon y empezaron a moverme de donde me encontraba y yo no tenía idea de lo que pasaba. Todo lo que sucedía a mi alrededor estaba distorsionado y no lo entendía con claridad. Había gritos y en ocasiones pasaron frente a mi chorros de luz de distintos colores pero a mi no me importaba. 
-¡Venga Olivia, muévete!- gritó alguien cerca mío

Poco a poco fui saliendo del trance pero no tuve tiempo de mirar mucho ya que con mucha más fuerza me sacaron de ahí. Dando trompicones por los empujones llegamos al interior del castillo, que se encontraba parcialmente destruido y lleno de escombros, me senté en el suelo y apoyé mi cabeza entre mis manos. Cerré los ojos y suspiré con fuerza, llenando mis pulmones hasta el límite y sacando todo el aire que había almacenado. Miré hacia arriba y vi el rostro de Neville, de cuyo rostro caían pequeñas gotas de sudor, las cuales se mezclaban con la suciedad de su cara y se esparcían por sus mejillas. 
-¿Estás bien?- preguntó 
-Eh si- respondí con voz algo temblorosa -¿Y tú?-
-Sorprendentemente también- dijo esbozando una pequeña sonrisa
-¿Qué pasó?- pregunté refiriéndome a la llegada de Voldemort
-¿A qué te refieres?-
-¿Harry está... ya sabes... muerto?- pregunté para ver si no había sido mi imaginación
-Sí, bueno no- dijo el chico, confundiéndome aún más -Osea al principio lo estaba pero ahora ya no-
-¿Qué carajos?- 
-A ver te explico- dijo Neville -Mientras todos pensamos que él estaba muerto empezamos a pelear hasta que nos dimos cuenta que ya no estaba y de repente apareció frente a Voldemort como si fuera magia-
-¿Y siguen ahí fuera?- pregunté incorporándome
-Sí-

Me levanté de un brinco y corrí hasta la puerta, donde efectivamente estaban Voldemort y Hary peleando. La mayoría de mortífagos que antes estaban ya se habían marchado y solo quedaban unos pocos, supongo los más fieles y pude ver que los Malfoy ya no estaban. Desvié mi mirada de ellos y seguí a mirar a mis compañeros y profesores, que miraban la batalla desde otro extremo, todos juntos esperando a que Harry ganara, obviamente. Miré hacia atrás y vi a Neville, el cual estaba apoyado en una de las columnas que aún se mantenía en pie con una expresión de preocupación, la misma que debía tener yo, supongo.  

Tanto Harry como Voldemort tomaban sus varitas con fuerza, mientras los chorros de luz de sus varitas se mantenían en choque contra la del otro, mientras que todos miraban expectantes y preocupados esperando al fin la derrota de Voldemort. Por mi parte estaba más nerviosa que nunca y no apartaba la vista de ellos bajo ningún concepto. En cualquier pequeño movimiento que Harry hiciera la maldición Avada Kedavra impactaría en su pecho y acabaría con el, mientras que en el caso de Voldemort no lo sabría explicar ya que nunca había visto a alguien morir por un Expelliarmus. Mientras esperábamos Neville me contó como había degollado a Nagini, la serpiente del mago, quedando así destruido el último Horrocrux, por lo que esa sería la oportunidad de Harry para acabar con él de una vez por todas. 

Y de repente, no se en que momento el rayo de la varita de mi hermano salió disparado, impactando así en el cuerpo de Voldemort que con un pequeño ruido comenzó a desintegrarse hasta no quedar más que una nube de polvo que poco a poco se fue disolviendo hasta quedar en nada. Asombrada miré alrededor para ver si no era yo la única esquizofrénica que había visto eso y al ver las caras de asombro del resto entendí que realmente había pasado.

Los pocos mortífagos que quedaban se marcharon en menos de lo que canta un gallo y rápidamente crucé hasta donde se encontraba Harry y me fundí en un abrazo con él. Harry estaba en el suelo sentado, bastante débil por todo el esfuerzo que había tenido que hacer por lo que intenté no apoyarme mucho en él.
-Lo lograste- le susurré al oído -Sabía que podías Harry, no sabes que alegría, lo hiciste muy bien-

Las palabras salían de mi boca atropelladamente y miraba a mi hermano preocupada pero alegre a la vez. Era como una extraña mezcla de emociones resultado de su falsa muerte y del fin de Voldemort, todo había pasado en tan poco tiempo que aún consideraba el hecho de que realmente todo fuera un mal sueño. Sin embargo, antes de poder decirle algo más a Harry este se desmayó en mis brazos, por lo que con ayuda de Hermione, Ron y un centenar de personas más lo llevamos hasta donde estaba la Señora Pomfrey. Lo sé, mucha gente para llevar a un humano normal y aparentemente en buenas condiciones con la enfermera pero supongo que era la emoción del momento o algo parecido. 

Al llegar depositamos con cuidado a Harry sobre una manta en el suelo del Gran Comedor junto con el resto de heridos y esperamos a que la Señora Pomfrey se desocupara y pudiera venir a verlo, porque sí, había un montón de gente que necesitaba cuidados médicos y que estaba en peor condiciones que él.
-¿Está bien?- le pregunto a la enfermera tan pronto como termina de revisar a Harry
-Sí, sólo necesita descansar, mucho esfuerzo en un día- respondió dirigiéndose hacia otro de mis compañeros
-Gracias- añado sentándome a un lado de mi hermano

Yo también estaba cansada después de haber estado tanto tiempo corriendo de un lado a otro sin descanso, por lo que me tumbé a su lado, me puse la capucha de mi sudadera que cubría mis ojos y coloqué mis manos en mi vientre, el cual a pesar de estar cubierto por una sudadera floja se notaba lo suficiente como para saber lo que era. 

Después de estar un rato mirando los hilos de la sudadera y estar pensando en cualquier cosa cerré los ojos y me olvidé de todo. 
-¿Estará viva?- preguntó Ron
-Según yo sí- respondió Harry -Aunque la verdad si parece como si estuviera muerta-
-¿Ves lo que digo? Mira a ver si está viva- añadió Ron
-Estoy viva- mascullé mientras abría los ojos con gran pesar
-Aleluya- dijo Ron -Hemos estado aquí mirándote como por veinte minutos y de lo quieta que estabas pensamos que habías muerto-
-Ja, ja que gracioso- gruñí 
-Alguien despertó de mal humor- se burló Ron
-Cállate porque sino el que va a estar muerto vas a ser tu- espeté de mal humor
-Te recomiendo que te cayes si no quieres terminar desangrado, sabes perfectamente de lo que mi hermana es capaz- sugirió Harry
-¿Cómo estás?- pregunté girándome hacia él
-Mejor, sólo necesitaba descansar, como dijo Pomfrey, demasiado esfuerzo en un día- respondió Harry
-Dios es que fue brutal Harry- exclamé emocionada -La forma en que acabaste con él fue tan... WOW-
-¡Fue épico Harry!- añadió mi amigo -Todos estábamos súper tensos y de repente no sé como terminaste con él-
-La verdad yo tampoco sé como acabé con él- dijo Harry encogiéndose de hombros -Sólo sé que finalmente se ha ido para siempre- 

Lo que nadie nos contóDonde viven las historias. Descúbrelo ahora