Los hermanos Potter

El sombrero selector

Bajamos del tren, viendo una alta cabeza destacar entre la multitud de estudiantes.

-Hagrid!- Gritamos Harry y yo corriendo junto con Ron hacia el. El gigante notó nuestra presencia inmediatamente.

-Laura, Harry, que alegría veros, llegasteis bien a la plataforma?

-Si, perfectamente, la madre de Ron nos ayudó a pasarla- señalé al pelirrojo de detrás mío.

-Hola señor, soy Ron Weasley- se presentó con un poco de miedo debido al gran tamaño del señor que teníamos en frente.

-Oh por favor, no me llames señor, llámame Hagrid. Y claro que te conozco, tus hermanos se pasaron el año pasado entero anunciando que este año entrarías a Hogwarts. No te imaginas cuantas veces he tenido que espantar a los gemelos del bosque prohibido.-Ron sonrió avergonzado- Ahora tendréis que seguirme, os guiaré al castillo.

Hagrid llamó la atención de todos los alumnos de primero, conduciéndonos por un camino de tierra rodeado de grandes y majestuosos arboles. Parecía que tenían una eternidad. Al final del camino, se podía deslumbrar un gran lago, y al fondo de este, el inmenso castillo.

Hagrid nos señaló unos botes ubicados al inicio del lago, indicándonos que subiéramos a ellos. En un bote subimos los tres juntos, y al final a nosotros se unió la misma chica del tren. Los botes comenzaron a moverse solos por el lago, siguiendo todos el mismo camino. La noche estaba preciosa, la luna llena resaltaba y brillaba sobre el agua cristalina del lago.

Sentí la mirada pesada de alguien sobre mi espalda. Me giré y mis ojos conectaron inmediatamente con los de otro chico.

*Chico POV*

Estaba mirando entre los botes, buscando a alguien que valiera la pena como para ser los hermanos Potter, pero mis ojos se desviaron de la búsqueda y mi cerebro se desconcentró de la tarea en cuanto vi a una chica mirar fijamente la luna. No se cuanto tiempo me quedé viendola, pero de repente, se dio la vuelta y nuestros ojos conectaron en un segundo.

Su cabello azabache le llegaba un poco más abajo del pecho. A pesar de la oscura noche, la luz de la luna me permitió descifrar el color azul de sus ojos. Su piel era blanca, casi como la mía me atrevería a decir. Se veía tan hipnotizante que no desconecté nuestra vista hasta que un chico pelirrojo a su lado llamó su atención para señalarle algo a lo lejos, a lo que ella le sonrió abiertamente mientras asentía.

*Laura POV*

Había atrapado a aquel rubio mirándome fijamente. Su rostro y sus facciones eran delicadas. No pude diferenciar bien el color de sus ojos, ya que la luna estaba de lado contrario. Me habría quedado observándolo por más tiempo de no haber sido por Ron, quien todo emocionado me tocó mi hombro para llamar mi atención.

Ron señaló al imponente castillo que se alzaba sobre nosotros.

-¿En que casa prefieres estar Laura?- preguntó Ron emocionado.

-Pues si tendría que elegir, me gustaría Gryffindor, pero Ravenclaw no suena nada mal, además, el azul es mi color preferido- dije esbozando una cálida sonrisa, mientras Ron reía.

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Los barcos se detuvieron y bajamos de ellos. Inmediatamente una bruja de avanzada edad y con un gorro puntiagudo se dirigió hacia nosotros.

-Buenas noches a todos, soy la profesora McGonagall, encargada de la casa de Gryffindor. Acompañadme por favor- dijo, se dio la vuelta y comenzó a caminar. El resto de alumnos comenzamos a seguirla con paso rápido. Mientras avanzábamos por el castillo Ron, Harry y yo mirabamos nuestro alrededor completamente sorprendidos. En ciertas ocasiones me pareció ver como las personas atrapadas en los cuadros nos saludaban alegremente.