Enamorada de cupido

Capítulo 19: El primer "premio" de cupido

Ambos nos quedamos de pie. A una distancia prudente. Yo aún seguía cruzada de brazos cuando él inició con su explicación.

- Ayer... después de salir de tu casa... me sentí algo... extraño.- Explicó con preocupación. Me dio la impresión de que resultaba difícil para él hablar de ello- De eso hablaba con Gregory. Él va a averiguar lo que me sucede, y es que al llegar... Mi parte corporal se había desvanecido. Sucedió solo por unos minutos, pero ya no tenía mi parte humana. Había adquirido de nuevo mi apariencia de guardián. No podía tocarme... era como si estuviera desapareciendo...- Él se tocaba así mismo como para comprobar que aún seguía ahí. Era algo extraño de ver, y más extraño aún era todo lo que estaba diciendo- en realidad me asusté un poco. Había vuelto a mi forma de cupido, involuntariamente. Eso fue algo que no entendí. Yo puedo fácilmente cambiarme a esa forma si quiero. Pero nunca antes me había sucedido de esa manera. Estaba muy preocupado y por eso decidí consultar. Pero... al parecer no es nada grave debido a que él se rió cuando le conté. - Aquí pareció relajarse mucho más, hablaba con mucha más calma- Sin embargo, dijo que iba a averiguar más. Por el momento todo volvió a la normalidad así que supongo que todo está bien.

-Eso... sí que es extraño- expresé asombrada. Me quedé pensando en todo lo que había dicho, aunque obviamente no me estaba explicando todo. Sólo dijo lo que le pareció que podía decir. No tenía claro realmente a lo que se refería, pero imaginarme a Daniel desaparecer era algo que me asustaba bastante. Él dijo que no era grave pero no pude evitar sentir un poco de miedo. Realmente esperaba que él tuviera razón y no fuera nada de gravedad.

-Sí. Es por eso que estaba de mal humor...- Dijo al parecer sintiéndose avergonzado consigo mismo. Me miró apenado- siento lo de mi comportamiento.

-Bueno... ya no estoy enojada.- Dije con mucha más calma. Aunque en realidad había dejado de estar enojada en cuanto me abrazó.

-Me alegro mucho- dijo sonriendo- entonces... ya que estás aquí, podría mostrarte a la siguiente pareja.

-Está bien. - asentí y me senté en su cama. Él sacó su cuaderno y en una de sus páginas me mostró la imagen de una chica morena, con cabello rizado y ojos color café. Al lado de la imagen de la chica estaba la imagen de un chico también moreno, bastante alto y que por alguna razón daba la impresión de ser un jugador de baloncesto.- Bueno...- dije al terminar de observarlos a ambos. Se veían muy bien, juntos- ¿qué información tienes de ellos?- Miré a continuación a Daniel.

-Ninguna. - Negó de inmediato y luego sonrió- aún no he preguntado. Veamos juntos lo que dice- en ese momento sacó también un bolígrafo, lo puso justo encima de la foto de la chica y de este, salió una gota de tinta que cayó directamente en el centro de la foto.

Justo en ese momento escuché una voz proveniente del cuaderno. Una voz masculina bastante sofisticada.

"Estudiante de la preparatoria para mujeres KHT. 17 años. En el pasado, tuvo una mala experiencia amorosa, por lo que es difícil para ella volverse a enamorar. Sin embargo al parecer actualmente se siente atraída por el chico de la foto de al lado. Es todo."

Todo eso parecía muy interesante, lo ocurrido con la tinta era totalmente un suceso y esa voz tan sofisticada pero tristemente explicita, me dejaba impresionada totalmente. Todo lo relacionado con los cupidos llamaba mi total atención.

-Es decir...- comencé a hablar, pero Daniel pareció leer mi mente y asintió.

-Sí. Al parecer ya antes se había enamorado y ahora al parecer está dispuesta a hacerlo de nuevo. Es justo lo que te dije que debe pasar con Vanessa. Sólo que al parecer el corazón de esta chica ya sanó.- Explicó rápidamente y entendí que en el pasado ella había aparecido en el cuaderno de otro cupido, pero como no estaba destinada a estar con aquel chico, ahora aparecía en el cuaderno de Daniel.