Enamorada de cupido

Capítulo 25: ¿Amor platónico?

Esa mañana me dirigí a mi escuela, iba junto con Daniel que había pasado a mi casa para acompañarme, supuse que aún le preocupaba un poco lo de mi pie. Pero yo ya estaba bien, mi pie había sanado por completo.

-¡Emily!- gritó Melissa cuando me vio llegar al salón- que bueno que regresas. Te hemos extrañando mucho.

-¿En serio?- pregunté sonriendo.

-Sí- respondió ella sonriendo también- Sobre todo Daniel. No hacía nada más que hablar de ti.

-¿Qué? - dije mirándolo a él. En ese momento parecía levemente sonrojado ante aquello. Así que era verdad. Él me había extrañado. Eso me hacía bastante feliz. Aunque no podía dejar de causarme gracia que me extrañara a pesar de que todos los días había ido a verme.

-No lo hice- respondió él entre enojado y avergonzado.

-Claro que sí.- respondió Melissa quien parecía divertida ante la expresión de Daniel. - Por cierto, Emy... - se giró para mirarme- ¿tu pie está totalmente bien?

-Sí - respondí demostrando mi vitalidad. Ella se preocupaba demasiado por mí, aunque obviamente si a ella le sucediera algo parecido, yo me preocuparía también. Por eso la entendía. De verdad era una de las mejores amigas que podía existir.- no hay de qué preocuparse.

-Qué alivio- respondió ella más alegre aún- Me alegra mucho que no haya sido grave.

-Sí- respondí y me senté. Minutos después llegó el profesor y se dispuso a dar la clase. Mientras resolvía el ejercicio, recordaba que ya estaba en la escuela y por lo tanto tenía que hacer lo posible por encontrar a Licy y hablar con ella.
Había estado pensando en todo ese asunto, y no dejaba de parecerme extraño pero cosas como esa suelen suceder si tienes a tu lado a un cupido. Lo que de por sí ya era extraño.
...

-¡Emily!- escuché que me llamaron cuando me dirigía a la biblioteca para ver si tenía la fortuna de encontrarme con Licy.- Supe lo de tu accidente- dijo Patrick mirándome preocupado- ¿ya estás mejor?- No podía evitar sentirme a algo incomoda, pero a su vez me sentía muy aliviada ya que al parecer él sí podía hablarme con normalidad.

-Sí- respondí teniendo el impulso de sonreír para demostrarle que así era, pero aún no había olvidado aquellas palabras que habían hecho mi corazón doler.- afortunadamente no resultó ser grave.

-Me alegro... - contestó él un poco más relajado- y... ¿a dónde vas?

-Oh... a la biblioteca...- Respondí pensando en que deseaba de verdad encontrar a Licy allí - estoy buscando a alguien.

-¿A quién?- preguntó Patrick y yo vi una oportunidad aquí. Patrick conocía a muchas personas en la escuela. Quizás había visto a Licy alguna vez y podía ayudarme a dar con ella.

-Licy- respondí pero ante la mirada confundida de él, decidí dar más detalles- es una chica de cabello corto y muy negro... usa lentes... y...

-Ah... Te refieres a Elizabeth.- respondió él bastante seguro.

-¿Elizabeth?- Pregunté algo confusa. Nunca antes había escuchado de una tal Elizabeth, ese nombre resultaba desconocido para mí.

-Sí... Elizabeth Olmes. Esa chica está en el mismo salón que yo. No sabía que le dijeran Licy- dijo Patrick y recordé que cuando le pregunté su nombre ella simplemente dijo "Licy" al parecer prefería que la llamaran de esa manera. Estaba la posibilidad de que no se tratara de la misma persona, pero no podía dejar pasar esa oportunidad. Además ¿cuántas chicas con esa misma descripción podía haber en la escuela? Yo solo la había visto a ella.