Avengers OneShots II

Necesito tu amor (Pietro Maximoff)

Prólogo: Pietro no se siente bien y necesita que lo ames.

AshlyVelazquez8
Advertencia: Un Pietro algo triste.
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Estabas en tu escritorio en la habitación que compartías con tu novio Pietro en la Torre mientras terminabas de hacer el papeleo de la última misión a la que habías asistido.

Ibas algo atrasada y Steve te lo había pedido la semana pasada, por lo que estabas completamente enfocada en terminar eso para hoy y entregárselo para que dejara de molestarte cada cinco minutos.

La puerta de la habitación se abrió, y Pietro entró por ella, caminando directamente hacia ti, no sin antes haberla cerrado.

–Hey... ¿todo bien?–Le saludaste con una sonrisa.

El velocista solo besó tus labios con suavidad, y te movió un poco hacia atrás en la silla para pasar una pierna alrededor tuyo para sentarse en tu regazo y esconder su rostro en tú cuello, abrazándote y quedándose ahí.

–Pietro, tengo que terminar el papeleo.–Te reíste ligeramente ante su comportamiento.

–Quiero tu atención. Necesito tu amor. Necesito que me ames.–Susurró con la boca pegada a tu cuello, sin moverse de su posición.

Le diste un pequeño beso en la cabeza y volviste a acercarte al escritorio con él aún encima de ti para poder terminar tu trabajo.

–Entonces quédate ahí, pero aún debo terminar esto. Cuando lo haga y se lo envíe a Steve, vas a tener todo mi amor y atención para ti. ¿Te parece?–Le dijiste acariciando su cabeza con suavidad.

Pietro solo asintió, y dejó pequeños besos en tú cuello, acariciando tus lados con sus manos.

Desde su accidente con Ultron que casi lo mata al salvar a Clint y a aquel niño, Pietro comenzó a sufrir pequeños episodios en los que tenía caídas de ánimo a veces algo extremas, en las cuales necesitaba más atención y amor de parte tuya, o Wanda si tu no estabas. Más que nada necesitaba que alguien lo abrazara y le asegurara de que todo estaba bien. Que era amado y de que no estaba solo. A veces aún tenía pesadillas, por lo que tú simplemente te quedabas con él para asegurarte de que estuviera bien. Lo cual no te molestaba en lo absoluto.

–¿Printsessa?–Susurró volteando un poco la cabeza aún en tu hombro para que pudieras oírle bien.

–¿Mhm...?–Respondiste sin despegar los ojos de la pantalla.

–¿Tú me abandonarías?

–Claro que no, bebé... ¿por qué piensas eso?–Le preguntaste realmente confundida. Sabías que Pietro se ponía sensible en episodios como estos, pero el que dudara de tu amor hacia él nunca había sido parte de ellos.

Pietro solo hizo un pequeño gesto con los hombros, sin moverse de donde estabas, mientras jugaba con el borde de tu playera.

Dejaste lo que estabas haciendo, y llevaste tus manos para acariciar su cabello y espalda, dejando besos donde pudieras alcanzar.

–Yo JAMÁS te abandonaría, ¿oíste? Nunca. Yo te amo, Pietro Maximoff. Más que a nada en el mundo. Eres lo único que tengo. Tu eres mi familia. Así que jamás pienses que voy a abandonarte, ni mucho menos que no te amo, porque no es así. Te amo, con toda mi alma y corazón.–Le dijiste tomando su rostro con ambas manos para verlo a los ojos, ofreciéndole una pequeña sonrisa mientras limpiabas las lágrimas que había derramado.–Te amo. Nunca lo olvides.

–Lo siento, printsessa... no quería agobiarte con—Le interrumpiste dejándole un rápido pero dulce beso en los labios.

–No tienes porqué disculparte, y no pienses que me molestas con tus cosas. Me gusta poder ser de ayuda para ti. Jamás te voy a dejar, y siempre que me necesites, voy a estar aquí. ¿Entendido?–Le hablaste con la sonrisa intacta, tocando su nariz con tu dedo, haciendo que una sonrisa también se formara en su rostro.–Eso es. Ahí está la sonrisa que tanto me gusta.–

Pietro puso ambas manos en tu rostro y se acercó para besarte con suavidad, introduciendo su lengua en tú boca haciéndote reír en el beso, mientras pasaba su mano izquierda bajo tu playera para tomar tú pecho en ella y hacerte gemir ligeramente en su boca.

Justo cuando el beso se estaba haciendo más intenso, escucharon que alguien llamaba del otro lado de la puerta.

–¡T/N! ¡Necesito ese informe AHORA YA!–Oíste a Steve.

Te separaste de los labios de Pietro soltando un gruñido molesta y rodando los ojos, lo cual provocó que el velocista ríera.

–¡YA TE DIJE QUE TE LO IBA A ENVIAR STEVEN GRANT ROGERS!

–¡BUENO PUES APRESÚRATE!–Dicho eso, se fue a molestar probablemente a Sam ya que él había ido contigo y tampoco había terminado.

–Mejor termina tu papeleo y después seguimos.–Pietro se levantó y te dejó otro rápido beso en los labios, dejando sus rostros a centímetros del otro mientras hablaba.–Gracias, printsessa. Te amo.

–Yo también te amo.–Susurraste de vuelta, con tus manos en sus mejillas para volver a besarlo.

–Voy a ir a prepararte un té con algo de comer.

–Eso sólo me hace amarte aún más.–Le dijiste con una pequeña sonrisa, pasando tu mano por su cabello.

–Por eso lo hago.–Rió ligeramente, para después volver a besarte.