Prólogo: Después de que la persona con la que ibas a tener tu cita no llegara, te vas a casa de Shang donde terminan confesandose algunas cosas.
prttyswift
○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●Shang estaba sentado en el suelo frente a la pequeña televisión de su pequeño departamento, apoyando la espalda en el sillón con una caja de pizza y una cerveza en la mesita de café.
Justo cuando iba a dar el primer mordisco, te pudo sentir tocando la puerta.
Después de años de entrenamiento con su padre, Shang aprendió muchísimas cosas, entre ellas, diferenciar el comportamiento de las personas con simples acciones como tocar una puerta.
Él sabía que algo andaba mal.
Tenías una cita aquella noche, así que a menos que hubiese pasado algo, no estarías ahí.
Se levantó y abrió la puerta, y lo primero que hiciste fue abrazarlo, dejando tu rostro en su pecho.
–Asumo que las cosas no salieron bien...–Te dijo con suavidad, cerrando la puerta y acariciando tú espalda.
–Ni si quiera llegó. Estuve esperando como una idiota ahí sentada por media hora. Le escribí, lo llamé, y nada.–Lo abrazaste con aún más fuerza, sin querer soltarte.
Shang soltó un pequeño suspiro molesto y te abrazó de vuelta.
Ambos se conocían de niños. Eras hija de uno de los hombres más cercanos a su padre, solo que escapaste dos años antes que él. Y además eras mayor que Shang por tres años.
Se reencontraron cuando él también escapó de su padre. Le ayudaste y desde entonces permanecieron juntos, hasta que conocieron a Katy.
–Ven. Acabo de ordenar pizza y tengo un par de cervezas que tienen tu nombre.–Tomó tu rostro en ambas manos y te ofreció una sonrisa, lo cual te hizo sonreír con ligereza.
Te quitaste los zapatos y chaqueta junto con tu bolsa, dejándola en el sillón, y te sentaste junto al espacio donde él estaba antes.
Te entregó una botella de cerveza y un trozo de pizza, y luego se sentó donde estaba anteriormente.
–Bueno... ¿quieres hablar del tema o... prefieres ver una película?–Te preguntó tomando un sorbo de su cerveza, al igual que tú.
–Es que la verdad no hay mucho de que hablar... fui al restaurante donde acordamos encontrarnos, esperé sentada ahí por media hora soportando las miradas de la gente, y luego me fui del lugar y vine hasta acá.–Le dijiste con una pequeña sonrisa, intentando ocultar tus ganas de llorar.
–Sabes que no es necesario que ocultes tus emociones conmigo, puedes llorar si quieres. No le voy a decir a nadie.–Se acercó un poco a ti, mientras te hablaba con dulzura.
–Nunca en la vida me vas a ver llorar, Xu Shang-Chi.–Soltaste una pequeña risa, bebiendo de tu botella de cerveza.
–Eres una mujer maravillosa, T/N. Cualquier persona que tenga el privilegio de tener tu corazón y tu atención será muy afortunado o afortunada. Mereces a alguien que te valore, y si ese idiota no fue capaz de ver eso, entonces él se lo pierde.–Tomó tu mano en la suya y las entrelazó con cuidado.
Te acercaste a él y dejaste tu cabeza en su hombro, cerrando los ojos.
–¿De verdad lo crees?
–Por supuesto que si, T/N... eres maravillosa, eres extraordinaria... y cualquiera que alguna vez pueda llegar a entrar en tu corazón y quedarse ahí, de verdad que va a ser la persona con más suerte del mundo...–Pasó su brazo alrededor tuyo y te acercó a él.
–¿Qué pasa si esa persona nunca llega?–Le preguntaste en voz baja, abriendo los ojos y observando a la nada en frente de ti.
Shang dudó unos segundos en si responder con lo que tenía en mente o no.
Ambos se conocían desde niños, y no podía imaginarse una vida sin ti. Y lo que tenía en mente para decir, arriesgaba a perder todo eso.
–¿Qué pasa si esa persona está justo frente a ti y no te has dado cuenta?–Te preguntó de vuelta, sintiendo como su corazón latía a una gran velocidad.
–¿A qué te refieres?–Frunciste el ceño y te sentaste derecha, viéndolo a los ojos.
–Quiero decir... muchas veces no nos damos cuenta que lo que siempre hemos estado buscando, está justo frente a nuestras narices...–Pasó un mechón de cabello tras tu oreja, observándote como si fueras la piedra más preciosa y única que pueda existir en el universo.–Yo ya no puedo ser solo tu amigo, T/N... no puedo porque te veo como algo más...
–¿Desde hace cuanto que sientes esto?–Le preguntaste sin dejar de verlo a los ojos.
–Desde siempre... nos conocemos desde que somos niños, y créeme que no puedo imaginarme una vida en la que tú no estés presente.
Sé que con lo que te estoy diciendo acabo de arriesgarlo todo. Pero ya no podía seguir guardándomelo por más tiempo. Yo sé que puedo hacerte feliz, tal vez no puedo darte una vida llena de lujos, pero estoy seguro de que seríamos muy felices juntos...–Volteó su cuerpo hacia ti y tomó tus manos en la suya izquierda, para con la derecha acariciar tu rostro.
–Yo también creo que podríamos ser muy felices juntos...–Le dijiste con una gran sonrisa, haciendo que una tambien se formara en su rostro. Poniendo tu mano izquierda sobre la suya que estaba en tu cara.
Poco a poco se fueron acercando, hasta que sus narices rozaban, sin borrar aquellas sonrisas.
Se inclinaron hasta que sus labios se tocaron, y quedaron envueltos en un beso tierno, pero a la vez apasionado y liberador. Algo que siempre quisieron, y nunca se atrevieron a hacer.
Una vez se separaron, se quedaron viendo por unos segundos sin dejar de sonreír.
Shang te abrazó y acercó aún más a él, dejando un beso en tu cabeza mientras pasaba tus piernas por su regazo y te pegaba aún más a él.
–¿Podríamos tal vez considerar esto como nuestra primera cita?–Le preguntaste apartándote un poco para verle a los ojos.
–Me encantaría.–Sonrió otra vez, y te besó con suavidad, acariciando tú rostro con su mano. Para después volver a abrazarte y quedarse ahí, sin querer dejar ir al otro.
ESTÁS LEYENDO
Avengers OneShots II
FanfictionSegundo libro de oneshots de los Avengers. Contiene: -Oneshots -Imaginas -"ABC's of sex with..." -"Alphabet headcanon random with..." -...es el/la tipo de... -(***) en el título significa smut *Éste libro contiene material sexual explícito, temas se...