Todavía es un accidente (Tony Stark)

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Prólogo: Tony y tu asisten a un evento. Pero cuando tus inseguridades comienzan a hacer su gran entrada, Tony las ahuyenta con sus coqueteos.

Les aviso que las peticiones están abiertas, así que ya saben qué hacer 😊❤️🤙🏻
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Tony y tu estaban en un evento como siempre. La familia Stark siempre era invitada, y ustedes dos eran prácticamente los únicos Starks que habían. Además de que su hija aún era muy pequeña para asistir a éste tipo de reuniones, sobre todo porque solamente tenía seis meses.

Ambos estaban en una mesa por ahí en una esquina, ambos de pie (típicas meses de bar donde son para estar parado, espero entiendan a qué me refiero), bebiendo sus tragos, o al menos él ya que tu aún no podías beber alcohol, así que estabas tomando un jugo, y simplemente mirando alrededor.

Tony te estaba hablando, pero realmente no podías escucharle al estar tan distraído viendo a las demás mujeres del lugar con sus figuras increíbles y bellos cuerpos. Desde que su hija había nacido, no podías dejar de pensar en que tu cuerpo se veía extraño, y no te gustaba mucho la idea de tener que usar ropas ajustadas, como la de ahora.

–¿Bonita? ¿Me estás escuchando?–Pasó su mano por tú rostro, haciendo que te voltearas en su dirección.

–Sí, lo siento. Solo me distraje por un momento.–Le dijiste con una pequeña sonrisa, tomando un sorbo de tu bebida.

–T/N Stark. Te conozco. ¿Qué es lo que ocurre? Sabes que puedes confiar en mi.–Se acercó a tu lado y puso ambas manos en tus brazos.

–Nada, es solo que... no sé, solo siento que me veo extraña usando ésta ropa, es todo.

–¿Extraña en qué sentido? Porque para mí, te ves apetitosa. Con respeto, obviamente. O tal vez no...–Te habló con una sonrisa coqueta, viéndote de arriba abajo para después mirarte a los ojos.

–Sí, pero ellas se ven aún mejor.–Volviste a voltear la vista hacia el otro lado donde estaban todas esas mujeres a las que te referías, algunas bailando, otras charlando o simplemente ahí.

Tony volteó la vista hacia donde tu estabas viendo, y comprendió de inmediato qué es lo que pasaba por tu cabeza en esos momentos.

–Bonita... tu cuerpo es maravilloso, y me encanta. Te ves espectacular con tu ropa ahora mismo, y siempre.–Puso su mano en tú barbilla y te hizo voltear para verlo a él, ofreciéndote una sonrisa.–Tú cuerpo es maravilloso. Es gracias a él que pudimos tener una increíble y perfecta hija. Y créeme que lo amo cómo no tienes idea.–Se acercó y dejó un beso en tus labios, haciéndote sonreír.

–Eres todo un coqueto, Tony Stark.–Pusiste ambas manos en sus mejillas para acariciarlas.

–Solo con usted, Señora Stark.–Tomó tu mano y besó la parte de atrás de ella, sin romper el contacto visual.–Ahora, ¿me concedería éste baile?

–Por supuesto.–Reíste ligeramente, mientras te guiaba hasta la pista de baile donde habían otras personas más.

Llevaste ambas manos y las pusiste alrededor de su cuello, mientras él dejaba sus manos en tú trasero descaradamente, ambos viéndose con sonrisas en sus rostros.

–¿Acaso tienes tus manos en mi trasero mientras bailamos en frente de todos?–Le preguntaste sin borrar la sonrisa de tu rostro.

–Lo siento, bonita. Fue un accidente.–Dejó un beso en tu frente, y siguió bailando contigo.

–Tony...

–¿Mhm?–Se inclinó un poco hacia atrás para verte a los ojos.

–Tus manos siguen en mi trasero.

–Pues todavía es un accidente.–Volvió a acercarse y pegar su mejilla con la tuya, sin dejar de sonreír.

–Hay mucha gente alrededor, Tony. No puedes—

–Claro que puedo. Eres mi esposa. Y tengo el derecho de mostrarles a todos que estamos juntos.–Te dijo al oído, dejándote un beso en la zona.–Ahora solo disfruta de nuestra noche sin cambiar pañales, ni escuchar llantos, ni nada de eso.

Avengers OneShots IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora