Feliz Navidad, reina mía (Loki Laufeyson)

2.7K 180 3
                                    

Prólogo: Tuviste un accidente durante una misión por lo que no vas a poder celebrar la navidad como te gustaría, pero Loki se encarga de que todo salga bien, a pesar de que no le guste esa festividad.

Alexaaajcs
Advertencia: Aquí tienes una hija de más o menos ocho o nueve meses.

Antes de empezar, quiero decir que ni yo sabía que podía ser tan cursi hasta que escribí la parte final. Estoy realmente sorprendida 😳
○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○●○

Loki no era la persona más festiva y alegre que pueda existir, de hecho, llegar a hacer irónico que se haya casado contigo siendo que las fiestas para ti eran de suma importancia y te emocionaba muchísimo, en especial la navidad. Pero él te amaba así.

Al principio de la relación suponía un poco de problemas y choques entre ustedes, pero pronto Loki dejó de quejarse tanto porque en realidad su amor por ti era mucho más grande que su disgusto por las celebraciones midgardianas.

Y pues cuando se fue a vivir oficialmente contigo a tu departamento, ya simplemente no prestaba tanta atención a que para Navidad, decorabas toda la casa, o para otras festividades. Puede, o no puede ser que muy en el fondo le gustara. Solo un poco.

Y además, ésta sería la primera Navidad que su hija pasaría con ustedes, lo cual los emocionaba a Thor y a ti muchísimo.

Aunque ese año sería muy distinto.

Generalmente tu decorabas los primeros días de Diciembre para Navidad, sin embargo fuiste enviada a una misión junto con Steve y Wanda por esa fecha que duró casi dos semanas enteras.

Loki estaba hecho una bola de nervios, tenía miedo de que algo te hubiese pasado y él no pudiera hacer nada al respecto.

No había podido contactarse contigo desde que te habías ido, y Steve y Wanda tampoco habían hecho contacto con Fury ni nadie.

Finalmente decidieron realizar una misión de rescate, y les tomó horas poder encontrarlos en la base de Hydra que se derrumbó encima de ustedes, ni si quiera Wanda lo pudo detener.

Estuviste en cirugía por horas hasta que saliste, y Loki no dejó tu lado en ningún momento, mientras Frigga que había ido a Midgard para celebrar con ustedes cuidaba de su hija Esmeralda en su hogar con Thor.

Cuando te dieron el alta del hospital, Loki te llevó a casa y Frigga decidió quedarse por un tiempo para ayudarles en todo lo que pudieran mientras tú debías hacer reposo en cama.

Tus ánimos estaban por el suelo, y a Loki le partía el alma verte así. Por lo que se decidió él mismo decorar y arreglar todo para Navidad y así tal vez animarte un poco.

~~~~~

Frigga y Thor no estaban aquel día en casa ya que habían llevado a Esmeralda a Central Park a ver actividades de Navidad que se estaban realizando aquel día, obviamente con la compañía de Jane para que no se perdieran.

Eso le dio a Loki tiempo y privacidad para hacer lo que tenía en mente mientras tú dormías.

Cuando ya terminó todo, fue a la habitación y se recostó detrás tuyo, dejando tu espalda pegada a su pecho mientras besaba tu hombro y te abrazaba con delicadeza.

–Mi reina... despierta...–Susurró con una pequeña sonrisa.

Soltaste un pequeño gruñido, tomando su mano que estaba en tu abdomen mientras te dabas vuelta para recostarte en tu espalda con dificultad.

–Buenos días...–Murmuraste aún con los ojos cerrados.

–Hay algo que quiero enseñarte.–Te susurró dejando un beso en tu frente.

–¿Tan temprano?–Le preguntaste abriendo un poco los ojos.

–Querida son casi las tres de la tarde. Mi hermano llevó a mi madre y Esmeralda a Central Park para ver las actividades de Navidad junto con Jane. Se fueron hace dos horas.–Rió ligeramente quitando el cabello en tu rostro.

–Oh...

–Pero está bien, tranquila. La doctora Cho dijo que debías descansar lo más que pudieras.–Dijo con voz suave, posando su mano en tú pecho para con su magia aliviar el dolor que sabía estabas sintiendo en esos momentos.

Loki tal vez no podía hacer mucho, pero conocía un par de hechizos para ayudarte, y uno de ellos era para aliviar el dolor, el cual usaba por las mañanas para que te levantaras bien, y en las noches para que pudieras dormir tranquila.

–Gracias... ojalá pudiera hacer más por ti. Ni si quiera pude comprar más regalos o decorar la casa... es la primera Navidad de Esmeralda y ya lo arruiné.–Te quejaste pasando ambas manos por tú rostro.

Loki soltó un suspiro con una sonrisa, y se levantó de la cama para darse la vuelta hacia tu lado de ésta.

–Ven, déjame ayudarte.–Te dijo mientras te ayudaba a sentarte en la cama.

Te puso un cardigan verde oscuro suyo y luego unos zapatos, para después tomarte en sus brazos e ir contigo a la sala de estar, tu con los ojos cerrados.

Te sentó en medio del sillón para que estuvieras cómoda, y puso una manta en tus piernas.

–¿Puedo abrir los ojos?–Le preguntaste mientras le escuchabas dar vueltas en la habitación.

–Solo un momento... y... ya, ábrelos.–Te dijo con una gran sonrisa, parándose frente a la chimenea que quedaba frente tuyo.

Al abrir los ojos, quedaste completamente atónita.

El árbol de navidad estaba en una esquina, adornado y con bastantes regalos bajo éste y las luces encendidas. Toda la sala de estar tenía decoraciones, sobre la chimenea estaban las botas de navidad colgadas con sus nombres, y en la mesita de café había un plato con galletas y una taza de chocolate caliente.

–Las galletas las preparé con tu receta, pero debo admitir que mi madre ayudó un poco. No sabes lo difícil que fue hacer que Thor no se las comiera, aunque estoy seguro de que robó algunas.–Te explicó algo nervioso, jugando con sus manos. Al levantar la vista te vio con los ojos llorosos y viendo alrededor.–¿M-mi reina? ¿Está todo bien? ¿A-acaso no te gusta?

–Loki esto es hermoso...–Le dijiste con una sonrisa, tapando tu boca mientras llorabas de felicidad.–¿Hiciste todo esto tu solo?

–B-bueno... tal vez usé un poco de magia para desenredar esas infernales luces...–Admitió algo avergonzado, caminado hacia ti para sentarse a tu lado y tomar tus manos en las suyas.–¿Pero de verdad te gusta?

–¡Me encanta, Loki! Todo se ve muy hermoso... jamás creí que podrías hacer algo así.–Reíste ligeramente, secando las lágrimas de tus mejillas.

–No podía dejarte pasar un mal día en tu festividad favorita. Además, es la primera Navidad de Esmeralda, y Thor y mi madre también están muy emocionados por ello.–Te dijo con una sonrisa, sin dejar de verte.

–Ojalá pudiese haber comprado regalos para ti y los demás.–Llevaste tu mano para acariciar su rostro.

–No hay necesidad, reina mía. Lo único que necesito, es a ti y a nuestra hija. Nuestra familia, eso incluye a Thor y mi madre, pero no se lo vayas a decir.–Rió ligeramente al igual que tú, limpiando tus lágrimas.

–Eres el mejor, Loki Laufeyson. Y te amo más que a nada en el universo.–Acariciaste su mejilla, viéndole con una sonrisa.

–Yo también te amo. Feliz navidad, reina mía.–Te dijo con una sonrisa, haciendo aparecer en su cabeza una diadema con un muérdago colgando de ella.

Al notarlo, tu solo reíste ligeramente al igual que él, y te acercaste para besar sus labios mientras Loki dejaba una mano en tú mejilla y la otra en tú cintura.

Avengers OneShots IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora