amor

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Liam está molesto.

Muy molesto.

El día de hoy es 24 de Diciembre, día que odia con toda su alma podrida.

Despertó solo.

Totalmente solo.

Su niño moreno había desaparecido, entro en pánico dispuesto a matar a el responsable hasta que encontró una pequeña nota.

"Buenos días amor. Estoy en la cocina, Louis necesita ayuda para todas las personas que llegarán hoy, la comida no será tan fea.

Pd: te quiere mucho. Tu princesa."

Liam había enloquecido, no quería que su protegido trabajará como esclavo para gente mugrienta, así que fue a la cocina.... Pero ahí no estaba, pregunto a Louis y a Niall, pero estos negaron verlo.

Por esa razón está tan molesto, por qué su cabeza solo piensa "se fue a follar con alguien más" "te mintió" sabe que solo es un mal juego de su mente, pero no puede con la idea de un sucio cerdo tocar ese delicioso cuerpo caneloso.

Así que comenzó a buscar a su protegido, sin tener éxito, entro en crisis queriendo matar a todos. Pero entonces la hora de visita llegó y con ello, familiares, los reos peligrosos como el deberían estar encerrados en su celda, sin embargo el no lo estaba.

Molesto y decidido a matar a quien se interponga en su camino, llegó a el único lugar donde puede estar tranquilo, lejos de todas esas familias felices, como si el término "familia" sea lo más preciado del mundo.

Abrió las puertas del gimnasio, dispuesto a sumergirse en su soledad, y romper ese tonto saco de boxeo por la rabia que comenzaba a crecer en su pecho.....

— ¡Feliz Navidad!—

Zain estaba ahí, adorable como siempre, luciendo limpio aún estando en esa asquerosa prisión, con sus mejillas coloradas y ese desgastado overol color naranja, quizó ir por el, pero entonces sus ojos se desviaron a la pequeña mesa de madera a un lado del reo.

Un plato con galletas, ¿Desde cuándo no come galletas? Observo dos vasos de leche y... ¿Dulces? Zain había conseguido dulces, observo dos mantas bien dobladas junto a tres almohadas.

— Yo... Prepare esto para ti, quiero pasar el día entero contigo —

Entonces Liam se acerco manteniendo su rostro de poker, Zain sintió miedo al no mirar ninguna emoción.

— No te gusta... Oh dios, lo siento mucho. Se que este es tu lugar y yo vine a molestar— exclamó con rapidez, antes de comenzar a tomar sus cosas, pero Liam se apresuró a detenerlo.

— ey no, no te vayas—

Zain lo miro unos segundos antes de volver a dejar todo en su lugar, seguido de tomar las manos de Liam.

— Las galletas no son muy buenas, los ingredientes fueron de los chicos del segundo piso y la leche... Es de polvo encontré dos sobres en la alacena de la cocina... No le digas a louis—  soltó una leve risa antes de ser abrazado con fuerza.

Parpadeo perplejo antes de corresponder el abrazo, su pecho se hincho emocionado, Liam lo abraza, con sus brazos musculosos y su pecho protector. Pareciese que exagera solo por recibir un abrazo pero es Liam, ese amargado reo que solo ordena y rompe huesos, recibir una muestra de cariño por su parte, es casi imposible.

— No digas nada—

Liam se separó solo para sentarse en una camilla de concreto, justo donde hacen abdominales, Zain sonriendo totalmente enamorado, le entrego su vaso de leche, antes de tomar el suyo propio, las galletas y sentarse sobre el regazo de Liam, como si de Santa Claus se tratase.

— Papá Noel no viene aquí por qué hay chicos malos—

Murmuro Zain con un leve puchero antes de dar un trago a su leche.

— Ese gordo pone un pie aquí y sale desnudo y con el culo abierto —

En otra situación Zain se hubiera reído. Pero ahora no lo hizo, por qué sabe que es verdad y que el lugar donde a pasado los últimos meses, es el infierno puro, debió a lo que a visto.

— Liam, tu haces que este infierno sea el cielo—

El mensionado soltó una risa a lo dicho por su protegido.

— oye princesa la prisión te está pudriendo el cerebro —

— Liam solo quería ser romántico — gruño dando un mordisco a su galleta en forma de árbol navideño.

— Ya vas a empezar con tu mierda cursi—

— vamos amor, se que te gusta—

Zain siguió comiendo su galleta sin notar lo que dijo, miro a liam con el ceño fruncido, cuando esté parecía perdido mirando su rostro sin ninguna emoción.

— ¿Cómo me llamaste?—

— Amor, así te lla..... ¡Oh cielos! Lo lamento tanto, se que no te gustan los apodos, lo lamento Liam— hablo con rapidez intentando no sonar nervioso, fallando en el intento.

— Dilo de nuevo—

— No—

Entonces Liam tomo su rostro con una de sus manos, el dedo pulgar e índice, tomando esa suave barbilla, para después hacer contacto visual.

— Dilo—

— amor... Eres mi amor—

Liam lo observo un momento más, metiendo la punta de su dedo pulgar en esa boquita, la uña tocando los dientes pequeños.

— Ahora di que te gusta decirme "Amor"—

— Te gusta que te diga amor—

Cambiando las palabras, Zain tomo la mano que lo sujetaba, llevándola a su propia mejilla.

— Eres mi amor Liam y no me importa si te molesta—

El reo sólo lo miro querido atacar sus labios.

— Besame, se que quieres hacerlo—

Entonces sus labios se juntaron. Cómo todos los besos que Liam le da, este era apasionado y salvaje, aún que Zain podía sentir el cariño en ese paladar. No duró mucho debido a que Zain se separó, tenia una gran sorpresa para Liam.

— ahora quiero que gimas esa palabra— Exclamó Liam, llevando una mano a los muslos de Zain. El cual solo soltó una leve risa por lo dicho.

— Amor... Te tengo una sorpresa mas—

Liam aún no se acostumbra a esa palabra, sin embargo quería escucharla todo el tiempo.

— vale, dime con que mierda me vas a salir—

Zain si inclino solo un poco, juntando sus rostros pero sin llegar a el beso.

— Termine de escribir la canción —

PROTEGIDO ( Ziam)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora