Corona

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Liam miraba a su alrededor, cauteloso.

Era un experto.

Miro a el hombre sobre el escritorio, tres guardias y una pequeña niña mirando la televisión, suspiro tan lento que podía escuchar su propio corazón latir.

Styles es un hijo de puta, esos hombres tienen armas y el... Solo una puta navaja.

Sin embargo no retrocedió. Entro por la ventana, debe ser silencioso, poder asesinar a el hombre y a sus guardias. Así que con un trapo cubriendo su nariz boca y la nabaja filosa en su mano derecha, se acerco a la espalda del anciano.

En un movimiento rápido deslizó la navaja en aquella flácida piel. Fue tan rápido que el hombre no grito, tomo la cabeza desde los cabellos para que no cayera sobre el escritorio y causará un sonido.

Dejando a el hombre atrás, camino a los guardias, solo para observar las armas de cerca.

Sin soltar algún ruido, hizo exactamente lo mismo que con anciano, tapando la boca con su mano para no dejar salir ningún grito, se deciso del guardia y antes de que el otro pudiera mirarlo, lo asesino de igual forma, dejando caer el cuerpo que sostenía, obtenido la mirada de la pequeña.

Por suerte dejo caer los dos cuerpos y la niña no miro a dos hombres con la garganta abierta y demasíada sangre.

— ¿Uhm? ¿Quien eges?—

Liam no sabe que decir, acaba de matar a tres hombres y no puede contestar la pregunta de esa niña de cabello rubio.

Cabello rubio....

Sobre este, miro una corona de plástico, la cual llamo su atención.

— ¿Eres una princesa?—

La niña asintio emocionada, sonriendo orgullosa, Liam también miro su vestido.

— uhm.. yo tengo una princesa —

Mencionó caminando a el sofá donde la niña se encontraba, está parecía olvidar la primera pregunta que hizo.

— y ¿como es?—

Sonrió tras el trapo en su rostro recordando a su protegido.

— Pequeña, sonríe demasíado y es... Muy hermosa, berrinchuda pero...—

— Así la amas... ¡Eges su píncipe azul!— grito con emoción.

Liam frunció el ceño, sin embargo no lo negó.

— No se que mier... No sé que hace un príncipe azul— corrigió su mala palabra, el nunca a Sido bueno con los niños, sin embargo esa niña parecía agradarle.

— un píncipe azul.. cuida de su pincesa, la potege, la ama y le da besos del vedadeo amog— suspiro tan emocionada antes de tomar su mochila rosada, sacando de ella un pequeño cuaderno llamativo.

— Toma, puedes quedatelo. Es mi libo favoito, peo tu eges un píncipe azul—

Liam recibió el libro, observando la portada de una princesa con corona y vestido. Es un libro de cuentos.

— Mi princesa no tiene corona...—

Miro entonces a la pequeña quien sonrió tan feliz que Liam se sentía extraño.

Se había encargado de sacar a la pequeña de esa oficina, con mucho cuidado, para que está no pudiese ver los cuerpos ensangrentados.
Ahora caminaba a su celda después de hablar con Styles y darle detalles de su misión exitosa. Está tan feliz con su pequeño bolso de piel entre su pecho y sus botas derrapando el suelo de concreto.

La felicidad es un sentimiento extraño, es escaso cuando aquel sentimiento esta dentro de el.

Pero se sentía bien.

Al entrar a su celda, un cuerpecillo corrió a el, abrazando con fuerza su dorso y besando sus labios.

— Te extrañe demasíado amor—

La carita de Zain demuestra preocupación y angustia.

— No me gusta que vayas a esas estúpidas misiones. No quiero que algo malo te ocurra, me preocupa demasiado, Liam yo no sé que haría sin ti, ¡oh Dios no! No quiero pensar en eso, puedo mor......

— Tengo algo para ti—

Zain parpadeo perplejo mirando ese rostro sereno, no entendía a qué se debe eso, pero conociendo a Liam dijo...

— No lo arruines diciendo que tú pene —

Entonces Liam negó, tomando la mano del moreno y caminar a la cama de abajo, dónde se sentó palmeando su regazo para que Zain fuera a el.

— Cierra los ojos —

Zain sobre el regazo de Liam asintio emocionado, el reo nunca le regala algo, no es esa clase de novio que da detalles cursis.

Entonces sintió algo dejado sobre sus manos, sin dejar de sonreír espero alguna indicación.

—¿Que eres para mí Zain?—

El moreno lo pensó bien, hay tantas repuestas, pero solo una correcta.

— Tu protegido—

— Lo eres si, pero no es lo que quiero escuchar —

Zain volvió a pensar ¿Que es para Liam? Su novio, su protegido, su zorra, Su....

Princesa, Soy tu princesa

Entonces recibió un beso en sus labios, no uno apresurado, uno lento que sorprendió a Zain, por qué Liam no acostumbra a besarlo así, sin embargo, lo disfruto, le encanta besarlo, le encanta saber que el comenzo el beso.

— abre los ojos—

El menor hizo lo pedido, observando primero a su amor regordete antes de bajar está a sus manos.

No logro contener su llanto, está vez no llora por qué Liam fue un imbécil.
Una corona de plástico brillante con cuentas de color rosa que simulan ser diamantes, se encontraba en sus manos, el motivo por el cual llora, es que ese reo de cuerpo fornido y puños de acero, había conseguido una coronita para el, por qué es su princesa y siempre lo será.

— Mi amor esto es hermoso, gracias —

Inspeccionó el objeto en sus manos, es hermosa aún siendo de plástico. Lo que hizo hoy Liam, había terminado de enamorar a Zain, ese acto de bondad, de amor, lo había conmovido tato que no dudo en llorar.

—Deja te la pongo—

La corona fue arrebatada de sus manos para después ser dejada sobre su cabeza. Liam observo lo adorable y hermoso que se ve su moreno. Tan suave y limpio, sin importar que está sumergido en una prisión.

— Joder que hermoso —

Zain sorbio su nariz antes de salir del regazo de Liam y caminar con rapidez al viejo espejo en el lavamanos, observando su reflejo. Después de tantos meses, por fin se sentía bonito.

— ¡Me gusta mucho!—

Comenzo a dar saltitos emocionado antes de caminar de nuevo a su reo.

— Me encanta como te miras—

Entonces Zain se lanzó a sus brazos, antes de sentir un bulto bajo el, frunció el ceño mirando abajo.

— oh—

— No pude controlarme—

PROTEGIDO ( Ziam)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora