CIENTO VEINTIUNO

3.8K 654 408
                                    

Tropiezo con mis pies en la oscuridad de la ciudad mientras me obligo a mi mismo a llegar al muro de ladrillo al final de la calle

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Tropiezo con mis pies en la oscuridad de la ciudad mientras me obligo a mi mismo a llegar al muro de ladrillo al final de la calle.
Siento que mi cuerpo podría colapsar en cualquier momento, me es imposible respirar.
Las lágrimas no me dejan ver pero intento con todas mis fuerzas no enfocarme en lo que mi cabeza dice.

Minho.

Minho.

Minho.

Quiero seguir llorando, mi cuerpo lo pide con toda necesidad, pero no puedo detenerme, no puedo hacerlo.
Changbin me ayuda jalando de mi brazo, puedo verlo soltar varias lágrimas antes de llegar al lugar.

Los chicos se miran entre sí, pensando rápidamente como cruzar aquél alto muro en nuestras condiciones.
Jeongin es el primero en subir, estirando su brazo desde lo alto para que Felix y Bin desde abajo ayuden a Seungmin a trepar hasta ahí y tomar la mano de Yang.
Así lo hacen sucesivamente, cruzando casi todos hacia el otro lado.

Todo mi cuerpo tiembla, el nudo en mi garganta y el dolor en mi pecho me advierte que pronto me daré por vencido.

Changbin, siendo el último, trepa el mural y una vez arriba me estira su mano para atraparme. Se que podrá hacerlo, que me tomara con tanta facilidad que me subirá en un instante.
Me muestra seguridad en su mirada, y sé, que en cuanto tome su mano, no me dejará caer.
Y quizás ese es el problema, tal vez no quiero que me atrape, tal vez quiero quedarme.

¿Debería irme?

¿Debería irme después de haber dejado a Minho morir de esa manera?

¿Debería seguir viviendo?

No...

No me asusta morir, me asusta vivir así, vivir sin él.

Su recuerdo me dolería toda la vida, y sé, en el fondo de mi alma, que no volvería a amar a otra persona como lo hice con él. Porque de igual forma no fuimos nada, pero lo fuimos todo al mismo tiempo, cuidé y cuidó de mi hasta el último de mis días.
Y quizás este es el último de mis días...

No sé como decirlo, ninguna palabra sale de mi boca, no hay forma de enfrentar a Bin. No quiero romper su corazón, no quiero que se sienta culpable por dejarme ahí.

—¡Jisung rápido!—Agita su mano para que la tome pero me alejo unos pasos hacia atrás. —¡Jisung! ¿qué estás pensando? vámonos, hay que largarnos antes de que la electricidad vuelva.

Lloro, porque sé que no podría cruzar con todo el peso de mi corazón, sé que mi corazón vivirá en agonía apenas cruzar el muro. Al cruzar ese muro, sé que vendrá el después y...

... No hay después...

Después no hay después.

—Lo siento...

IN YOUR MIND [BORRADOR]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora