IN YOUR MIND [BORRADOR]

OCHENTA Y NUEVE

Minho me evita, no quiere verme y no entiendo la razón. Se supone que yo soy el que está enojado, bueno, no enojado...

... me siento...
...decepcionado...

¿Por qué actúa así?

¿Por qué primero se acerca y luego se aleja de mí como si no fuera nada para él?

Él actua tan indiferente, con su rostro inexpresivo que tanto me gusta, con ese ceño fruncido al que todos le temen y la cabeza en alto, siempre tiene la cabeza en alto, como si se fuera a comer el mundo.
Pero entonces su mirada choca con la mía y parece que el mundo tiembla, mi mundo lo hace. Tengo ganas de correr hacia él y llorar, de gritarle lo mucho que me dolía estar lejos de él, y lo horrible que es su indiferencia. Mi mundo parece congelarse ante esa intensa mirada, que pronto se aparta de la mía como si fuera lo más fácil de hacer.

Él...

... No quiere verme...

Y quizás es lo mejor.

Minho desapareció el resto de la semana, dejando un nuevo vacío en mi estómago y pecho. Changbin y los chicos se quedaron a hacerme compañía cada vez que podían, sabían que agonizaba ante la indiferencia de Minho, pero todos decían que era lo mejor y que me haría bien estar lejos de él.

No lo creo así...
... Creo que mi cuerpo muere un poquito más cada minuto que estamos lejos...

Changbin recibe una llamada que cambia completamente su expresión, Felix se preocupa pero Bin insiste es que es mejor que no sepan nada. Yo, por otro lado, me mantengo en silencio, mirando fijamente sus ojos y metiéndome una vez más en su mente mientras lo veo ponerse de pie con suma urgencia y toma mi mano sin perder tiempo.

—Te llamaré luego. —le dice a su novio y seguido me arrastra para sacarme de la cafetería.

¿Qué ocurre?

¿Por qué me voy con él?

¿A dónde me lleva?

«Escapó»

«¡¿cómo que escapó?!»

—¿Quién escapó?

Changbin me mira sobre su hombro, confundido y sin saber que decir.

—¿Qué has dicho?

—Pregunté ¿quién escapó?

«¿Acaso puede leer mentes o que demonios?»

—Necesito que me des una respuesta, Bin ¿quién escapó?

«Pf, está demente, o me estoy volviendo loco.»

—¡Bin responde mi maldita pregunta!

Se detiene en la puerta de su auto, mirándome con sus ojos brillos. Sé que está a punto de llorar, quizás no por tristeza, es por miedo.

Bin está asustado.

¿Por qué?

¿De qué?

¿De quién?

—Hyunjin, Hyunjin escapó.

No entiendo, pero mi cuerpo tiembla al oír su nombre, intento mantenerme calmado, soltando un fuerte suspiro y apartando mi mirada.

—¿De qué hablas? ¿de dónde escapó?—Ladeo la cabeza —¿de qué estás...?

Se muerde el interior de la mejilla. Está asustado, ni siquiera me ve a los ojos.

—Le prometí que no te lo diría, pero estamos en otra situación y...

—¡Ve al punto Changbin!.

Abre la puerta del auto y me obliga a subir en el, en cuanto lo tengo al lado un suspiro sale de sus labios.

—Minho... —Clavo mis ojos en él en cuanto lo nombra —Minho atrapó a Hyunjin como por dos semanas y lo torturó por lo que te hizo, la idea era matarlo en estos días pero escapó, no sabe como pero lo hizo y...cree que viene por ti, así que debo llevarte a un lugar seguro.

Conduce con tanta imprudencia que me obligo a sostenerme de mi asiento. Hay pánico en su voz, también en mí.  Su miedo es contagioso.

—Bin, creo que te estas alterando, deberíamos...

—¡No tenemos tiempo!—Exclama y cierro mis ojos ante su grito—¡Debo dejarte en un lugar seguro!

Un lugar seguro.

No hay lugar seguro.

—Pe-pero... —Se dirige a zona norte, definitivamente miles de preguntas golpean mi cabeza mientras vuelvo a voltear mi vista hacia él.—¿Lugar seguro? ¡¿qué lugar seguro?! ¿dónde me llevas?

—Minho es lo más seguro ahora.