IN YOUR MIND [BORRADOR]

SESENTA Y CINCO.

Minho ha estado callado mucho tiempo, está leyendo, si, está leyendo un maldito libro. Debo admitir que llevaba un buen rato mirándolo. La verdad es que resultaba difícil verlo así, tan tranquilo leyendo.

Tan malditamente sexy.

—Detente —Dice en un tono de voz demasiado alto. Parpadeo varias veces sin comprender a lo que se refiere.—Me estás interrumpiendo, es molesto.

¿Interrumpiendo...?

—Lo siento—me acomodo en la silla. Sus ojos vuelven al libro pero segundos después los dirige a mi, con su ceño fruncido.

Me mantengo en silencio ante su mirada sin saber muy bien qué hacer.

¿Lo estoy molestando? ¿debería acaso irme a otro lugar de la casa?

Tal vez...

...¿mi presencia le molesta?

Doy un salto en mi lugar cuando cierra el libro de un solo movimiento, seguido lo lanza hacia la mesa y se pone de pie para acercarse a mí, arrodillandose delante mía mientras su ceño sigue igual de fruncido que antes.
No comprendo su actitud, de cerca parece preocupado pero no he hecho nada para provocar tal preocupación.

¿Qué ocurre?

¿Qué pasa?

¿Lo hice enojar?

¿Está enojado conmigo?

La comisura derecha de su labio se curva hacia arriba como una sonrisa egocéntrica mientras se inclina más a mi. Por un segundo me vuelvo más tranquilo, pero tal tranquilidad desaparece cuando pasa sus fríos dedos por mi mejilla y los desliza por mi cabello.

Está muy cerca.

«¿No te estoy dando la atención suficiente, Jisung?»

—¿Qu-qué?

Su lengua humedece sus labios y mi vista se detiene en ellos unos segundos. Luego vuelvo a mirarle a los ojos.

—¿Tú estás bien?—Se apresura a preguntar —¿quieres hablar de algo? O... hacer algo, quizás, no sé, creo que no te estoy dando la suficiente atención estos últimos días.

¿Qué está diciendo?

Los últimos dos días ha estado encima de mi todo el tiempo, curando y cambiando los vendajes de mis heridas, traía pastillas que seguramente se las había entregado Changbin para los dolores y también para poder dormir.

¿A qué se refiere con que no me ha dado atención?

Tengo suficiente atención de él...

Minho había sido lo suficientemente atento conmigo, y hoy por fin podía verlo relajado, leyendo tranquilo un libro hasta que mi pensamiento invasivo lo interrumpió.
Así que no sé qué responder con exactitud, solo sé que estoy agradecido con él.