Capítulo 51.

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Cassian:

Dos semanas después...

Desde aquella discusión con Luna, nada ha vuelto a ser lo mismo en el departamento, se siente solo y tan vacío, fui un imbécil en decirle esas cosas, cosas que no eran ciertas, jamás pensaría así de ella pero los malditos celos me cegaron por completo, dije cosas que no debía y la hice sentir mal.

Cometimos el error de agobiarla con nuestros cuidados, pero es que queríamos cuidarla, queríamos que estuviera tranquila pero por lo visto eso es lo menos que conseguimos.

Los señores Moretti al enterarse pues casi nos asesinan, no es para menos le dijimos cosas a Luna que no debíamos, todo por los celos.

Hoy íbamos a ir a casa de los Moretti a hablar con la señora Anne, para que nos ayude con Luna porque queremos que nos perdone.

Cedrik ha estado muy callado desde que ella salió del departamento, casi no duerme ni come, eso me asusta porque así estaba cuando mamá había muerto, se había metido en su mundo y la depresión lo estaba carcomiendo de a poco.

Luego de media hora ya estábamos en la casa de los Moretti, cómo siempre nos recibió Enzo -muy molesto- pero lo hizo.

—No hablen, Luna está en la sala hablando con mamá y Nina —asentimos— lleguen en silencio, Luna está algo alterada.

Caminamos hasta la sala y vimos a Luna de espaldas, usaba un vestido color blanco y su cabello estaba recogido. La señora Anne estaba al frente de ella y Nina sentada en el pequeño sofá del frente.

—No llores mi amor —nos miró— eso le hará daño al bebé.

—No puedo evitarlo mamá —sollozó— las hormonas me tienen así, sabes que jamás lloro así porque si, pero... Mi bebé me hace llorar.

—¿No piensas hablar con ellos? —preguntó Nina.

—Si quiero pero mi orgullo de mierda no me deja, las palabras de Cassian me dolieron mucho, ni siquiera me prestaron atención cuando les dije que nuestro bebé sería varón.

¿Varón? joder, Nuestro bebé sería varón, mire a Cedrik y este solo miraba a Luna con suma tristeza en sus ojos.

—Ay mi niña, a veces los hombres son unos tontos —ella la abrazó—, estarán bien, habla con ellos y soluciónenlo ¿Si? Ustedes son adultos y podrán hacerlo bien, solo sin palabras ofensivas —nos miró—, porque si escucho a mi hija llorar de nuevo, me la llevaré a Italia muy lejos de ustedes.

Luna inmediatamente se separó del abrazo y miró detrás de ella, al vernos solamente en sus ojos había tristeza, pero estaba hermosa, siempre lo ha Sido y ya su vientre estaba creciendo más y más, es la primera vez que la vemos desde que salió del departamento aquel día, pues no nos ha querido ver.

Cedrik corrió hasta ella y se arrodilló y la abrazó, luego empezó a llorar.

—Lo lamento tanto cielo... —parecía un niño— lamento haber Sido tan cruel y haberte gritado aquel día, soy un idiota, un gran idiota que detesta la soledad en ese departamento... Por favor perdóname.

—Cedrik levántate —Luna pidió con lágrimas en sus ojos.

—No —se aferró más a ella—, no te soltaré hasta que me perdones y me digas lo idiota que soy.. Vuelve a casa cielo, Cassian me está volviendo loco.

Ella rió leve, luego acaricio su cabello y tomo su rostro, luego limpió las lágrimas de su rostro.

—Si fuiste un idiota —el asintió— y totalmente exagerado, yo también lo fui, tenía que entender que estaban cuidándonos a ambos —tocó su vientre.

Luna y el Desamor |+18| #2 de la Trilogía Moretti. -Finalizada-✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora