¿EL KYMAN ES REAL?

Capítulo 29: Si hay algo qué presumir éste es un espacio de confianza

Arte: yoquierodibujar

Aclaración: De acuerdo con las reglas actuales de Wattpad, se afirma que todos los personajes (implicados en situaciones sentimentales y eróticas) tienen 18 años o más, son mayores de edad.

Kyle volvió la mirada a la puerta al escuchar a Kenny anunciándose como mejor sabía hacer, con total indiscreción. Le dedicó una mirada reprobatoria, aunque era como querer detener un balazo con la mano. El rubio siempre se desenvolvía como si estuviera en su propia casa y era lo suficientemente ameno como para reprimirlo.

Pasó la mirada hacia Cartman, apenas notando que iban de las manos, tan campantes hacia su habitación. ¿Cuándo había pasado eso?, ¿había olvidado que estaba frente a su hermano? El calor en su rostro se hizo evidente. Se soltó del agarre para bajar los escalones que habían subido.

Eric se sintió irritado al instante en que Kyle se apartó. Había aceptado de buena gana, se suponía que iban a tener sexo en cada rincón del lugar. ¿Por qué mierda tenían que lidiar con Kenny justo ahora?

Kyle volvió la mirada a él para indicarle que no se quedara ahí lamentándose y que lo siguiera.

Al entrar a la cocina encontraron al rubio con los cachetes inflados de tener mucho qué masticar. Veía con cariño a una galleta, su próxima víctima. Ya que los advirtió en el lugar, se llevó esa galleta y la dejó entre sus labios. Entrelazó sus manos y apoyó su cara en ellas.

— Mh, hey. Es fin de semana... deberían salir a celebrar su unión. Por fin, después de... mghjh —medio dijo el rubio con la boca llena—. Sheila debería vender esta mierda, es mejor que algunas drogas que andan por ahí...

— ¿Tú vas a salir? —Preguntó el pelirrojo, sin saber bien cómo empezar la charla. Kenny alzó su mirada para verlo como si creyera que eso era una obviedad.

Parecía que no se quedaría lamentándose por su situación con Stan. Así podría superarlo rápido... pero eso también le demostraba a Kyle su falta de seriedad.

— Deberían venir conmigo. Unos tragos, un buen baile... aunque tal vez no lo necesiten si ya iban directo a lo privado. Eric no pierde el tiempo... — Se sacudió como si eso fuera motivo de emoción.

— No hables de forma tan libre de eso, Ken. Recién somos novios, tú crees que nosotros... tan rápido... —tropezó con sus palabras al ver la sonrisa amplia de su amigo, quien enredaba un dedo en un mechón dorado. A Eric también le divertía ver su intento de mentira sobre su aparente falta de intimidad—. Ah, cállate... ¿tú qué sabes, de todas formas? —Kyle intentó sonar casual.

Entonces Kenny resopló y miró hacia el cielo al pasar bocado. Luego estiró la mano en la mesa—. Pásame la leche, que esto tiene su chiste.

Eric sabía que esa plática se acercaba a un lugar peligroso. Kenny estuvo cerca de arruinarlo en la tarde, y ahora... Sus ojos se abrieron por completo al escuchar la pregunta y la respuesta emocionada por contarlo todo. ¿Qué tan mala idea sería provocar la muerte de Kenny ahora?

Kyle se levantó para pasar la leche, sin importarle que tomara directo. Quería saber qué era aquello que requería el buen uso de toda la boca de Kenny.

En ese movimiento, Eric le dedicó una mirada asesina al rubio, quien levantó las cejas con curiosidad de por qué no podía decirle a su ahora novio lo mucho que lo había querido por años.

— Voy a sepultarte vivo, Kenny —le susurró con hostilidad, a tiempo de que Kyle volviera. El rubio lo miró aún más sorprendido. Sabía que podía cumplirlo si decía algo de más.