¿EL KYMAN ES REAL?

Capítulo 81: Yo cuidaré de ti

Arte: yoquierodibujar

Aclaración: De acuerdo con las reglas actuales de Wattpad, se afirma que todos los personajes (implicados en situaciones sentimentales y eróticas) tienen 18 años o más, son mayores de edad.

En cuanto entró a la residencia, Kyle supo que se sentía muy diferente a la última vez que había estado ahí. Para su sorpresa, Ike lo recibió con un abrazo. Había llegado corriendo de las escaleras y lo hubiera apretado con mayor fuerza si él no metía las manos, en un reflejo de defensa.

— ¿Qué pasa?, ¿cuánto tiempo me fui? —soltó una risa y le dio unas palmaditas al niño que casi estaba de su tamaño.

— ¡Mamá vuelve la próxima semana! Papá y yo hablamos con ella y preguntó por ti. Él le dijo que no te sentías bien —el canadiense lucía más emocionado que nunca pero también ansioso. Tardó en soltarle y hacerse el disimulado tras ese gesto que se había vuelto menos común entre ellos conforme crecían.

Kyle comenzaba a sentir la presión de la noticia, pero disimuló—. Qué bueno, pero debería volver porque nos extraña, no porque esté preocupada por mí. Ya me siento mejor —mentía. Sólo pensar que Eric se había ido a su casa hacía un desastre en su interior, como si le faltara el aire todo el tiempo, por más respiraciones profundas que tomara. Y no sabía por qué.

— ¿Y te divertiste con Cartman? —Ike usaba un tono que no le gustaba al pelirrojo, quien refunfuñó entre las risas del niño—. ¿Podrías decirle que saque nuevos videos?, creo que así me entero más de ustedes que cuando logro sacarte algo a ti.

— Deberías dejar de ver tantos videos y hacer tus deberes —dijo Kyle.

— Ash, siempre los hago antes, "mamá" —rezongó el menor sin notar el sobresalto de su hermano mayor—. Como sea, estaré en mi cuarto por si necesitas algo.

— ¿Okay? Yo también... —contestó Kyle, extrañado con la actitud ajena.

Se preparó para dormir y ya rumbo a su cuarto notó la bolsa recargada en la puerta. Sonrió ante la buena disposición de Stan y la tomó. Cerró su puerta con seguro. Siempre había sido privado con sus cosas, pero ahora no veía ni un poco posible que alguien que no fuera él entrara a su cuarto. Que entraran y vieran su cama, sobre todo.

Se sacó toda la ropa que había usado en el día, con excepción de la sudadera roja. Después sacó el resto de la ropa y la acomodó entre las cobijas mientras él también se acurrucaba en ese espacio repleto de prendas, pero también de un olor que le devolvía el aliento.

Y aún así sus ojos se aguaron. Sus brazos se ciñeron con anhelo a la almohada que Eric suele usar cuando se queda en su cuarto. Enterró su rostro lloroso en ella, sólo permitiéndose esa sensación. Quizá era la impresión de saber por lo que estaba pasando, sin poder decirlo en su propia casa por miedo. Se sentía atrapado en medio de una decisión, ¿sería la más importante de su vida? No se lo había cuestionado, pero todos esperaban que lo supiera. Instinto materno, planes futuros, amor...

¿Por qué había creído que podía estar solo con semejante revuelo en su mente? No podría dormir, eso ya era seguro. Pasaron varias horas donde se dispuso a repasar la charla con Tweek en esa tarde. Recordó la prueba de embarazo y la buscó en su pantalón para esconderla al fondo de un cajón de su escritorio.

Tomó su teléfono cuando recordó la petición de Ike. Fue a su lista de Ver más tarde en YouTube y buscó el famoso video que tenía muchas más vistas de las que pensaba, ¿habían aumentado en esas semanas? Tenía de portada una foto de ambos en la cafetería, parecía ser de antes de su acuerdo, o sería que él siempre tenía esa cara tan seria.